La titular del Juzgado Central de Instrucción numero 3 de la Audiencia Nacional, María Tardón, ha ordenado a primera hora de este lunes la entrada y el registro del domicilio del abogado de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, en una operación que afecta él y otros investigados por un presunto delito de blanqueo de capitales relacionado con el narcotráfico. Tras el examen de su vivienda, la comisión judicial se ha dirigido al despacho profesional de Boye para su registro.
Según ha podido saber EL ESPAÑOL, la investigación, coordinada con la Fiscalía Antidroga y llevada a cabo por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) , está relacionada con operaciones inmobiliarias irregulares del narco gallego José Ramón Prado Bugallo, Sito Miñanco, al que Boye ha representado en algunos procesos penales.
Prado Bugallo, con un extenso historial criminal vinculado al contrabando y al narcofrático, fue condenado el pasado enero por la Audiencia de Pontevedra a cuatro años de prisión y seis millones de euros de multa por blanquear dinero procedente de tráfico de drogas a través de la sociedad Inmobiliaria San Saturnino, SL, con sede en Cambados, con la que adquirió numerosas propiedades. Boye fue su defensor en esta causa.
Las mismas fuentes señalaron que Gonzalo Boye tiene la condición de investigado en el procedimiento que tramita la magistrada Tardón pero no está detenido. La instructora ha decretado el secreto de las diligencias.
La investigación es totalmente ajena a la causa que se sigue contra el expresidente catalán Carles Puigdemont, de cuyo equipo de defensa forma parte Gonzalo Boye. El letrado asistió la pasada semana al político cuando se presentó ante las autoridades de Bruselas debido a la euroorden cursada contra él por el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena.
Sin embargo, el expresident ha asegurado desde su cuenta de Twitter que es una forma de impedir que haga su trabajo.
La causa de la Audiencia Nacional por blanqueo se tramita en secreto desde hace meses y, de acuerdo con las fuentes consultadas, los indicios contra Boye aparecieron hace más de medio año.