El juez del caso Mascarillas, Adolfo Carretero, ha ordenado la retirada del pasaporte a Luis Medina y Alberto Luceño, los dos imputados por la supuesta estafa millonaria al Ayuntamiento de Madrid. También les obliga a comparecer en el Juzgado cada 15 días.
Así lo confirman a EL ESPAÑOL fuentes cercanas al proceso. Este lunes, ambos han acudido a declarar como investigados a los Juzgados de la madrileña Plaza de Castilla. Sólo han respondido a las preguntas del juez, negándose a declarar a las del fiscal, las acusaciones populares y la particular, ejercida por el consistorio.
Según estas fuentes, durante el interrogatorio, ambos han vuelto a reconocer que entraron en contacto con la Administración municipal gracias a una llamada telefónica que Medina hizo al primo del alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida. Pretendían ofrecer mascarillas, guantes y test contra la Covid. Fue así —han relatado— como obtuvieron el correo electrónico de la responsable de compras de la funeraria madrileña, entidad que adquirió los productos sanitarios.
Asimismo, según ha manifestado ante la prensa Adolfo Barreda, abogado del PSOE, uno de los partidos que ejerce la acusación popular, el juez Carretero, para retirarles el pasaporte, ha apreciado "cierto riesgo de fuga", dado que ambos investigados tienen —especialmente, Alberto Luceño— negocios en el extranjero, a pesar de su arraigo laboral y personal en España.
Alberto Luceño está imputado por estafa agravada, falsedad documental y blanqueo de capitales. Y Luis Medina —hijo de Naty Abascal y del fallecido duque de Feria y hermano de quien hoy ostenta dicho título— por estos tres delitos, además del de alzamiento de bienes.
Fue la acusación popular ejercida por el partido Más Madrid la que solicitó al juez ambas medidas cautelares: la prohibición de salir de España y las comparecencias quincenales en el Juzgado. Podemos, también personado, se adhirió a estas dos peticiones, que el juez ha aceptado.
'Caso Mascarillas'
A principios de abril, la Fiscalía Anticorrupción presentó una querella contra Alberto Luceño y el aristócrata Luis Medina. En ella, el Ministerio Público relataba que ambos "inflaron" el precio de tres contratos sanitarios "de común acuerdo y con ánimo de obtener un exagerado e injustificado beneficio económico". Y entregaron al consistorio material defectuoso o que no cumplía lo acordado, en los peores meses de la pandemia de coronavirus.
Luis Medina cobró 912.742 euros como comisión, a razón de un dólar por cada mascarilla entregada al consistorio. Así lo ha reconocido este lunes ante el juez. Luceño, en total, más de cinco millones de euros por los tres contratos. E, incluso, este último habría ocultado a Medina que su comisión era varias veces superior, haciéndole creer que ambos recibirían cantidades idénticas.
Ambos se han ratificado casi totalmente en sus declaraciones prestadas hace más de un año ante la Fiscalía Anticorrupción. Sin embargo, como novedad, este lunes, Medina ha declarado ante el juez que ahora no se siente estafado por su socio, a pesar de la desigualdad de sus comisiones. Una diferencia que el aristócrata descubrió mientras le interrogaba el fiscal el 13 de abril de 2021.
Según la querella de Anticorrupción, los comisionistas usaron, supuestamente, documentos falsificados para justificar estos abultados ingresos en sus entidades bancarias. Y, con la compra de bienes de lujo —entre ellos, un piso en Pozuelo, un velero o varios coches deportivos— habrían tratado de reintroducir este dinero en el circuito legal.