Prácticos, eficientes y sostenibles. Es la ventaja de los coches híbridos, que ofrecen la autonomía y facilidad en el repostaje de un motor de combustión junto al dinamismo y ventajas de un coche eléctrico. Son una alternativa cada vez más popular, y se refleja en sus ventas, que han superado incluso a la de vehículos eléctricos en lo que llevamos de año.
El objetivo principal de un coche híbrido es combinar el motor de combustión y el eléctrico de la manera más eficiente posible, exprimiendo al máximo los beneficios de cada tipo de conducción. El motor eléctrico, en este caso, puede actuar por sí solo como sistema de propulsión pero la gran ventaja es que también puede proporcionar un empuje adicional al motor de combustión.
La tecnología híbrida enchufable de los modelos TFSIe de Audi trasladan todas estas ventajas a través de su nueva gama de híbridos enchufables, que incluye los modelos A6, A6 Avant, A7 Sportback, A8 y Q7, a los que se acaba de incorporar el espectacular Q8.
Tres modos para una conducción eficiente
Los modelos híbridos enchufables de Audi tienen tres modos de funcionamiento: EV, Auto y Hold. El primero, el modo eléctrico, se activa automáticamente al iniciar la marcha. Es el más recomendable para moverse a poca velocidad, en un recorrido urbano, por ejemplo.
En segundo lugar estaría el modo Auto, el de funcionamiento híbrido. El coche recurre al motor de gasolina pero el eléctrico entra en marcha cuando detecta que se necesita y viceversa, aunque la mayor parte del tiempo utiliza una combinación de ambos. ¿Cómo funciona este modo inteligente? Utiliza una estrategia predictiva que se activa cuando se inicia el sistema de navegación y su tarea es distribuir la carga de la batería de forma eficiente a lo largo de la ruta planeada.
De esta manera, se desarrolla un plan de viaje que se actualiza constantemente, teniendo en cuenta la información de navegación, del entorno y del tráfico en tiempo real. Además, este modo permite cargar la batería mientras se usa el motor de combustión para poder funcionar con energía eléctrica siempre que se necesite.
Por último, el modo Hold, que permite conservar la carga de la batería para utilizarla después. Sería el caso de haber realizado un trayecto inicial por carretera y posteriormente finalizarlo conduciendo por la ciudad, donde se utilizaría la carga eléctrica almacenada. Esto es posible gracias a la gestión inteligente del sistema de propulsión de los modelos TFSIe, que pueden recuperar energía en frenada y desaceleración. Una tecnología como esta permite realizar el consumo más bajo posible, sin escatimar en la potencia y eficiencia de la conducción.
Destinado a la máxima potencia
En los nuevos coches híbridos de Audi, dependiendo del modelo, el motor eléctrico puede alcanzar hasta 143 caballos de potencia, y ofrecen una autonomía eléctrica que permite recorrer hasta 59 kilómetros sin consumir gasolina. Así, la potencia del sistema híbrido, según el modelo de coche y cilindrada del motor, podrá ir desde los 299 caballos a los 462.
En algunos modelos, como el A6, Q7 y el Q8, también se puede elegir entre dos versiones del sistema híbrido, una más orientada al confort y otra con una configuración más deportiva, para aquellos que busquen un coche más potente. Además, la gama A6 ofrece dos variantes, una que incluye el sistema de navegación MMI Navegación Plus con Virtual Cockpit y otra con un equipamiento de serie más completo con suspensión deportiva, tapicería de cuero y llantas de 19 pulgadas.
Nuevas prestaciones en el Audi Q8 híbrido
Entre los siete modelos híbridos enchufables de Audi, cabe destacar el nuevo Audi Q8, que, además de los modos de funcionamiento disponibles en toda la gama de híbridos, ofrece dos niveles más de potencia. En ambos casos, los modelos Q8 60 y Q8 55, la máxima velocidad es de 135 km/h en el modo puramente eléctrico y pueden mantener hasta 45 kilómetros de autonomía.
Los modos de funcionamiento del Audi Q8 TFSIe quattro difieren ligeramente del resto de modelos de la marca. Mantienen los modos Auto (en el cual el sistema híbrido selecciona automáticamente el tipo de propulsión: eléctrico o de combustión según la velocidad) y Hold (en el que el objetivo es mantener la carga de la batería del motor eléctrico).
A estos dos se añade el modo Charge, cuya estrategia de funcionamiento se basa en cargar la batería lo máximo posible mientras se conduce con el motor de combustión para así, poder finalizar el viaje utilizando energía puramente eléctrica. Además, el modelo Q7 TFSIe quattro, emulando a su modelo hermano, también incluirá este modo de funcionamiento.
Facilidades para el día a día
Una de las principales preocupaciones de los clientes a la hora de hacerse con un coche eléctrico o híbrido es la carga de la batería eléctrica, ya que los puntos públicos de recarga aún no son demasiado frecuentes en las ciudades. La alternativa es la recarga doméstica, y para ello los modelos híbridos de Audi incorporan un cable de carga para el hogar que permite cargar una batería completamente vacía en dos horas y media.
Además, con la aplicación myAudi los clientes pueden acceder a toda la información de carga desde su smartphone: estado de la batería, autonomía disponible y hasta programar la carga de forma remota. Otra función interesante de esta app es la posibilidad de climatizar el habitáculo del coche desde el móvil antes de iniciar el trayecto.
Por otro lado, toda la gama TFSIe luce el distintivo medioambiental “0 emisiones” de la DGT, que se otorga a los coches totalmente eléctricos y a los híbridos enchufables con una autonomía superior a los 40km.
Con la ampliación de su gama de híbridos enchufables, Audi continúa aumentando su oferta de movilidad sostenible, a la que se suma su línea de vehículos de propulsión 100% eléctrica Audi e-tron. La conducción libre de emisiones es ya una realidad en la marca de los cuatro aros.