Descarbonización y competitividad industrial. Esas son las dos cuestiones claves que preocupan al sector energético español. Y para ello, no sólo hay que seguir la senda de objetivos marcados en el PNIEC (Plan Nacional de Energía y Clima) sino también hay que contar con una regulación adecuada que facilite la inversión, tanto en redes, en renovables como en otras nuevas tecnologías limpias.
Así lo creen expertos de Endesa, Iberdrola, Naturgy y Repsol, las grandes energéticas españolas que han participado en el Ciclo de encuentros ‘Tendencias sectoriales para 2025 en España’, organizado por EL ESPAÑOL e Invertia en colaboración con EY.
"Hay apetito inversor en España por electrificar y por descarbonizar, especialmente los procesos productivos, pero si en estos años de atrás se ha puesto el foco en la generación, ahora toca ponerlo en la demanda", ha explicado José Casas, director general de Relaciones Institucionales y Regulación de Endesa.
Mesa redonda energía resumen
"Por eso, de los 9.600 millones de euros que tenemos de inversiones, el 42%, es decir, más de 4.000 millones, se dirigen a inversiones en red, porque la red se está convirtiendo en el gran cuello de botella para el cumplimiento no solo de los objetivos del PNIEC, sino también de las solicitudes de acceso a la red".
"Esos 4.000 millones están supeditados a dos elementos regulatorios importantes", añade. "El primero es que se elimine el límite regulatorio que hay de 1.800 millones de euros en distribución y en torno a 700 millones de euros en transporte. Y el segundo, que se supriman las incertidumbres regulatorias, sobre todo la tasa de remuneración WAC de retribución de la distribución para el periodo 2026-2031".
Por su parte, Patxi Calleja, director de Regulación de Iberdrola, ha destacado como principal objetivo para España y para Europa la autonomía energética. "El plan ahora no puede ser otro que el mismo que tiene Europa: industria, industria e industria".
"Tenemos precios más caros de gas y de petróleo que Estados Unidos, y así va a ser siempre porque hay que gasificar y transportarlo, y somos más sensibles a las crisis internacionales". De ahí que proponga impulsar "la autonomía energética, que solo puede venir a través de productos propios, como puede ser la electricidad y la competitividad".
De izda. a dcha.: José Casas, director general de Relaciones Institucionales y Regulación de Endesa, Patxi Calleja, director de Regulación de Iberdrola, Marta Sánchez, socia responsable del Sector Energía de EY, Luis Cabra, director general de Transición Energética, Tecnología, Institucional y adjunto al CEO de Repsol y José Luis Gil, director general de Gases Renovables de Naturgy.
En esa línea coincide Marta Sánchez, socia responsable del Sector Energía de EY. "En el PNIEC se habla de descarbonización industrial, de reducción de emisiones. Si hacemos una proyección de cómo tendríamos que avanzar para llegar a los objetivos de 2030, según un análisis de EY, tendríamos que multiplicar por seis el número de clientes industriales que avanzan en esa senda de descarbonización".
"También hay que seguir avanzando en los clústers industriales para desarrollar, sobre todo, los gases renovables, porque está claro que hay una industria que tiene emisiones difíciles de abatir y ese es el camino".
"Hay un tema muy importante, el de los contratos por diferencias de CO2, que ya se está trabajando en Europa y que este año tiene que dar sus frutos. Es un mecanismo que ya ha puesto Alemania y que permitirá mejorar la eficiencia de la industria y le ayudará a descarbonizarse", ha añadido la experta de EY.
"Gato negro, gato blanco"
"No debemos obsesionarnos mucho con determinadas cifras que se han puesto encima de la mesa y si las vamos a conseguir o no", ha opinado, por su parte, Luis Cabra, director general de Transición Energética, Tecnología, Institucional y adjunto al CEO de Repsol.
"Es decir, está muy bien, por ejemplo, decir que vamos a tener 12 GW (12.000 MW) de hidrógeno verde en España en 2030, cuando apenas hoy tenemos 22 MW en operación. O que se esperan cinco millones y medio de coches eléctricos y actualmente no superamos los 170.000 vehículos".
Mesa redonda energía declaraciones
"No quiero parecer negativo, pero va a ser difícil cumplir el PNIEC. Aunque lo que sí señala son las áreas en las que hay que trabajar". En su opinión, lo más importante es "hacer que sea la regulación la que facilite las inversiones y a la mayor velocidad posible".
"Hay que fijarse menos en una cifra o qué tecnologías tienen que avanzar o no, y sumar soluciones. Siempre me acuerdo del dicho: 'gato blanco o gato negro, lo importante es que cace ratones'. Lo importante es que todo lo que hagamos descarbonice y reduzca emisiones de CO2".
El futuro inmediato: los biogases
Por último, José Luis Gil, director general de Gases Renovables de Naturgy, ha recordado que "tenemos exceso en energía solar y, por tanto, el PNIEC queda absolutamente ambicioso en sus objetivos, la cartera eólica en desarrollo es prácticamente inexistente. Es decir, hacer eólica es muy difícil y en algunos sitios, como en Galicia, está prácticamente judicializado todo el desarrollo".
"Con el sector del hidrógeno había una cierta obsesión, pero no se va a desarrollar como se preveía estos años atrás. Se transformará prácticamente en un combustible que sea mucho más fácil de manejar, de almacenar y de llevar, como el amoníaco, el metanol, o bioetanol o ecotanol, o metanol sintético".
En su opinión, lo que está a punto de eclosionar de aquí a 2030 "va a ser claramente el mundo de los biogases o del biometano, porque la ambición y la expectativa que hay en proyectos de desarrollo es brutal".
"Ahora la cuestión es si el Gobierno decide que lo consumamos en el país, y para eso hay que traer industria y descarbonizar hogares, o directamente esos proyectos se comprometen con venta de combustible a 15 ó 20 años en Alemania".