España cuenta con una rica herencia religiosa que se refleja en la variedad y diversidad de sus iglesias. Estas edificaciones no solo son lugares de culto, sino que también son representaciones arquitectónicas y culturales de diferentes épocas y estilos.
Sin embargo, más allá de las iglesias románicas o de las catedrales góticas, cabe destacar que en España hay parroquias y templos más curiosos que pueden llamar tu atención.
Entre ellas se encuentra la capilla de San Olav, en Covarrubias (Burgos): una construcción religiosa única en España y una auténtica joya arquitectónica que destaca porque rinde homenaje a la princesa Kristina de Noruega.
La historia de esta ermita se vincula a la de Kristina de Noruega, que llegó a España con el objetivo de casarse con el infante Felipe, hermano de Alfonso X el Sabio. Tanto es así que un párrafo de la Saga del Rey Håkon Håkonsson narra que la princesa Kristina de Noruega quiso, tras el compromiso de matrimonio, que se construyese una iglesia en honor al patrón de Noruega. El Infante Felipe de Castilla prometió construirla.
Sin embargo, esta nunca llegó a verla: "El miércoles de ceniza se prometieron don Felipe y la princesa. El primer deseo que ella expresó a don Felipe fue que mandara construir una iglesia en honor al santo rey Olav, a lo cual consintió el infante con la mejor voluntad".
La boda entre Kristina de Noruega y el infante Felipe tuvo lugar en 1258. Sin embargo, la vida la princesa en España fue trágica pues nunca se adaptó y murió en Sevilla en 1262 sin haber tenido hijos.
Si bien es cierto que el infante Felipe le había prometido construir una capilla dedicada al patrón de Noruega, San Olav, esta promesa quedó en el olvido tras la muerte del infante Felipe en 1274. Sin embargo, siete siglos después, concretamente en 1958 se redescubrió el sarcófago en el que estaba enterrada la princesa Kristina de Noruega en el Monasterio de las Huelgas Reales de Burgos.
Con la recuperación de los restos de Kristina de Noruega volvió a estar presente la promesa que le hizo su esposo. En consecuencia, la Capilla de San Olav de Covarrubias es el resultado de esta promesa incumplida: se inauguró en el año 2011, de tal forma que se hizo realidad al fin la promesa no cumplida a Kristina de Noruega. Desde entonces ya existe un lugar que rinde homenaje a la figura de san Olav en tres facetas de su vida: el vikingo, el Rey y el Santo, así como a la propia Kristina de Noruega.
Esta iglesia fue obra de los arquitectos Pablo López Aguado y Jorge González Gallegos, y destaca por tener un diseño vanguardista que imita la forma de un drakkar, que es una embarcación de casco trincado que data del período comprendido entre los años 700 y 1000 y que fue utilizado por los escandinavos y vikingos en sus incursiones guerreras tanto costeras como del interior.
La iglesia vikinga está gestionada por la Fundación Princesa Kristina de Noruega con el objetivo de fomentar el intercambio cultural entre España y el país nórdico. En consecuencia, en el interior del templo se pueden encontrar una serie de paneles informativos que exponen los vínculos entre Noruega y España, así como una serie de esculturas y vidrieras. De hecho, cuentan con una réplica del sarcófago de la princesa Kristina.
La iglesia está situada en un entorno natural atractivo, de tal forma que la capilla se integra bien en el paisaje de Covarrubias, ofreciendo un lugar tranquilo para la reflexión y la espiritualidad.
Y aparte de ser un lugar de culto, la capilla también se utiliza para actividades culturales y eventos, atrayendo a visitantes interesados en la historia y la cultura nórdica.