D. Barreira
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Un equipo de arqueólogos ha descubierto una tumba intacta y secreta de 2.000 años de antigüedad bajo la famosa estructura del Tesoro de Petra, en Jordania, una de las siete maravillas del mundo. El enterramiento escondía una docena de esqueletos, además de restos de cerámica. Uno de los individuos, según los investigadores de la Universidad de St Andrews (Escocia), estaba sujetando un recipiente que se asemeja a un cáliz. Los sedimentos y materiales han arrojado una datación de entre mediados del siglo I a.C. y principios del II d.C. Lo que sigue siendo un misterio es la identidad de las personas inhumadas en esa sepultura.

La tumba ha sido documentada gracias a un potente radar de penetración terrestre utilizado en el delicado monumento del Tesoro, conocido localmente como Al Khazneh —"el tesoro del faraón"— y localizado en el cañón de Petra. En el año 2003, el mismo equipo de investigadores ya había descubierto varios enterramientos ocultos, pero han tardado más de dos décadas en volver a obtener los permisos de las autoridades para seguir prospectando el sitio.

La función del icónico Tesoro de Petra —la ciudad se construyó como la capital del pueblo nabateo hacia el siglo IV a.C.— sigue siendo un misterio, aunque las hipótesis más verosímiles indican que podría haber sido el mausoleo del rey Aretas IV Philopatris. El nuevo descubrimiento, que seria anterior al famoso edificio según los investigadores, podría arrojar luz sobre este interrogante y sobre el reino nómada y árabe que fue conquistado por el Imperio romano hacia principios del siglo II d.C.

Uno de los esqueletos de época nabatea. Discovery ’ s Expedition Unknown

"El principal propósito de la prospección era evaluar la condición de las áreas aledañas al Tesoro, su patio, la plaza, la salida del Siq y el wadi al que todos desembocan antes de futuros trabajos que sirvan para controlar mejor el agua de las inundaciones", ha explicado Richard Bates, profesor de la Universidad de St Andrews (Escocia). Sin embargo, los datos recabados revelaron la posible presencia de cámaras subterráneas desconocidas, por lo que pidieron permiso para realizar una excavación arqueológica.

Además de los 12 esqueletos intactos, se documentó una red de muros que dividía la sala, una característica arquitectónica que no se había visto en ningún otro lugar de la ciudad antigua. "El descubrimiento tiene importancia internacional ya que hasta ahora se han recuperado en Petra muy pocos enterramientos completos de los primeros nabateos", ha valorado Bates en un comunicado. "Se espera que las sepulturas, sus ajuares y los restos humanos ayuden a llenar los vacíos de nuestro conocimiento sobre cómo surgió Petra y quiénes eran [los nabateos]".

Tim Kinnaird, otro de los investigadores del equipo, ha celebrado estos hallazgos porque permitirán datar con mejor precisión el momento en de construcción del Tesoro. "Hasta ahora hemos trabajado con suposiciones y conjeturas: tener una fecha definitiva será un logro monumental para todos", ha asegurado. Los arqueólogos también han señalado que quedan otros espacios del edificio por investigar y que pueden contener información relevante.

Curiosamente, el hallazgo, que se ha dado a conocer en un documental de Discovery Channel titulado Expedición a lo desconocido, se ha registrado en un famoso escenario del cine de aventuras: el Tesoro de Petra es el sitio donde se encuentra el Santo Grial ficticio en la película Indiana Jones y la última cruzada (Steven Spielberg, 1989).

"Fue un privilegio increíble poder realizar un estudio en un lugar tan emblemático y verificar la geofísica con una excavación tan pronto; es una oportunidad única", ha concluido Bates. "La magnitud del descubrimiento ha sido muy inesperada, pero probablemente arrojará luz no solo sobre el edificio del Tesoro, sino también sobre toda la sociedad nabatea".