El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 30 de Madrid ha levantado la medida cautelar que suspendía la emisión del sello de Correos que conmemora el centenario del Partido Comunista de España (PCE). De este modo, la juez permite ahora su distribución.
Así consta en una resolución, fechada este viernes, que estima las alegaciones de la empresa pública Correos, la encargada de la estampación.
La asociación Abogados Cristianos solicitó al Juzgado que se paralizase la difusión del sello, al considerar que rompía la neutralidad de la compañía estatal. Y la magistrada Carmen Casado, en un primer momento, lo aceptó.
La distribución, inicialmente, estaba prevista para el 14 de noviembre. Ahora, la magistrada —que la paralizó de forma urgente la semana pasada debido a la cercanía de dicha fecha, sin entrar en el fondo del asunto— recula y permite su difusión.
Contra esta decisión judicial, que condena en costas a Abogados Cristianos, cabe interponer recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Madrid.
Según explica el auto, la idea de este sello partió de una petición formulada, ante la Comisión Filatélica del Estado, por parte de Enrique Santiago, el secretario general del Partido Comunista de España, además de diputado en el Congreso y exsecretario de Estado de Agenda 2030.
No obstante, no pudo ser atendida en el año 2021, cuyo calendario ya estaba cerrado cuando se recibió la solicitud. Pero el 28 de octubre de 2022, se aceptó la estampación.
La juez, en su auto, explica que Correos sólo "distribuye y vende" los sellos, que la decisión de estampar estos símbolos fue tomada por el "órgano competente" y que la denuncia de Abogados Cristianos estuvo "motivada en razones de orden político".
La polémica también llegó Congreso de los Diputados. Tanto Ciudadanos (Cs) como PP y Vox se opusieron a este homenaje, en forma de sello oficial, al Partido Comunista de España.
Tal y como informó EL ESPAÑOL, los tres partidos alegaron que el PCE, lejos de luchar por la democracia durante el franquismo, pretendía derribar el régimen para instaurar un totalitarismo de signo contrario.
Los de Feijóo y Arrimadas sí reconocían el papel del Partido Comunista español en la Transición, pero subrayaron que sus dirigentes no mostraron un deseo de democracia hasta el fin del franquismo. Fuentes de Cs sostenían que homenajear al PCE es "conmemorar el odio, el crimen y la miseria".
El PP, por su parte, criticó el "autohomenaje", aludiendo a la condición de militantes comunistas de ministros del Gobierno, como Yolanda Díaz, titular de Trabajo, o Alberto Garzón, de Consumo. Y Vox anunció el registro en el Congreso de preguntas dirigidas al Gobierno para que revele el "coste de la campaña".