A pesar de todas las diferencias entre las ciudades europeas, todas comparten un objetivo común: la transición verde. La Comisión Europea lleva desde 2010 reconociendo el papel central de las urbes en este proceso. Este año fue Valencia por su compromiso con los espacios naturales, la conexión entre con la zona rural y la implicación de la ciudadanía. Valencia ha programado 380 acciones como Capital Verde 2024.
Marina Canal Fontcuberta, jefa de Prensa y Relaciones con los Medios de Comunicación de la Representación de la Comisión Europea en España, estuvo en el III Observatorio de los ODS organizados por ENCLAVE ODS | El Español | Invertia en formato vídeo y explicó por qué había sido elegida con este título.
El 70% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero vienen de las ciudades. Ellas consumen más del 65% de la energía mundial y en Europa, tres cuartas partes de la población viven en grandes urbes y pueblos. Solo el 25% está en zonas rurales. Por eso, dice Canal: "Las ciudades y sus habitantes son los grandes actores de esa transición verde".
La Ciudad de Valencia ha cogido el relevo de Tallin, capital de Estonia, como ciudad verde y es la primera vez que llega a orillas del Mediterráneo. Canal pone de relieve los espacios naturales de la ciudad y menciona los humedales de la Albufera, la huerta de Valencia o el Jardín del Turia, los espacios verdes en la ribera del río de la ciudad.
Y en cierto modo relacionado, Canal también destaca el sistema alimentario local sostenible, la política de kilómetro cero y la conexión entre las zonas urbanas de la ciudad y las zonas rurales. Todo eso, dice la responsable europea, hace a Valencia "una ciudad que está buscando soluciones verdes para mitigar la contaminación".
Los espacios naturales
La joya de Valencia es la albufera. Una laguna de agua dulce en la desembocadura del río Turia y Júcar. Es hogar de una rica biodiversidad, aves e insectos. Al firmar el Acuerdo Verde, Valencia se comprometía al avance en cinco indicadores clave: la calidad del aire, los recursos hídricos, la economía circular y la mitigación del ruido. Todo ello, ecoservicios que se pueden recibir de espacios naturales sanos.
Por eso, Canal recuerda: "La Albufera, que es una reserva natural y muy sensible, que merece una mayor protección para que pueda ser conservada para las generaciones futuras".
Es por estas personas del futuro que se hacen los esfuerzos en la transición verde en toda Europa. A pesar de las diferencias naturales que hay entre Valencia, Estocolmo, Bristol o Lisboa (Todas ellas ciudades verdes europeas) hay retos en común.
El tráfico, la contaminación, el acceso a energías renovables o conseguir una planificación urbana responsables son solo algunos de los desafíos a los que se enfrentan las ciudades. Luego están los detalles y particularidades regionales.
En junio, Valencia celebró la reunión anual de las 100 ciudades de esa misión europea de ciudades climáticas neutras. En estos foros es donde las ciudades exponen sus proyectos, los logros y lo que han conseguido. Y los fracasos, de los que también se aprenden. Es esa cooperación internacional lo que impulsa este título de Ciudad Verde Europea.
Por eso, Canal concluye su charla digital con una llamada a esfuerzo común. "Estamos juntos en una misión, aprendiendo unos de otros para lograr hacer frente a los desafíos a los que no enfrentamos en esta transición verde".
4. María Canal Fontcuberta, jefa de Prensa de la Representación de la Comisión Europea en España