Los dirigentes históricos del sindicato Comisiones Obreras celebraron este viernes un acto en homenaje y apoyo a Rodolfo Benito, condenado por el uso de las tarjetas 'Black' de Caja Madrid por el Tribunal Supremo y una de las personas que deberá ingresar en prisión antes del próximo viernes por contar con una de las condenas más elevadas del caso.
El evento en favor de Benito, exsecretario de Organización de CCOO condenado a tres años de prisión por apropiarse de 140.000 euros con el uso de la mencionada tarjeta de representación, no ha estado exento de polémica. Sus amigos, ex dirigentes del sindicato, pidieron un donativo de 50 euros a cada asistente al acto convocado en un principio en la cafetería del edificio Abogados de Atocha de la calle Sebastián Herrera de Madrid, que lleva ese nombre por los abogados sindicalistas asesinados por un grupo de Extrema Derecha en el año 1977. A la reunión de este viernes acudió por ejemplo, Antonio Ruda, coordinador estatal de Hostelería del sindicato.
Mensaje de los compañeros de Rodolfo Benito pidiendo un donativo para sufragar el acto.
Cuando los actuales delegados del sindicato se enteraron de la convocatoria, según fuentes directas, decidieron prohibirlo en el mencionado edificio, sede de los servicios jurídicos del sindicato. Finalmente, el acto se celebró en una librería frente a dicha cafetería, en la misma calle, según pudo comprobar EL ESPAÑOL.
El encuentro
En el interior de la librería, los asistentes pudieron compartir una copa de vino y un aperitivo con Rodolfo Benito, que era, sin duda, el protagonista. Dispusieron unos tablones de madera sobre unas burras en el espacio con grandes cristaleras a la calle aunque con unos estores que no dejaban ver claramente el interior.
Convocatoria para homenajear a Rodolfo Benito.
La celebración acabó pronto, porque algunos asistentes se dieron cuenta de la presencia de una cámara de vídeo en el exterior. Aseguraron que allí dentro "se celebraba un cumpleaños" y cundieron los nervios. Pronto, regieron los bártulos y se acabó la fiesta. Rodolfo Benito salió de la librería acompañado por un grupo de amigos. Con un abrigo de plumas para evitar el frío de una noche desapacible en todos los sentidos, recorrió la calle con tranquilidad y una sonrisa en la cara.
El Tribunal Supremo considera probado que tanto Benito como los otros 63 consejeros que utilizaron la mencionada tarjeta de Caja Madrid eran conscientes de que lo que hacían era legal, "cualquier hijo de vecino" lo sabría, según la sentencia, y que provocaron un grave perjuicio a la entidad.
Sin embargo, quienes convocaron el "encuentro de amistad" en su honor confían en su "honradez" y pedían "apoyarle frente a las consecuencias de la condena que conlleva su ingreso en prisión y el pago de una elevada suma". Solicitaban que cada asistente contribuyera con 50 euros de donativo para sufragar los gastos del evento en el que también se explicarían los "pasos legales que van a darse (recursos y otros) y que están en fase de preparación".
NOTA: En la primera versión de este artículo se incluyó por error a Javier Lopez, antíguo secretario general de CCOO en Madrid como uno de los asistentes. El exresponsable sindical nunca acudió al encuentro.