Los vehículos con la etiqueta Cero Emisiones pueden aparcar gratis tanto en la zona verde como en la zona azul de Madrid. Es un ejemplo de cómo se intenta asentar la utilización del vehículo eléctrico en las ciudades. Sin embargo, ese tipo de ayudas conlleva una serie de contrapartidas que afectan a los ayuntamientos. Así quedó reflejado en una mesa redonda del III Observatorio de la Movilidad y las Ciudades organizado por EL ESPAÑOL-Invertia.
“En Pamplona, más del 30% del dinero que entra en el presupuesto municipal procede del coche: impuesto de circulación, multas… En esa ciudad idílica de sólo transporte público, vehículo cero emisiones, patinetes y bicicletas eléctricas… ¿de dónde vamos a cobrar ese 30%?”, se preguntó su alcalde, Enrique Maya.
Por tanto, y para hacer frente a esta transformación hacia lo eléctrico, los consistorios “necesitamos ingresos de otro tipo y no está encima de la mesa. Se quiere potenciar el coche eléctrico rebajando impuestos”.
Mesa redonda. El futuro de las ciudades y la movilidad
Por su parte, Alberto García Casas, responsable de Smart Cities de Iberdrola, indicó que es necesaria “cierta claridad en el terreno de juego a la hora de llevar a cabo los desarrollos. Cuanto más favorable sea la fiscalidad a la electrificación, mejor. Porque el ciudadano demanda un impulso en la fiscalidad de estos usos”.
El alcalde de Pamplona dejó claro que “no somos unos locos expulsando a los coches de nuestra ciudad. Queremos compatibilizar el uso del coche con otros modos de movilidad y ahí queda mucho trabajo por hacer. El coche se va a seguir utilizando, excluirlo es inviable”, remarcó.
Se están poniendo puntos de recarga, pero hay muchas dudas sobre cómo conseguir en un plazo determinado todos los que son necesarios para alcanzar las metas previstas. Y es que, por diferentes razones, como aquellas de índole técnico, no es fácil poner puntos de recarga en un parking de 500 plazas, por ejemplo.
“Es un camino que no tiene retorno, pero no termino de ver la foto final. Hablamos de ciudad sin coches en todas las ciudades, pero todas hablan del PERTE del vehículo eléctrico. Hay una cierta contradicción. Hay inseguridades como cómo crear puntos de abastecimiento en el centro histórico”, indicó Enrique Maya.
De ahí que Alberto García Casas puntualizara que la transformación “no tiene que ser inmediata. El vehículo eléctrico se está asentando cada día más, pero no vamos a pasar de cero a cien en un año. Se desarrollará la infraestructura necesaria para descarbonizar la ciudad”.