Los gestores de inversión lo tienen claro: es el momento de sacar el dinero del colchón y empezar a invertir. Y, en el actual contexto, con la perspectiva de unos tipos de interés que van a seguir subiendo, la renta fija constituye una gran oportunidad. Tanto a corto como a medio plazo.
"Sin fijarse demasiado en el corto plazo, las oportunidades están en todas partes. Ahora tenemos los tipos de interés a nivels que no hemos visto en muchos años, las perspectivas son muy buenas", ha apuntado Ignacio Dolz de Espejo, director de Soluciones de Inversión y Producto de Mutuactivos, durante el III Observatorio de las Finanzas que organizan EL ESPAÑOL e Invertia.
En su opinión, en el corto plazo "donde hay oportunidades más obvias es en el mundo de la renta fija" y más allá de las letras del Tesoro, que están copando por ahora el interés de los inversores minoristas. De hecho, para Dolz de Espejo los CoCos que emite la banca "están ofreciendo rentabilidades espectacularmente atractivas en entidades que ahora no son parte del problema, sino de la solución".
"Este año es imbatible la renta fija", apunta, por su parte, Francisco Quintana, director de Estrategia de Inversión de ING, pues se trata del "único activo que te blinda lo máximo que puedes en un entorno macroeconómico muy incierto". No en vano, como ha expuesto Quintana, la economía ha pasado del riesgo de recesión a un optimismo "que quizás tampoco se sostenga".
Y "el único activo que te protege en caso de que ese optimismo no sea fundado es la renta fija a corto plazo". De hecho, en su opinión este va a ser "el año de la vuelta de la cartera clásica", es decir, aquella que diversifica entre renta variable y renta fija. "En el largo plazo lo que es una oportunidad fantástica es volver a esas carteras 60/40 que durante muchos años no tuvieron sentido", ha añadido.
Para Carlos García Ciriza, vicepresidente de ASEAFI y socio de Abante Asesores, "la renta fija se ha convertido en motor de rentabilidad", aunque es cierto que la rentabilidad de esta clase de activos "a corto plazo se te come la inflación".
"Los tipos reales están en negativo, el inversor particular no se está dando cuenta de eso, es engañoso", apunta García Ciriza, para quien la rentabilidad real de las letras del Tesoro es "negativa".
Además de que la rentabilidad de las letras del Tesoro está por debajo de la inflación, tanto el vicepresidente de ASEAFI como el director de Soluciones de Inversión y Producto de Mutuactivos coinciden al señalar como una gran pega de este activo que tiene "peor fiscalidad" que los fondos monetarios, que invierten en deuda a corto plazo. Se pueden sacar "las mismas rentabilidades con mejor eficiencia fiscal".
Para Quintana, "las ventajas desde el punto de vista técnico son nimias", si bien considera "maravilloso" que los clientes minoristas busquen alternativas para su ahorro y salgan "del trinomio" de tener una vivienda en propiedad, el dinero en la cuenta corriente y poca motivación al ahorro al contar con una pensión de jubilación. "Todo lo que sea salirse de eso, aunque sea con letras del Tesoro, por poco sofisticado que parezca es maravilloso", ha añadido.
Tecnológicas e Ibex 35
Pasando a la renta variable, estos tres gestores aprecian aún oportunidades para invertir en empresas growth del sector tecnológico, que tras la pandemia se han visto duramente penalizadas.
Para Quintana, de ING, este sector va a ser "el motor de Estados Unidos", por lo que considera que las valoraciones bajas son "rebajas". "Es para ir con la billetera a comprar", ha dicho, sabiendo, eso sí, que quizás este año no se obtiene una gran rentabilidad.
Para Dolz de Espejo, de Mutuactivos, lo importante es poner el foco en empresas "de calidad", que no sufrirán tanto el incremento de costes que traerá una inflación elevada durante más tiempo.
García Ciriza, de ASEAFI, por su cuenta, considera que el Ibex "es un índice muy bancarizado" lo que le ha ayudado con el rally que está viviendo en las últimas semanas, pues sube en torno a un 14% en lo que va de año.
Algo que, justo en este contexto, puede ser positivo. "Tenemos un peso muy sesgado a lo que lo está haciendo bien [bancos y energéticas]. El índice lo va a seguir haciendo bien", ha añadido el responsable de Mutuactivos.
Este sesgo es una "buena noticia" ahora, pero ha penalizado a los inversores del índice durante año. No en vano, ha vivido una "década desastrosa" y se ha "perdido la fiesta mundial de la Bolsa desde 2008", apunta Quintana. Es por eso que ahora "tienes a un inversor quemado que se pone a hacer cola para comprar letras del Tesoro".