La Fiscalía del Tribunal Supremo ha informado este jueves a favor de que Dolors Bassa, que se encuentra en la prisión de Figueras tras ser procesada por delitos de rebelión y malversación, sea excarcelada para una visita "puntual" a su madre, que tiene 87 años y va a ser sometida a una delicada operación quirúrgica en la cadera.
La Junta de Tratamiento de la prisión de Figueras también ha informado a favor del permiso extraordinario, sobre el cual tiene previsto decidir este viernes la sala de vacaciones del Tribunal Supremo.
Bassa, que fue consejera de Trabajo en el Gobierno de Carles Puigdemont, ha solicitado ser excarcelada para acompañar a su madre en el postoperatorio de esta intervención quirúrgica que, debido a su avanzada edad, presenta ciertos riesgos.
El Reglamento Penitenciario establece que, en caso de "enfermedad grave" de familiares cercanos, entre ellos los padres, se puede conceder "con las medidas de seguridad adecuadas, permisos de salida extraordinarios, salvo que concurran circunstancias excepcionales que lo impidan".
La Fiscalía se ha apoyado en este precepto para pronunciarse a favor de la petición de Bassa, siempre que estén garantizada su vigilancia y sea por el tiempo imprescindible para visitar a su madre y volver al centro penitenciario, señalaron fuentes del Ministerio Público.
Estas fuentes desvincularon el reciente cambio de Gobierno y de fiscal general de la decisión de informar a favor de la excarcelación de la procesada, que ha sido tomada por los mismos fiscales que se encargan del proceso por rebelión. La nueva fiscal general, María José Segarra, ha sido informada del criterio decidido y lo ha respaldado.
En caso de que le sea concedido por la sala de vacaciones del Supremo, Bassa será la primera de los procesados que logra un permiso para abandonar la prisión por unas horas. Hasta el momento, la Sala Penal del Supremo ha rechazado excarcelar a los encausados para asistir a sesiones del Parlament, un supuesto muy diferente del amparado por el precepto citado del Reglamento Penitenciario.
Dadas las fechas, la decisión no está ahora en manos de la Sala Penal sino de la sala de vacaciones, en la que, además, es previsible que no esté ningún miembro de la jurisdicción penal porque el magistrado al que correspondería intervenir, Antonio del Moral, está recusado. La sala de vacaciones está presidida por Ángel Calderón, presidente de la Sala de lo Militar.
Dolors Bassa fue procesada el 23 de marzo por poner locales pertenecientes a la Consejería de Trabajo al servicio de la celebración del referéndum independentista del 1-O conociendo que su celebración era ilegal por estar suspendido por el Tribunal Constitucional. De acuerdo con el auto de procesamiento, también "permitió la utilización de su departamento para soportar parcialmente el gasto derivado de imprimir las papeletas para la votación, así como de elaborar el censo electoral o de hacer las citaciones a los componentes de las mesas electorales".
La exconsejera se encuentra en la prisión de Figueras (Gerona) desde el pasado 4 de julio, cuando el Ministerio del Interior aprobó su traslado a Cataluña desde la cárcel de Alcalá de Henares (Madrid).
Desde entonces se vienen celebrando concentraciones de apoyo a la procesada delante del centro penitenciario. La última de ellas fue una cena popular que tuvo lugar el pasado martes. La hermana de Bassa leyó una carta en la que la exconsejera agradecía las muestras de apoyo y contaba cómo trabajadores de la prisión le enseñaban fotos de la concentración que ella no podía ver por estar en un módulo situado en el lado opuesto a la entrada.
Bassa insertó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que señalaba: "Buen provecho! Que tengáis una buena cena! Gracias por acompañarme! Os escucho y os siento cada martes en el corazón con más fuerza. Gracias por vuestra perseverancia".