La Audiencia Provincial de Madrid revisará la absolución del excomisario José Manuel Villarejo por el delito de denunciar con falsedad al general Félix Sanz Roldán. La Fiscalía de Madrid ha decidido recurrir el fallo absolutorio dictado por el juez Jesús de Jesús, que exculpó al expolicía de esa acusación por considerar que ni el honor del antiguo responsable del Centro Nacional de Inteligencia ni el correcto funcionamiento de la Administración de Justicia se vieron afectados,ya que la denuncia que interpuso Villarejo contra Sanz Roldán no llegó a ser admitida a trámite.
La Fiscalía pidió un año de prisión y 12.000 euros de multa para Villarejo por acusar falsamente a Sanz Roldán de haber filtrado a la prensa una foto del excomisario durante un viaje a Melilla, donde participó, según él como agente encubierto, en una operación contra el yihadismo.
El recurso, de cuya presentación ha informado este jueves la Fiscalía, indica que el delito de denuncia falsa, “aunque sin duda se trata de un delito contra el buen funcionamiento de la Administración de Justicia, lo cierto es que también, en un plano indirecto, afecta al honor de la persona respecto de la que se efectúa la falsa imputación de unos hechos, que de ser ciertos serían constitutivos de delito”.
Para el fiscal, la presentación de una denuncia por delitos de la entidad del descubrimiento y revelación de secretos oficiales y de colaboración con organizaciones terroristas contra el exdirector del CNI afecta al honor de la persona, “sin obviar la circunstancia de que distintos medios de comunicación se hicieron eco de la noticia y la publicaron”. De hecho, eso fue lo que motivó que Sanz Roldán se dirigiese a la Fiscalía General del Estado para que actuara.
Por lo que respecta al argumento del juez de que Villarejo "no obró con conciencia de ímputar hechos falsos", el fiscal incide en un momento determinado del juicio cuando el acusado, ante la pregunta relativa a la razón por la que afirmaba que Sanz Roldán era la persona que tenía en su poder esa foto y la había remitido a la prensa para su publicación, se limitó a decir "porque era el máximo responsable del CNI".
La respuesta incluyó otras explicaciones como que Sanz Roldán "es el que llama a los medios de comunicación”, al tiempo que Villarejo le atribuyó la capacidad para “echar a periodistas” y que, por lo tanto, la persona que filtró la foto fue Sanz Roldán o alguien autorizado por él.
Pero, según el fiscal, Villarejo nunca tuvo "acreditado tal extremo, ni tampoco ninguna prueba ni indicio en tal sentido, lo que consideramos que entra bien dentro del conocimiento de la falsedad o, al menos, en el temerario desprecio hacia la verdad que exige" el delito.
El recurso encuentra un punto de apoyo en la declaración del excomisario José Luis Olivera, que acompañó en ese viaje a Melilla a Villarejo, del que es estrecho amigo. Olivera declaró en el juicio como testigo y manifestó que no sabía quién había tomado la foto ni quién la había podido “filtrar” a la prensa.
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