El papel de las universidades como objeto de debate. Ese ha sido el eje central de la conversación mantenida este jueves por el director de Comunicación y Asuntos Públicos de la Universidad Europea, Sergio Calvo, y el subdirector de EL ESPAÑOL-Invertia, Arturo Criado, en la segunda y última jornada del III Foro de Educación, Innovación y Tecnología.
Calvo ha reclamado que la universidad amplíe su ámbito de acción y asuma "un papel más activo socialmente en el ecosistema en el que se encuentra". A su juicio, a las funciones propias de enseñar, formar y transferir conocimiento, hay que añadir una dimensión más, la de ser "un actor más que juega con sus pares en las mismas condiciones, que dinamiza el entorno social en el que opera".
Al tiempo, ha defendido la transformación de la universidad como "un lugar para el encuentro, para el diálogo, el debate, donde la diversidad se acepte y donde se pueda construir mirando hacia el futuro". Una variedad que, según explica, se registra plenamente en los campus de la Universidad Europea, que cuenta con cerca de un 40% de estudiantes internacionales.
La Universidad ante la revolución tecnológica y la inteligencia artificial
Uno de los grandes retos al que se enfrentan las universidades, ya sean públicas o privadas, es el de la transformación tecnológica y el de la inteligencia artificial. En el caso de la Europea, la apuesta pasa por "incorporar" el tremendo cambio cultural al que obliga la irrupción de estos avances. "A los estudiantes y a los profesores les decimos que enseñamos y aprendemos en IA y enseñamos y aprendemos con IA", destaca, incidiendo en la necesidad de que la institución sea capaz de "hablar en el lenguaje de los estudiantes".
La siempre compleja pero necesaria relación de la universidad con la empresa ha sido otro de los aspectos tratados en la conversación. Para el director de Comunicación y Asuntos Públicos de la Universidad Europea, un objetivo claro es el de la "empleabilidad". No obstante, ha apostado por superar un debate que se viene alargando desde hace años en relación con si las universidades se tienen que acercar a las empresas. "Dejemos de tender puentes y crucémoslos de una vez; porque no terminamos de cruzarlos", ha afirmado.
A su juicio, una de las claves para alcanzar este objetivo pasa por desarrollar grados de formación dual que ya funcionan en la FP. Y poro como ejemplo lo que sucede con Medicina, cuyos estudiantes interactúan directamente en los hospitales en los últimos años de formación. "Eso habría que hacerlo con todo, incorporando a las empresas en los planes de estudio y los programas", defiende.
En cuanto al papel de las universidades en la investigación, Calvo ha subrayado la labor de la Europea desde hace más de una década en este campo. Desde su punto de vista, en su condición de institución privada, la meta debe ser "hacer una investigación aplicada, que nos ayude en el contacto con la empresa. Y tiene que estar al servicio de la sociedad, de manera que podamos cubrir áreas que a lo mejor no se cubren desde lo público".
Calvo ha puesto en valor la capacidad de la Europea de atraer talento internacional, aunque sin perder de vista la implantación local. A modo de ejemplo, ha indicado que actualmente hay representadas más de 100 nacionalidades en los campus ya abiertos, al que se sumará en poco tiempo el de Málaga. "La virtud está en el equilibrio entre lo local y lo global", ha señalado.