El paso de los representantes de la industria de la automoción por la cumbre empresarial organizada por la CEOE ha vuelto a poner de relieve la unidad alcanzada entre Gobierno, empresarios y sindicatos en el plan de impulso al automóvil. Esta iniciativa, que movilizará 3.750 millones de euros, ha sido destacada por todos los representantes del sector como modelo para hacer frente a la crisis generada por el coronavirus.
El presidente de Anfac y Renault, José Vicente de los Mozos; el de Gestamp, Francisco Riberas; la vicepresidenta de Antolín, María Helena Antolín; el presidente de Faconauto, Gerardo Pérez Giménez y el de Ganvam, Raúl Palacios han participado en un encuentro en el que se ha vuelto a apelar a la necesidad de que impulsar la renovación de un sector clave como el automóvil para que España siga manteniendo la posición como segundo fabricante europeo de coches en el futuro.
De los Mozos ha puesto en valor la importancia de la competitividad de la industria española. "Si fabricamos 2,8 millones de coches sin tener un centro de decisión en España es porque hemos sido competitivos hasta ahora. Durante estas semanas hemos visto como Nissan anunciaba su cierre y, a la vez, Renault confirmaba que se queda en España. Es importante entender las claves de estas decisiones para ir en la senda adecuada".
El presidente de Anfac ha destallado las malas perspectivas de cara a 2020. Según sus estimaciones España fabricará 700.000 coches menos de los previstos este año. Ante ese contexto ha señalado la importancia de impulsar el mercado interno para contrarrestar esta situación.
"Nuestro parque de coches tiene 12 años de media lo que lo convierte en uno de los más viejos de Europa. Lo importante para conseguir los objetivos de descarbonización no es la tecnología, es el compromiso. Un motor diesel de 2020 emite 10 veces menos que el de comienzos de 2000. El avance a la electrificación tiene que ser gradual y debe de venir acompañado de actuaciones en la infraestructura para ganar en puestos de recarga" ha señalado el presidente de Renault en España.
Recetas simples y rápidas
Durante su intervención, Francisco Riberas, ha señalado la necesidad de poner en marcha lo más rápido posible el plan de impulso al automóvil del Gobierno y la importancia de seguir contando con instrumentos de flexibilidad laboral hasta que se recupere la demanda. "Los ERTE han sido un instrumento fundamental que ha permitido mantener el empleo durante los peores momentos de esta crisis. Es importante seguir contando con este mecanismo hasta que la demanda vuelva a sostener el empleo".
El presidente de Gestamp ha señalado tres pilares para asegurar el futuro de la industria. "Necesitamos reformar la educación. Es importante que contemos con una formación más enfocada a la empleabilidad. Del mismo modo, al igual que es clave fomentar el emprendimiento, también lo es ayudar en el crecimiento de las empresas. Además, no debemos trabajar para que la industria llegue al 20% PIB.
Por su parte, María Helena Antolín ha querido poner en valor el papel que juega la industria auxiliar dentro del sector del automóvil. "La crisis a la que nos enfrentamos exigen que todos tengamos altura de miras para buscar el bien común. Tenemos que demostrar que somos un país de imparables. El lunes pasado firmamos el plan de impulso muy positivo. Es clave agilizarlo. La industria auxiliar aporta el 75% del valor añadido del vehículo. Para que esta recuperación sea rápida va a ser clave la colaboración publico-privada.
La vicepresidenta del Grupo Antolín ha señalado los riesgos que el sector tiene en el horizonte. "Nuestras estimaciones señalan una caída del 20% al 30% de la producción. Esto puede tener un impacto en el empleo que puede al 10%. Pero estamos a tiempo de evitarlo. Si actuamos ya podremos reducir ese impacto.
Sueldo mínimo vital
Raúl Palacios ha sido el encargado en poner sobre la mesa la medida más ambiciosa durante la celebración de este encuentro: el sueldo mínimo vital. La propuesta del presidente de Ganvam pretende que el Estado subvencione la incorporación de la totalidad de las plantillas acogidas a los ERTE en la misma cantidad que los está subvencionando hasta ahora y las compañías, por su parte, se comprometan a mantener esos mismos puestos de trabajo.
"El Gobierno pagaría 1.283 por cada trabajador durante cuatro meses y la compañía garantizaría los siguientes cuatro meses de trabajo. El resultado serían ocho meses de estabilidad laboral. Ocho meses de mantenimiento de la cifra de empleo", ha subrayado el presidente de Palacios, quien ha destacado que gracias a mantener el empleo también ayudaría a que el poder adquisitivo de las familias se mantuviese.
Gerardo Pérez Giménez ha sido el encargado en cerrar el coloquio explicado los retos que la actual situación tiene para la red de concesionarios. "Sabemos que vamos a ser suscriptores del cambio al coche eléctrico. Este proceso tiene que ser ordenado".
En paralelo al cambio de motorización, el presidente de Faconauto ha destacado el gran reto que la digitalización supone para su negocio. "Debemos de estar totalmente preparados para la omnicanalidad. Pero no olvidemos la importancia del componente físico es muy importante. No perdamos el norte. Necesitamos contar con un entorno jurídico estable. Mantener la reforma laboral sin complejos y apostar por la formación para que nuestros empleados sean una referencia para el sector del futuro igual que lo son en el presente.