El exfutbolista Marco Borriello solicitará próximamente el archivo de la investigación judicial en su contra, iniciada por un supuesto delito contra la ordenación del territorio.
Así lo pedirá en un escrito que presentará en breve en el Juzgado de Instrucción número 3 de Ibiza. De hecho, antes, el próximo 25 de enero el deportista italiano deberá acudir a declarar ante el juez.
La Justicia investiga a Borriello debido a la ampliación de su chalé de lujo, ubicado en una zona costera de la isla, en el municipio de Sant Josep de sa Talaia.
Tal y como avanzó este periódico, un informe del Consell de Ibiza desveló que la reforma de la villa de lujo no contó con las debidas licencias y ocupó ilegalmente terreno protegido.
Por ello, el Departamento de Gestión del Territorio, Infraestructuras Viarias y Ordenación Turística del Gobierno ibicenco le impuso una multa de 1.265.958 euros. No obstante, el expediente sancionador ha quedado suspendido al haberse iniciado el procedimiento judicial.
El valor total de las obras realizadas en la conocida como Casa de los Arcos-Villa Margherite fue de 460.348,48 euros. Entre ellas, se incluyó la construcción de una piscina de 60 metros cuadrados y una escalinata que desemboca en la orilla de la playa y la demolición de un muro de contención de tierras y de tabiques.
No obstante, tras su declaración del día 25, en la que se acogerá a su derecho de no declarar, la defensa del italiano, ejercida por el letrado Víctor Soriano i Piqueras, solicitará el sobreseimiento libre de la causa.
Vista aérea de la villa.
Villa Margherite se construyó antes del año 1991; si bien, según la defensa del exjugador, la obra concluida no se adecuaba a la licencia concedida. Y, al tratarse de una edificación previa a dicha fecha, cuando fue aprobada la ley que delimita los espacios de protección medioambiental en Baleares, la vivienda no puede ser retirada.
Su abogado sí admite en el escrito que Borriello realizó obras en la casa. Y algunas de ellas, tal y como expuso el Consell, no son legalizables. "Pero se limitan a la instalación de porches y pérgolas (...), para los que ya ha solicitado al Ayuntamiendo de Sant Josep de sa Talaia una licencia de derribo para eliminar los elementos no legalizables", expone el escrito. "La voluntad del señor Borriello es cumplir con la legalidad urbanística y tener la casa en situación regular", añade.
Para toda esta reforma, Borriello está siendo asesorado por un arquitecto exdecano del Colegio de Arquitectos de Ibiza y por un ingeniero de caminos.
Otras obras sí son legalizables y Borriello, según expone su defensa, ya ha comenzado los trámites para ello. "En la medida en que dichas obras son legalizables, haberlas realizado sin licencia no constituye delito, sino una mera infracción administrativa leve", expone su abogado a preguntas de este medio.
En su informe, el Consell de Ibiza también reprochó al exfutbolista la construcción de una escalera que une la finca con el mar. El escrito firmado por Soriano detalla que, actualmente, se está tramitando una autorización para la conservación de la misma. La Demarcación de Costas, de hecho, se ha abierto a no demolerla, ya que contribuye a una hipotética evacuación del terreno.
En una ocasión, fue utilizada para evacuar por mar a los vecinos de la urbanización Es Cubells, donde se ubica la villa, tras unas lluvias torrenciales que bloquearon la carretera.
Con todos estos argumentos, la defensa del exfutbolista solicitará al Juzgado el archivo de la causa.
El exfutbolista decidió instalarse definitivamente en la isla tras su retirada, después de haber jugado en el UD Ibiza, del que pasó a ser directivo. Antes, el delantero había vestido la camiseta de tres clubes de su país: la Juventus, la Roma y el Milan. Con este último ganó una Champions. También ha sido internacional con la Selección italiana en siete ocasiones.