Tiene cierta fama la judicatura —y no es del todo merecida— de ser un ámbito conservador. Lo sea o no, la salida del armario de un juez relevante aún sigue siendo noticia. Y eso es, justamente, lo que hará el magistrado Joaquín Elías Gadea Francés, juez de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional desde 2020.
Fuentes cercanas al juez comentan a EL ESPAÑOL que Gadea ha decidido hacer pública su condición sexual, coincidiendo con la celebración del Orgullo LGTB.
El juez ha confiado a sus allegados que le marcó y le ha dado fuerza el ejemplo del hoy ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que en 2006, siendo también juez de la Audiencia Nacional, decidió desnudarse en una entrevista y revelar públicamente su homosexualidad.
"Aquello marcó mucho a Joaquín; en ese año era aún un opositor", comentan en el entorno de Gadea.
Sin embargo, Joaquín Gadea no pretende adquirir con ello un perfil público. También es menos popular que lo era Marlaska en su momento: es juez de refuerzo, no titular. La única intención de Gadea, confirman las mismas fuentes, es que su ejemplo "sirva y visibilice".
Según ha podido saber EL ESPAÑOL, ha sido el magistrado Manuel García-Castellón, el titular del Juzgado Central de Instrucción 6, una de las primeras personas que más le ha animado a dar el paso cuando se lo planteó.
Algunos magistrados llevan la etiqueta de jueces estrella. Gadea, miembro de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), al contrario, es uno de los jueces más discretos de la Audiencia Nacional. Se siente más cómodo cuando su nombre encabeza un auto que un titular del papel cuché.
En Tarragona durante el 'procés'
Nacido en 1981 en Cocentaina (Alicante), fue juez decano de Tarragona hasta septiembre de 2018. Antes, desde 2010 hasta entonces, titular del Juzgado de Instrucción número 1 de la misma capital. En una intervención en televisión en 2017, Gadea denunció la salida de jueces de Cataluña tras el procés y pidió que se les diera un complemento para permanecer allí.
Entre los asuntos que Gadea tiene ahora sobre la mesa están la supuesta cripto-estafa de Kuailian, la imputación del exjuez Fernando Presencia por calumniar a la cúpula judicial o la investigación del atentado de ETA en Santa Pola (Alicante) en 2002.
Gadea, con un brillante currículum, colabora también con García-Castellón en la instrucción de grandes y complejas causas como Tándem (conocida como caso Villarejo), Lezo o Púnica. Como juez de apoyo en el Juzgado Central de Instrucción 6, le acompaña Daniel González Uriel, cuya comisión de servicios ha sido recientemente prorrogada por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
En 2019, junto a Jesús María Barrientos y Mercedes Armas, Gadea fue de los magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que condenó a Joaquim Torra por desobediencia, después de que el expresident se negase a retirar la pancarta con lazos amarillos en apoyo a los presos del procés soberanista.
Seguramente a su pesar, la decisión de mostrar públicamente su homosexualidad, va a convertir a Joaquín Gadea en un juez más popular de lo que le gustaría. EL ESPAÑOL le ha trasladado la publicación de esta información que afecta a su vida personal.
Y ahora, su paso adelante, como para él supuso el de Grande-Marlaska, será ejemplo para futuras generaciones. Un ejemplo que, como él mismo pretende, visibilice y sirva.