El exjuez espiado en el caso Villarejo señala al traficante de armas Monzer Al Kassar como instigador de su vídeo sexual
El excomisario era su enlace con la inteligencia española hasta que fue detenido en 2007 y enviado a Estados Unidos
28 septiembre, 2018 03:36El exjuez de Marbella F.U, espiado en el caso Villarejo y que aparecía en un vídeo de contenido sexual en poder del excomisario, señaló en su declaración judicial ante la Audiencia Nacional al traficante de armas sirio Monzer Al Kassar como instigador de esa grabación.
El exmagistrado, que trabaja ahora como abogado en la Costa del Sol, explicó ante el juez Diego De Egea que no había sido extorsionado nunca con ese vídeo en los últimos años y que nadie había intentado presionarle con él. Pero sí en 2007, cuando desde su juzgado instruía una querella del traficante de armas Monzer Al Kassar contra Rifaat Al Assad, tío del presidente de Siria Bachar Al Assad y al que la Audiencia Nacional investiga desde 2017 por un presunto delito de blanqueo de capitales. Un litigio relacionado con un conocido edificio de Marbella.
Según la versión aportada por F.U, el vídeo de contenido sexual fue grabado en 2006, en casa de un empresario chileno cercano a Al Kassar. "Nos fuimos a su casa con dos señoritas y estábamos haciendo lo que estábamos haciendo... y el caso es que este señor me intentó hacer chantaje, se le dijo que no y lo puse en conocimiento de la fiscalía de aquí".
A las preguntas del fiscal, el exjuez explicó que prefirió no denunciar formalmente la existencia del vídeo por el contenido personal del mismo y que el empresario chileno "sencillamente desapareció. Al día siguiente dejó Marbella". "Se plantó en mi despacho con el vídeo, yo le dije que le iba a denunciar y hasta hoy no le he vuelto a ver. Se fue corriendo de mi despacho, se bajó los dos pisos corriendo, y yo creo que se fue corriendo a Chile", explica en otro pasaje de su declaración judicial
El exmagistrado aporta además otro argumento para mantener que el traficante de armas sirio, preso en Estados Unidos, estaba detrás de su vídeo sexual: poco tiempo después, los abogados que representaban a Al Kassar en el procedimiento que seguía vinculado con él, acudieron a pedirle disculpas por el suceso. Desde ese momento (2007) y hasta hoy, nadie había vuelto a hablarle del tema. Hasta que el equipo de Asuntos Internos llamó a su puerta para contarle que el vídeo había sido encontrado en manos del excomisario Villarejo y de un empresario que mantenía un litigio desde hacía años con uno de sus clientes.
La conexión Villarejo-Al Kassar
En las conversaciones incautadas al excomisario Villarejo sobre este asunto, el ex alto mando de la policía, ya jubilado y ahora en prisión preventiva, mantiene que ese vídeo ha salido de manos del Centro Nacional de Inteligencia. Sin embargo, hay un detalle que obvia. El hecho de que él mismo era el oficial encargado de servir como enlace entre el traficante de armas sirio afincado en Marbella desde 1984 y los servicios de Información españoles. En esa tarea, le acompañaba también otro de los imputados en la causa: el comisario Enrique García Castaño, entonces máximo responsable de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) de la Policía Nacional.
Según reflejan las crónicas de la época, Al Kassar fue detenido en 2007 en una operación de la DEA y acusado de vender armas para atentar en suelo estadounidense. El comisario Villarejo prestó declaración a su favor tanto para intentar frenar su extradición por la colaboración prestada por el empresario sirio, como en el juicio que se siguió contra él en Estados Unidos, donde fue condenado a 30 años de prisión.
De hecho, la detención de Al Kassar supuso un importante punto de inflexión en la relación entre Villarejo y García Castaño. El día que el traficante de armas sirio fue detenido, al bajar de un avión en el Aeropuerto de Barajas, Al Kassar tenía una reunión preparada con García Castaño para hablar sobre la operación con misiles que preparaba en Colombia. No le dio tiempo, ya que fue arrestado nada más bajar del avión por la propia Policía para atender la petición de Estados Unidos. Algo por lo que Villarejo señaló siempre a su compañero en el cuerpo.