El equipo de Farmacia del Ministerio de Sanidad de Patricia Lacruz tiene muchos proyectos sobre la mesa. Y ahora tiene que pisar el acelerador para poner de nuevo en marcha los que la Covid-19 han dejado en stand-by.
Lacruz ha adelantado que su departamento está trabajando en una modificación del sistema de copago farmacéutico. Algo que estaba previsto en el pacto del Gobierno de Coalición, pero que no se había llegado a concretar.
Sobre cómo serán estos cambios, Lacruz se ha puesto la armadura y ha preferido no decir mucho. Lo que sí ha hecho ha sido abrir la posibilidad de que están "estudiando” ampliar los actuales tres tramos de aportación en función de la renta que tiene la población general.
Unas palabras que ha pronunciado durante el 'II Simposio Observatorio de la Sanidad: Las Lecciones de la Covid-19', organizado por EL ESPAÑOL e Invertia.
En la segunda jornada de esta cita con el sector sanitario, la directora general de Farmacia del ministerio de Carolina Darias se ha comprometido también a estudiar un posible cambio del modelo de pago hacia el cobro por servicios. Un modelo muy demandado por las oficinas de farmacia y que abre la puerta a un nueva fórmula de retribuciones.
Además, tal y como ha adelantado la propia Lacruz, esta posible modificación se enmarcará en la nueva Ley del Medicamento aunque, por el momento, no se puede avanzar mucho.
"Si el sector considera que es una cuestión a plantear, habrá una escucha activa y un análisis por nuestra parte", ha añadido.
Orgullo nacional
Si el Cid Campeador es el orgullo castellano por excelencia, las vacunas contra el coronavirus son el orgullo de la ciencia. Constancia de ello han dejado la mayoría de los ponentes que han participado este martes en la segunda jornada. Cita de la que han tomado parte los representantes de las 'Farmas' nacionales e internacionales que lideran la búsqueda de nuevos tratamientos contra la Covid-19.
Una industria que ha pedido su silla en el proceso de la redindustrialización española y que precisa de mejores inversiones, como ha reclamado Fernández Alcade, director general de Merck en España. "Si queremos ser Alemania o Suecia tenemos que invertir el 7% del PIB del país en la sanidad".
Y es que, la industria farmacéutica lo tiene todo para ser la Tizona de un Cid Campeador (que es España) capaz de liderar la recuperación económica en Europa. Referente internacional en ensayos clínicos, los representantes de las grandes farmacéuticas en España han pedido a las autoridades más inversión en I+D para ser un "polo de inversión" sobre el que se apoye la recuperación económica del país.
Recuperación que, según la oposición política, pasa por invertir y "saber contar". Por lo menos así lo ha reclamado Ana Pastor, diputada del Partido Popular y exministra de Sanidad, quién ha propuesto la creación de un juglar de pandemias (continuando con los símiles). Aunque ella no ha usado la epopeya castellana sino una formación concreta: la creación de una especialidad de comunicación de riesgo.
A su parecer, esta figura debería de estar ligada a la Agencia Española de Salud Pública y ser el transmisor de los avances de la pandemia mediante una perspectiva "transparente". Además, Pastor ha ejercido de azote del Gobierno, como miembro de la oposición, para recriminar la puesta en marcha de evaluaciones a profesionales sanitarios "cuando lo que necesitan es apoyos y medios".
Que las vacunas hayan sido un éxito contra la Covid-19 no se va a quedar sólo en el virus de Wuhan. Los responsables de relaciones institucionales de varias farmacéuticas han asegurado durante el Observatorio que los tiempos en los que un medicamento tardaba 15 años desde que tenía éxito en ratones hasta que pasaba a humanos "han terminado".
Aseguran que, gracias a la Covid-19, la relación entre las empresas farmacéuticas y las administraciones se ha optimizado para el beneficio de "los pacientes". "Un sistema sanitario sólido y digitalizado que permita medir biomarcadores ayudará a desarrollar la medicina personalizada", han argumentado.
Su opinión coincide con el del presidente de Farmaindustria y consejero delegado de Rovi, Juan López-Belmonte. "Necesitamos ser competitivos y mandar el mensaje de que España cree y apuesta por innovación. Y la mejor manera es que nos situemos en los mismos tiempos de aprobación de medicamentos y precios que los países europeos", ha asegurado.
La vacuna del CSIC
Pero, como no todas las batallas se puede ganar (hasta el Cid perdió a su hijo en la de Consuegra), siempre hay una piedra en el camino de la ciencia. En el caso español la 'derrota' es la paralización total de la vacuna contra el coronavirus del CSIC liderada por Mariano Esteban.
La suspensión sine die del ensayo en pacientes se debió, según ha explicado María Jesús Lamas, directora de la AEMPS, a un "riesgo incierto" pero "lo suficientemente grave" como para suspender el ensayo en humanos.
Y, aunque las vacunas estén copando la actualidad, no hay que olvidar el desarrollo de medicamentos contra la Covid-19. En ello están compañías como Lilly, Sobi y PharmaMar. José Antonio Sacristán, director médico de Lilly España, y Pablo de Mora, director general para España y Portugal de Sobi, han reclamado que las Administraciones "prioricen" los medicamentos contra el coronavirus, dada la emergencia sanitaria.
Por su parte, la compañía española afronta la última fase del ensayo clínico de su medicamento, Aplidin, que ha demostrado también resultados positivos en Covid persistente, tal y como ha confirmado su presidente, José María Fernández Sousa-Faro, durante la segunda jornada del Observatorio de la Sanidad.
Precisamente sobre ensayos clínicos han hablado Javier Malpesa, director de GDD y responsable de ensayos clínicos de Novartis y Teresa Millán Rusillo, directora de Asuntos Corporativos en Lilly, quienes han reclamado eliminar trabas burocráticas para agilizar la puesta en marcha de las investigaciones.
Mirando al futuro, la sanidad no sólo puede ser la palanca de un cambio económico. También social. Por lo menos eso cree Alberto de Rosa, director ejecutivo Europeo de Centene Corporation, que ve a España como un lugar para vivir. No gracias al sol o a los héroes clásicos: por su sistema sanitario.
Durante su conversación con el subdirector de Invertia, Arturo Criado, el experto ha recordado que España tiene un sector sanitario que puede ser "foco de atracción" para que "gente de otros países venga a residir aquí". "Tenemos que verlo como una oportunidad y prepararnos para ello".