Juan Carlos I fue beneficiario de dos 'trust' creados en los años 90 con fondos desconocidos
Con ese dinero se montó en 2004 otra estructura fiduciaria sin indicios de vinculación con el emérito, por lo que la Fiscalía archivará la investigación.
7 febrero, 2022 13:38La Fundación Lucum no fue la única estructura financiera vinculada a Juan Carlos I y creada en el extranjero. Mucho antes, en 1995 y 1997, el entonces jefe del Estado fue beneficiario de dos trust llamados Tartessos y Hereu [heredero, en catalán] a los que se aportaron fondos cuyo origen no ha podido ser determinado con certeza en la investigación llevada a cabo por la Fiscalía, dado que ya no existe documentación sobre ellos.
Ésta es una de las razones con las que el fiscal jefe anticorrupción, Alejandro Luzón, argumenta el archivo de las diligencias abiertas en noviembre de 2020 para investigar una información proveniente del Sepblac, el organismo encargado de detectar operativas de blanqueo de capitales, sobre un trust constituido en la isla de Jersey llamado JRM 2004. Esta estructura fue creada con los fondos procedentes de los trust Tartessos y Hereu.
Luzón entregó hace dos semanas a la fiscal general, Dolores Delgado, el decreto de archivo de estas diligencias y también los de las otras dos investigaciones realizadas sobre el patrimonio opaco del emérito: los fondos ocultados en Suiza entre 2008 y 2012 y las donaciones del empresario Allem Sanginés-Krause.
Los escritos no son un borrador, aseguran fuentes de la Fiscalía, sino que su contenido está ultimado y se hallan sólo pendientes de que Delgado, que les ha dado el visto bueno, dé instrucciones a Luzon para que los firme.
El escrito de archivo de las diligencias sobre las estructuras de Jersey ha sido anticipado este lunes por la Cadena Cope y en él se concluye que "no concurren indicios que permitan dirigir reproche penal contra S.M. D. Juan Carlos de Borbón y Borbón".
La falta de documentación sobre Tartessos y Hereu impiden obtener datos comprobables sobre el origen de los fondos de los que se nutrieron, mientras que el trust JMR 2004, nacido tras la disolución de Tartessos y Hereu y con los fondos de éstos, no tiene ninguna vinculación formal con Juan Carlos I.
Estructuras en un paraíso fiscal
Lo que sí queda acreditado, aunque carezca de cnsecuencias penales, es que Juan Carlos de Borbón fue, mientras era jefe del Estado, beneficiario de estructuras financieras montadas en un paraíso fiscal.
El trust es un instrumento económico y jurídico del derecho anglosajón por medio del cual se crea un patrimonio separado de la persona que lo constituye (settlor) y al cual transmite sus activos, para que un administrador (trustee) los administre en beneficio de quienes el originante designe (beneficiarios).
Es el trustee el que ostenta la titularidad de los bienes con la obligación de administrarlos en beneficio de las personas designadas como beneficiarios del trust o del fin establecido en el trust.
Un historiador detrás
The JMR 2004 Trust fue constituido en Jersey en marzo de 2004 por el historiador Joaquín Romero Maura, que fue consejero de Juan Carlos I, siendo designado como trustee (administrador) la sociedad Bermuda Trust.
La Fiscalía ha intentado localizar a Joaquín Romero para tomarle declaración, pero el historiador, que actualmente tiene 81 años, se encuentran en una residencia seriamente afectado por una enfermedad neurodegenerativa.
Romero Maura estuvo también conectado con Manuel Prado Colón de Carvajal, fallecido en diciembre de 2009. Ambos formaron parte del patronato de la Fundación Centro Rey Juan Carlos I de la Universidad de Nueva York tras su constitución en noviembre de 1993 bajo el patrocinio del jefe del Estado español.
Manuel Prado fue el que montó en 1995 y 1997 los trust Tartessos y Hereu, cuyos fondos sirvieron siete años después para constituir JMR 2004.
Juan Carlos I era el beneficiario de Tartessos y Hereu. De acuerdo con lo manifestado por el administrador de esas estructuras -de las que actualmente no existe documentación-, una parte de los fondos allegados a esos trust procedía de donaciones realizadas entre los años 50 y 70 para apoyar al sostenimiento del entonces príncipe Juan Carlos. Entre quienes aportaron fondos aparecen figuras como Simeón de Bulgaria.
Más allá de la información aportada por el trustee y las autoridades fiscales de Jersey, se desconoce con exactitud la procedencia de los casi 10 millones de euros que llegan a sumar los fondos de esos trust y no hay una base cierta para afirmar que se nutrieron de los fondos procedentes de KIO de los que se apropió Manuel Prado y por los que fue condenado y encarcelado, señalan fuentes de la Fiscalía.
Tartessos y Hereu se mantuvieron una vez Juan Carlos I que accedió a la jefatura del Estado con título de rey. La finalidad sería apoyarle "en el caso de que fuera depuesto por un golpe inconstitucional o una situación similar", según el decreto de archivo.
En 2004, “la situación política en España era estable, el heredero, hoy rey Felipe VI, acababa de contraer matrimonio, la monarquía gozaba de prestigio y el conocimiento público de la existencia de los trust, con la presencia en ellos de Manuel de Prado, ya entonces condenado por la Audiencia Nacional, hubiera exigido embarazosas explicaciones”. Juan Carlos I “decidió liquidar los trust y traspasar sus fondos a Joaquín Romero Maura”.
Sin indicios
El historiador constituyó el trust JMR 2004 y fue el único que dispuso de los fondos. Juan Carlos I deja de figurar como beneficiario y son la esposa de Romero Maura y el British Refugee Council los que aparecen como beneficiarios.
El decreto de Luzón indica que JMR 2004 ha tenido durante todos estos años una baja actividad y nunca ha habido disposiciones de fondos a favor de terceros.
De esta manera, "desde 2004 a 2021 no existe indicio alguno que permita vincular The JRM 2004 Trust con S.M. Don Juan Carlos de Borbón, no en su gestión ni en la capacidad para disponer de los fondos".
El rey emérito "en ningún momento ha tenido la condición de beneficiario ni consta que haya percibido cantidad alguna de sus cuentas.
"En todo caso", concluye, "a partir del 19 de junio de 2014, fecha en la que se hizo efectiva la abdicación de S.M. ele rey Don Juan Carlos I y quedó sin efecto la inviolabilidad e irresponsabilidad que para el Rey de España estalece el artículo 56.3 de la Constitución Española, las disposiciones del JRM 2004 Trust lo han sido en unas cuantías que en ningún caso alcanzarían la cuota correspondiente a un delito contra la Hacienda Pública, aun cuando tales fondos hubieran sido eventualmente entregados a un contibuyente español, algo de lo que no existe constancia alguna".