José Luis Ábalos, ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha aprovechado la apertura del Simposio del Observatorio de la Movilidad para lanzar un rotundo mensaje sobre los planes de su ministerio en materia de inversiones: "La pandemia no suspende la agenda de reformas de este Gobierno, las ha hecho más urgentes. No puede aplazarlas, debe acelerarlas. El sector público debe contrarrestar con inversiones contracíclicas el golpe de la pandemia".
En este sentido, Ábalos ha destacado que estos proyectos tendrán un enfoque distinto al utilizado en crisis pasadas. "Este nuevo tiempo no puede ser un cambio de aspecto para hacer lo mismo. Se trata de cambios reales. A una serie de tendencias que ya teníamos identificadas la pandemia nos ha añadido nuevas prioridades. La Covid-19 ha provocado que los aspectos sanitarios ganen mucho peso dentro de la dimensión de la seguridad. Del mismo modo, la conciencia ecológica cada vez está más presente en este tipo de proyectos. Además, ha llegado el momento de priorizar la calidad del servicio frente al volumen".
Para dar entrada a todas estas novedades el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha señalado una serie de ajustes en la hoja de ruta. "Tenemos que contar con sistemas más inteligentes y más sostenibles ambientalmente. Necesitamos ser más resilientes", ha señalado.
Ábalos también ha destacado la importancia capital que tiene la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). "Hay elementos para ser positivos. Contamos con una perspectiva de aprobar unas cuentas ajustadas a la realidad actual. Unos presupuestos que aumentan la inversión un 55%".
De cara a convertir en realidades estos proyectos, el ministro ha señalado el papel clave que jugarán las empresas públicas como tractor de estas nuevas tendencias. “La digitalización y la sostenibilidad están presente en los planes de todas las empresas del entorno del Ministerio. Adif tiene en marcha su proyecto de ferrolineras y un importante plan de digitalización de estaciones. La iniciativa Renfe as a Service va a evolucionar el modelo de nuestro operador ferroviario. Por su parte, Enaire y Aena van a disparar su eficiencia energética con la que podrán autoabastecerse. Del mismo modo, el programa puertos 4.0 va a permitir mejorar la trazabilidad de las mercancías. En definitiva, una serie de proyectos que serán un antes y un después”.
El reto de la futura Ley de la Vivienda
En conversación con Pedro J. Ramírez, presidente ejecutivo y director de EL ESPAÑOL, tras su intervención inicial, Ábalos ha comentado las claves de la futura Ley de Vivienda. "Hay que tener en cuenta que va a ser la primera a nivel nacional de nuestra democracia. Va a garantizar la función social de la vivienda. La base de su éxito estará en su capacidad de conciliar todos los intereses. Estas semanas el foco está en los desahucios y hace unas semanas estaban en la ocupación. La sociedad necesita marcos de seguridad. Es importante no plantear todas las situaciones de desahucio de la misma forma. Ahora mismo, el nivel de este tipo de embargos residenciales es bajo. Además, no tenemos los mismos casos en todas las partes de España".
Como elemento clave en esta cuestión, el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha señalado a las soluciones para evitar llegar a estas situaciones. "Hay que poner el acento en la alternativa habitacional. Una cuestión en la que es clave el papel de los ayuntamientos y las comunidades autónomas. Por eso el plan del Gobierno trata de reforzar las capacidades de ambas instituciones".
Al ser cuestionado por las polémicas suscitadas en el ámbito de los alquileres, Ábalos se ha mostrado seguro en que su ministerio será capaz de crear un marco útil para todo tipo de ciudades. "Necesitamos que los alquileres se aborden dentro del marco de una Ley, no de un decreto. Debemos tener criterios objetivos sobre el mercado. Hemos avanzado mucho en tener indicadores de cómo está el mercado. Nuestro acuerdo programático incluye que, en determinados distritos de determinadas ciudades, los ayuntamientos podrán intervenir. También para incentivar que los ciudadanos vivan en determinadas zonas, algo de lo que no se habla. En cualquier caso, tampoco va a ser obligatorio para los ayuntamientos. Tendrán la capacidad. El que entienda que debe hacerlo lo hará y el que no, pues no lo hará.
Pago por uso en las infraestructuras
Al repasar el futuro de la financiación de las infraestructuras, Pedro J. Ramírez ha preguntado al ministro por su posición sobre la opción de que los usuarios paguen por el uso que realizan de las carreteras de alta capacidad. "Es preciso un acuerdo en este sentido. Tenemos unas necesidades de conservación que hay que afrontar. Con el presupuesto actual no habría pie para hacer obra nueva si tenemos que pagar el mantenimiento de estas vías. Además, no hay que olvidar que, a medida que vayan finalizando las actuales concesiones, aumentarán estos costes. En todas las infraestructuras de transporte -aeropuertos o ferrocarriles- se paga por el uso y no hay debate. Creo que estamos en un escenario de asumir retos".
En este punto el ministro ha querido diferenciar entre tipos de usuarios. "Debemos seguir ese viejo principio: trabajar en igualdad no es tratar a todos por igual, es reconocer las necesidades diferentes. Hay que darle oportunidades a todo el mundo. En el transporte pasa lo mismo. Nadie se plantea tratar a todos los que transitan de la misma manera, ni tener unos territorios con peajes que otras regiones no tienen. Hay que aplicar un principio de igualdad territorial y discriminar los ciudadanos por el uso que hagan de las infraestructuras. A las personas que las tienen que usar a diario y no tienen alternativa no hay que cobrarles. Existe tecnología para hacerlo. Si todas las administraciones alcanzamos un acuerdo va a ser mucho más fácil poner esto en marcha".
Tras abordar las claves del transporte por carretera, el ferrocarril ha pasado a protagonizar la conversación entre el director de EL ESPAÑOL y el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda urbana. "El proceso de liberalizción del transporte de pasajeros por ferrocarril ya está en marcha. Los operadores podrían estar operando ya pero la pandemia ha hecho que pidan retrasar su entrada en servicio. A nosotros mismos nos ha pasado algo similar con Avlo, nuestro proyecto de alta velocidad low cost".
"Lo importante, más allá de calendarios, es la apuesta por el ferrocarril de este Gobierno. Porque es una apuesta por la descarbonización y la digitalización. El transporte de mercancías por ferrocarril no llega al 4% en España. Tenemos que hacer que llegue a los puertos y garantizar la intermodalidad para mejorar esta cuota. Además, no hay que olvidar que los Cercanías son los que más pasajeros mueven. En los futuros presupuestos vamos a destinar 1.500 millones de euros a esta partida".
Rescate de Air Europa
Una de las decisiones más destacadas del actual Gobierno en el sector aéreo ha sido el rescate a Air Europa. Ábalos se ha mostrado convencido de que se trata de una decisión estratégica para el país. "El gobierno tiene que proteger el hub de Madrid. Es estratégico para el país. El caso de Air Europa es un ejemplo claro de lo que pretendía la norma que nos permitía ayudar a empresas que, siendo viables, la Covid-19 les había puesto en problemas. En este sentido, lo primero que tenía que hacer el Gobierno era salvar la empresa por su carácter estratégico. Es junto con Iberia nuestra bandera en el sector".
Del mismo modo, el ministro ha querido separar esta decisión de la fusión entre Air Europa e Iberia. Eso ya les corresponde a las empresas. Nosotros ahí no tenemos nada que decir. El rescate de Air Europa tiene como objetivo proteger el hub aéreo de Madrid y fortalecerlo. Todo lo que venga en ese sentido tendrá nuestro apoyo".
Por último, Ábalos ha querido destacar el papel que su ministerio va a jugar en el reparto de los fondos de reconstrucción. "Este es un ministerio inversor y tiene mucha experiencia en ello. Manejar estos fondos es un reto de gestión para nuestros procedimientos. Espero que la norma permita agilizar las inversiones en los tiempos que se nos exigen. Se nos tienen que abreviar algunas partes del proceso administrativo. El reto no son los proyectos, hay de sobra. La clave va a estar en la parte de concepción y materialización de la obra pública. Que todo esté empezado en 2023 y esté terminado en 2026".