España cuenta con una gran cantidad de pueblos medievales que ofrecen una visión fascinante de su rica historia y cultura. Algunos de los más conocidos son Albarracín (en Teruel), Besalú (Girona), Santillana del Mar (Cantabria) o Frías (en Burgos).

Sin embargo, son muchos más los pueblos de España que pueden resultar desconocidos y que son ideales para una visita turística impregnada por la historia del Medievo.

Uno de estos ejemplos es Jerez de los Caballeros, en Badajoz, una localidad que hunde sus raíces en la época romana, aunque su desarrollo significativo se dio durante la Edad Media.

Jerez de los Caballeros

Como ya se indicaba anteriormente, Jerez de los Caballeros es un municipio y localidad española de la provincia de Badajoz, en la comunidad autónoma de Extremadura. Y destaca, principalmente, por su gran patrimonio histórico.

De hecho, su principal desarrollo histórico se dio durante la Edad Media. En concreto, la localidad pasó en el siglo XIII a manos de la Orden del Temple y tras la disolución de esta quedó bajo la jurisdicción de la Orden de Santiago.

Además, cabe destacar que Jerez de los Caballeros desempeñó un papel importante durante la llamada Reconquista, sirviendo como fortaleza y lugar estratégico, un dato que dota a este lugar de mayor importancia histórica aún.

En consecuencia, si estás pensando visitar Jerez de los Caballeros, son muchos los lugares de interés turístico e histórico que no te puedes perder. Entre ellos, las torres y las iglesias.

Destacan las iglesias barrocas, como la Iglesia de San Bartolomé, la de Santa María de la Encarnación, la de San Miguel Arcángel y la de Santa Catalina. Estos templos son conocidos por sus impresionantes retablos y decoraciones. En muchas ocasiones, Jerez de los Caballeros es conocido como "el pueblo más barroco de Extremadura".

Y además, la ciudad está rodeada por murallas medievales y cuenta con varias torres defensivas, entre ellas la famosa Torre del Homenaje. De hecho, tal y como indican desde la página web del Ayuntamiento de Jerez de los Caballeros, las murallas son de origen templario, concretamente del siglo XIII, aunque indican que parte de ese trazado está construido sobre el anterior recinto árabe, quedando actualmente 18 de los 26 torreones que se consideran originales.

Además, desde el Ayuntamiento de Jerez de los Caballeros también indican que la muralla contaba con seis puertas (la de Burgos, Alconchel, Sevilla, Nueva, Santiago y de la Villa), de las que en la actualidad se conservan dos, la Puerta de la Villa y la Puerta de Burgos.

Igualmente, cabe destacar otro punto de gran importancia histórica: la fortaleza templaria, que es de origen musulmán pero reconstruida por  los templarios en el siglo XIII. Además, sufrió algunas modificaciones cuando la localidad pasó a estar controlada por la Orden de Santiago.

Parte de esta fortaleza es una torre que se conoce tradicionalmente como "Torre Sangrienta". Explican desde el propio Ayuntamiento que el nombre legendario que se debe probablemente porque en el siglo XIV se mandó ajusticiar en ella a algunos caballeros templarios que se habrían negado a entregar la villa al rey Fernando IV, con motivo de la disolución de su orden militar.

Igualmente, forma parte del castillo la Torre del Reloj, que a finales del siglo XV tenía función de torre del homenaje. Sin embargo, cambió de función cuando pasó a albergar un reloj. 

Igualmente es importante mencionar el pasado romano de la localidad de Jerez de los Caballeros. Se conservan varios monumentos de esta época, como la casa de El Pomar, datada en los siglos III y IV. d. C., aunque parece que sufrió reformas con el paso del tiempo en las centurias siguientes. El antiguo asentamiento romano sería el que en la Antigüedad se conocía con el nombre de Seria Fama Iulia.

El Puente Viejo, situado sobre el río Ardila es otro punto de interés histórico. Se trata de una construcción de origen romana que también ha sido reconstruida a lo largo de la historia.

En definitiva, los visitantes pueden disfrutar de un paseo por el casco antiguo, explorando las calles empedradas y los numerosos monumentos históricos. Y además, la localidad está rodeada de un paisaje natural impresionante, ideal para el senderismo y otras actividades al aire libre.