La ministra de Justicia, Dolores Delgado, ha cesado a la magistrada de enlace en el Reino Unido, Gemma Gallego, a la que el anterior titular del departamento, Rafael Catalá, nombró el pasado mayo.
Se trata de un cargo de carácter discrecional que tiene por función facilitar la tramitación de los expedientes judiciales entre España y los países donde existe esa figura (Francia, Italia, Reino Unido, Marruecos y Estados Unidos). Gallego es la única cesada. Esta magistrada vivió en 2006 un tenso enfrentamiento con Baltasar Garzón, íntimo amigo de Delgado, con ocasión de la tramitación de un procedimiento en el Juzgado de Instrucción número 35 de Madrid.
Gallego era entonces titular de ese Juzgado y acordó dejar sin efecto la imputación, acordada por Garzón, de tres peritos de la Policía Científica que realizaron para el sumario del 11-M un informe sobre el ácido bórico encontrado en el lugar de los atentados. Ese informe fue mutilado por sus superiores porque mencionaba que esa misma sustancia fue hallada en 2001 en un piso franco de ETA en Salamanca.
Gemma Gallego no sólo exoneró a los peritos sino que sentó en el banquillo a los cuatro mandos de la Comisaría General de Policía Científica que habían intervenido en la alteración del informe pericial para suprimir la mención a ETA. Finalmente la Audiencia Provincial de Madrid, que avaló la desimputación de los peritos acordada por Gallego, también absolvió a sus superiores.
Ese episodio fue utilizado en 2010 por Garzón para intentar que Gemma Gallego, en ese momento vocal del Consejo General del Poder Judicial, no interviniera en la decisión sobre la suspensión cautelar del entonces juez de la Audiencia Nacional tras su imputación por el Tribunal Supremo.
Voto a favor de suspender a Garzón
Garzón presentó al CGPJ un escrito en el que se refería a la "manifiesta animadversión" de Gallego hacia él, lo que fue rechazado por el órgano de gobierno de los jueces. Gemma Gallego participó en el Pleno del CGPJ que, por unanimidad, suspendió cautelarmente a Garzón en la función jurisdiccional. Ya no volvería: fue condenado e inhabilitado por las escuchas ilegales a los imputados del caso Gürtel.
Gallego empezó a ejercer como juez de enlace en el Reino Unido el pasado mayo y ha intervenido en la euroorden cursada por el Tribunal Supremo para la entrega de la exconsejera catalana Clara Ponsatí.
Fuentes del Ministerio de Justicia citadas por Europa Press explicaron que este departamento está preparando un real decreto para regular el nombramiento de los jueces de enlace y que Delgado no iba a cumplir los requisitos porque "carece de experiencia en cooperación internacional".
Gallego fue durante cinco años miembro de la Red Europea de Consejos Generales e intergrante de la Comisión de Relaciones Internacionales del CGPJ. Desde 2015 forma parte del Grupo de Expertos del Consejo de Europa que monitoriza la implementación del Convenio de Estambul contra la violencia de género.