El juez de la Audiencia Nacional José Luis Calama ha levantado el secreto sobre la investigación del supuesto espionaje sufrido por el presidente y varios miembros del Gobierno con el software Pegasus y ha citado como testigo al ministro de Presidencia, Félix Bolaños.
Así lo confirman a EL ESPAÑOL fuentes judiciales. Bolaños deberá acudir a declarar el próximo 5 de julio a las 9.00 horas.
Según el Real Decreto 136/2020, de 27 de enero, por el que se reestructura la Presidencia del Gobierno, entre las funciones del Ministerio de Presidencia está "la organización y la seguridad de las actividades del presidente del Gobierno, tanto en territorio nacional como en sus desplazamientos al exterior".
También es su competencia "el apoyo y asesoramiento técnico a los distintos órganos de la Presidencia del Gobierno" y "la asistencia en materia de administración económica, personal, mantenimiento y conservación, medios informáticos y de comunicaciones". Sin embargo, el citado decreto no alude explícitamente a la ciberseguridad.
Asimismo, Calama, titular del Juzgado Central de Instrucción número 4, ha acordado ampliar la comisión rogatoria cursada a Israel para que una delegación judicial encabezada por él se desplace a aquel país para tomar declaración como testigo al CEO de NSO Group, la empresa que comercializa el programa Pegasus.
El magistrado ya dirigió una primera comisión rogatoria para que la compañía informara sobre distintos aspectos de esta herramienta informática.
En el marco de esta investigación y mientras ha permanecido secreta, José Luis Calama ha tomado declaración como testigos, el pasado viernes, a la exdirectora del CNI, Paz Esteban, recientemente cesada, y al funcionario de ese organismo encargado de elaborar los informes sobre este asunto.
Tal y como publicó este periódico, el 24 de mayo, el Ejecutivo, a través de un acuerdo del Consejo de Ministros, aprobó que los técnicos que analizaron los teléfonos infectados pudieran revelar al magistrado información reservada acerca de su labor si éste les llamaba a declarar.
La investigación
Desde principios de mayo, la Audiencia Nacional investiga, tras una denuncia de la Abogacía del Estado, el supuesto espionaje sufrido por varios miembros del Gobierno central mediante el programa Pegasus.
La instrucción, que ha permanecido secreta hasta ahora, comenzó ceñida a los teléfonos del presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, y de la ministra de Defensa, Margarita Robles.
Luego, la investigación se amplió al hackeo al móvil del titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el intento de infección del ministro de Agricultura, Luis Planas.
A la primera denuncia de Abogacía, muy breve, se adjuntaron los análisis realizados por el CERT, adscrito al Centro Criptológico Nacional, dependiente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). El CERT (Computer Emergency Response Team) es un equipo dedicado a prevenir, detectar y responder a los incidentes de seguridad sobre sistemas informáticos.
En los primeros informes aportados con la denuncia, fechados el 30 de abril, se certifica que el móvil de Pedro Sánchez fue infectado en dos ocasiones durante el mes de mayo de 2021: los días 19 y 31. En la primera, se extrajeron 2,6 gigabytes de información y en la segunda, 130 megas. Ambas fechas coinciden con la crisis migratoria desatada en Ceuta, que supuso uno de los momentos de mayor tensión en la relación entre España y Marruecos.
Asimismo, los espías accedieron al móvil de Margarita Robles en junio de 2021 y robaron únicamente 9 megas de información. El pasado 10 de mayo, el Gobierno certificó un tercer hackeo: al ministro Fernando Grande-Marlaska, mediante dos ataques, iniciados ese mismo mes, en los que le fueron sustraídos 400 megas y 6,3 gigas. Y un intento fallido de infectar el móvil de Luis Planas.
Pegasus
A pesar de las elucubraciones —cada vez, de mayor contundencia— que apuntan a Marruecos, por el momento, se desconoce con exactitud quién ordenó utilizar el software Pegasus para infectar los terminales de miembros del Ejecutivo. Certificar ese dato es, además, técnicamente complicado. Ninguna de las denuncias de Abogacía detallan tampoco qué tipo de información fue capturada por el programa espía.
Pegasus puede acceder a todos los mensajes de texto y llamadas de un smartphone, ingresar a todas las aplicaciones (WhatsApp, Telegram, etc.) del móvil, localizar a su dueño a través de su posición GPS, activar la cámara o el micrófono, obtener sus contraseñas o extraer sus videos y fotografías.
Desarrollado por la empresa israelí NSO Group e ideado, en un inicio, como arma contra el yihadismo y otros tipos de terrorismo, sólo se vende, teóricamente, a Gobiernos de todo el mundo, previa autorización de las autoridades de Israel.