El territorio español está repleto de iglesias, parroquias, capillas, iglesias, catedrales, basílicas... Son muchos los edificios religiosos que se han ido construyendo por toda España. Sin embargo, cabe destacar que algunos de estos edificios son muy diferentes a otros, es decir, que tienen características particulares que no se encuentran en otros.
Es el caso de la Iglesia de San Marcos, en Salamanca, que destaca por ser uno de los templos más curiosos y significativos de España, sobre todo, por su forma circular, algo que no se suele encontrar.
Se trata de una iglesia románica que destaca por la forma de su planta, una característica poco común en la arquitectura de su época en España. Sin duda, uno de los ejemplos más notables de la arquitectura románica en la ciudad.
Iglesia de San Marcos
Como ya se ha mencionado anteriormente, la iglesia de San Marcos de Salamanca es un edificio de estilo románico que se encuentra en la zona de la antigua muralla de la ciudad en la Puerta de Zamora. Fue construida a finales del siglo XI o inicios del XII y estaba destinada a ser una parroquia.
Cabe destacar que, posteriormente, en el año 1202 el rey Alfonso XI de León decidió entregar esta iglesia a la Corporación de Clérigos Salmantinos y, en consecuencia, pasaría a recibir el nombre de "Clerecía de San Marcos". A partir del siglo XIV ya sería conocida como "Real Clerecía de San Marcos". Esto quiere decir que funcionó como clerecía hasta la expulsión de la orden de los jesuitas. Luego, pasó a ser usada como parroquia, función que tiene en la actualidad.
Como ya se ha mencionado anteriormente, la Iglesia de San Marcos es muy singular por su planta redonda, así como por su pequeño tamaño, en tanto que tiene alrededor de 22 metros de diámetro.
La planta circular de esta iglesia resulta bastante extraña, en tanto que cabe destacar que las iglesias románicas suelen tener plantas basilicales o de cruz latina. Además, tiene otra característica particular y es que se encuentra dividida en tres naves rematadas en tres ábsides.
A lo largo de los tiempos, la Iglesia de San Marcos ha sufrido numerosas restauraciones con el objetivo de conservar su estado inicial. De hecho, fue en 1967 cuando fue sometida a una restauración de gran importancia para devolverle su aspecto románico original.
Durante estas obras se encontraron gran cantidad de obras artísticas, pinturas y esculturas. Concretamente, se encontró un Cristo gótico que data del siglo XIV, de gran importancia, que es conocido como el "Cristo del Castillo".
En cuanto al contexto histórico, cabe destacar que la Iglesia de San Marcos fue construida durante una época en que Salamanca estaba creciendo en importancia, tanto política como religiosa.
La ciudad de Salamanca es conocida por su universidad, una de las más antiguas de Europa, y su casco antiguo es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. La iglesia, aunque menos conocida que la catedral o la universidad, es una joya arquitectónica que refleja la rica historia y el desarrollo del románico en la región.
En resumen, la Iglesia de San Marcos en Salamanca es un destacado ejemplo de la arquitectura románica con una planta circular inusual, que la convierte en un monumento de gran interés histórico y artístico en la ciudad.