María Jesús García, jueza de vigilancia penitenciaria que saltó a la fama por su doble trabajo como tarotista y vidente, no para de sorprender. Después de superar una investigación del Consejo General del Poder Judicial, ahora se lanza a buscar el amor en un programa televisivo de citas.
García, que pronto dejará su destino en Lugo para ejercer su trabajo en un Juzgado de Violencia sobre la Mujer en La Coruña, ha enviado un vídeo de presentación al programa First Dates en el que afirma que busca el amor y que "prefiere que sea un hombre más joven que yo porque aunque tengo 56 años parezco mucho más joven".
La jueza avanza también las aficiones que espera compartir con esa persona a la que busca conquistar: "el deporte, los animales y el mundo esotérico", como ha difundido ya el periódico gallego El Progreso.
Los dos últimos hobbies que María Jesús García cuenta en el vídeo eran ya un secreto a voces entre sus vecinos de Lugo y entre buena parte de los españoles. Hace pocos meses saltó a la fama al descubrir un periodista que era ella quien dejaba decenas de folletos en los parabrisas de los coches del centro de Lugo anunciando exitosas sesiones de esoterismo.
"Tarotista y vidente con gran experiencia. Echa cartas del tarot en persona. Solo arcanos mayores", se podía leer en las cuartillas publicitarias que ella misma imprimía. Pronto se supo que no era la única excentricidad de la jueza, que acudía a los juicios con su gato, demoró la puesta en libertad de un preso por irse al gimnasio o pidió un permiso para irse a trabajar como stripper en Canarias, motivo éste último por el que también fue investigada por el órgano de los jueces y no sancionada.
También han sido llamativas sus declaraciones sobre mujeres denunciantes de violencia machista, cuyas declaraciones puso en duda. Dudosa carta de presentación para el puesto que pasará a desempeñar. Si el programa televisivo de citas decide al final aceptarla, la polémica está servida.