La Audiencia Provincial de La Coruña ha reducido en ocho meses la condena de cárcel impuesta al joven que, junto a otro varón, violó a una estudiante en el campus de la Universidad de Santiago.
Así consta en un auto de su Sección Sexta, fechado el pasado 24 de enero, que fija la nueva pena, frente a los 13 años originales, en 12 años y 4 meses.
La sentencia condenatoria, consultada por EL ESPAÑOL, recoge que el acusado drogó a la chica, a la que había conocido esa misma noche en un pub de la capital, para "anular su voluntad". Los hechos ocurrieron en la madrugada del 21 de octubre de 2011.
"Sin que se sepa cómo, el acusado hizo que [la víctima] consumiera inadvertidamente una sustancia química, una droga del tipo DFSA con fuerte poder analgésico y que produjo [la joven] un enlentecimiento de sus reacciones y que disminuyera profundamente su voluntad y entendimiento", señala la resolución.
"De forma que se convirtió en un ser dócil y privado de capacidad de análisis y defensa respecto de las sugestiones u órdenes que le formularan, careciendo de forma prácticamente total de capacidad de autodeterminación en la esfera sexual y de reacción ante las pretensiones sexuales de otros", añade.
La sentencia describe que, tras drogarla, el acusado abandonó el local junto a la víctima, a la que trasladó a "un lugar escondido situado en la parte posterior de la Facultad de Ciencias Políticas [de la Universidad de Santiago de Compostela]". A ellos se unió "otro varón que no ha sido identificado". El acusado, según relata el apartado de hechos probados de la sentencia, sujetó a la mujer "fuertemente por el cuello, para luego penetrarla".
"Fue objeto, por parte del acusado y del otro varón, de prácticas sexuales violentas, en el curso de las cuales fue penetrada vaginalmente con el pene por el acusado (...) y por el otro varón; y que consistieron o bien en múltiples penetraciones vaginales violentas con el pene, o bien en la introducción en la vagina de objetos o miembros corporales voluminosos (puño o codo) o en penetraciones simultáneas, que produjeron un desgarro vaginal y abundante sangrado a la víctima", señala.
El acusado, además, se apropió de varios objetos que la mujer llevaba en su bolso. Concretamente, de un monedero, una cámara de fotos, un reproductor mp3, un pendrive y 50 euros en efectivo. El valor total de lo sustraído se tasó en 213 euros.
Por ello, también fue condenado por una falta de hurto y a medio año de prisión por las lesiones. El delito de abuso sexual, del que también fue acusado, quedó absorbido en el de violación, de mayor gravedad. Tuvo que indemnizar a la víctima con 50.000 euros.
Tras los hechos, la mujer fue hallada caminando sola, con la ropa ensangrentada, sobre las 6.40 de la mañana. Sufrió un desgarro en la zona genital y demás lesiones, que tardaron 60 días en curar. Tras los hechos, necesitó tratamiento psicológico a causa de su trastorno depresivo.
"El deterioro vital causado a doña Elisabeth es importante, con afectación social, formativa y personal", señalaron los jueces.