No han pasado ni 48 horas desde su integración en el Gobierno como vicepresidente y Pablo Iglesias ya ha provocado la primera reacción crítica del Consejo General General del Poder Judicial (CGPJ). Le pide "prudencia y mesura" y apela a la "responsabilidad institucional para evitar la utilización política de la Justicia".
El líder de Podemos, que en esa condición siempre ha hablado de "presos políticos" en referencia a los condenados por la secesión unilateral de Cataluña, persiste en su discurso descalificador de los jueces desde su nueva posición institucional y el martes manifestó en Antena 3 que "es una humillación para el Estado español que jueces europeos le quiten la razón a jueces españoles".
"Lo que ha ocurrido es que muchos tribunales europeos han quitado la razón a algunos jueces españoles y eso me parece que deja en mal estado a nuestra justicia", afirmó Iglesias, que calificó de "situación absurda" el contraste entre la situación de los prófugos Carles Puigdemont y Antoni Comín, ambos reconocidos como europarlamentarios, y la del líder de ERC Oriol Junqueras, al que se ha retirado el acta de diputado europeo por haber sido condenado como dirigente de la secesión unilateral de Cataluña.
Sólo el TJUE y el TEDH
El presidente del Tribunal Supremo y del órgano de gobierno de los jueces, Carlos Lesmes, no ha tardado en convocar una reunión extraordinaria de la Comisión Permanente del CGPJ en la que se ha aprobado un comunicado para aclarar que "el Poder Judicial persigue en todo momento el cumplimiento de la Ley y la defensa de los derechos reconocidos a todos los ciudadanos españoles, fundamento de nuestro Estado Social y Democrático de Derecho".
"Esa tarea -continúa el escrito- incluye la colaboración con el Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TJUE) y con el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), únicos tribunales europeos a los que se subordina la jurisdicción española en el ejercicio de sus competencias".
La Comisión Permanente recuerda además a Iglesias -que confundió el dictamen del TJUE con el de decisiones de países como Alemania o Escocia en relación con las euroórdenes- que "no existe subordinación" con esos tribunales.
Por todo lo anterior, concluye el comunicado, el CGPJ "apela a la moderación, prudencia y mesura y a la responsabilidad institucional para evitar la utilización política de la Justicia o el cuestionamiento de la independencia, la imparcialidad y la profesionalidad de los jueces y magistrados que integran el Poder Judicial".