Igor el Ruso, el asesino confeso de dos guardias civiles y un ganadero en Andorra (Teruel) el 14 de diciembre de 2017 ha declarado este miércoles por videoconferencia desde la cárcel de Zuera (Zaragoza) ante el juez de Bolonia (Italia) que instruye los dos asesinatos que cometió en abril, antes de emprender su huida a España. Norbert Feher reconoció ser el autor de los asesinatos de David Fabbri y Valerio Verri y, como ya hizo en Teruel, justificó que actuó solo en defensa propia.
Norbert Feher asesinó a Fabbri en el bar que éste regentaba en Ferrara el 1 de abril de 2017. Según la versión que ha dado ante el juez este miércoles, "fui a cobrar los 10.000 euros" que se supone que la víctima debía a un conocido cuyo nombre no ha querido desvelar, según han detallado a EL ESPAÑOL fuentes del caso. Si saldaba la deuda, Feher asegura que se quedaría con el 10%, es decir, con mil euros. Fabbri consiguió arrebatarle de las manos el arma con la que golpeó a Feher antes de que éste desenfundase una segunda arma y acabara con su vida.
El asesino huyó y apareció seis días después en Ostellato, un minúsculo municipio italiano situado a 45 kilómetros de donde cometió el primer asesinato siete días antes. La casualidad quiso que los policías Marco Ravaglia y Valerio Verri intentaran parar en un control rutinario el Fiat Fiorino Blanco que conducía Feher. El fugitivo aceleró y abandonó el vehículo unos metros más adelante para sorprender a sus víctimas.
"Tenía un arma en la mano"
Feher disparó primero a Ravaglia, que sobrevivió a los tres disparos que le alcanzaron haciéndose literalmente el muerto. Desde el suelo escuchó las últimas palabras de su compañero: "¡Pero qué coño has hecho, has disparado a un agente de la policía provincial!", según consta en la declaración que él mismo hizo tras aquel episodio. Igor el Ruso reconocía este miércoles que disparó a Ravaglia "porque tenía un arma en la mano" y que acto seguido mató a Verri "porque pensaba que iba armado". Es el mismo argumento que utilizó para justificar los tres asesinatos que cometería ocho meses después en Teruel.
Desde aquel segundo asesinato nada se supo de Igor el Ruso hasta que fue detenido la madrugada del 15 de diciembre en Mirambel (Teruel) unas horas después de haber asesinado al ganadero José Luis Iranzo y a los guardias civiles Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero. Igor el Ruso ha evitado dar pistas sobre el paradero de los cómplices que le ayudaron a huir y se jactó de "nunca traicionar a mis amigos". El asesino confeso ha vuelto a decir que llegó a España atravesando Francia y ayudado únicamente por una bicicleta, imposible de creer si se evalúa el kit de supervivencia que le requisaron cuando fue detenido: más de 26 bolsas repletas de vestimenta y enseres útiles para la vida diaria de cualquier persona.
Sentencia el 25 de marzo
Ocho meses después de su huida de Italia, Iranzo le sorprendió en el interior de su masía en El Saso, una explotación ganadera perteneciente a Andorra (Teruel), y Feher le disparó. Ante la juez de Alcañiz (Teruel) dijo también que lo hizo en defensa propia, pero el ganadero no llevaba ningún arma encima. Este miércoles, Feher desveló que tras cometer su primer crimen en Aragón y robar la pick up de su víctima prefirió no huir. Igor el Ruso volvió al refugio donde escondía sus pertenencias únicamente para "recoger mi Biblia". Allí lo sorprendieron los guardias civiles Romero y Caballero cuando el padre de Iranzo llamó pidiendo auxilio tras escuchar los dos disparos que acabaron con la vida de su hijo. Feher se escondió y los atacó por detrás hasta acabar con sus vidas.
El juez que instruye el caso en Italia ha declinado solicitar una prueba psicológica más, como solicitó el abogado de oficio de Feher. Tras tomar declaración al acusado, el magistrado dictará sentencia en un auto que se hará público el 25 de marzo.