Con el imparable avance tecnológico y la transformación digital de los últimos años, muchos sectores se han visto obligados a adaptarse a múltiples cambios para ofrecer el mejor servicio, sobre todo cuando nos referimos a las entidades bancarias. Tal ha sido el caso de los bancos en nuestro país, que, según el estudio Digital Banking Maturity 2020, se sitúan como los segundos más digitalizados del mundo, especialmente después del estallido de la pandemia. Desde entonces, muchos de los usuarios que antes apenas confiaban en los servicios digitales, ahora han descubierto un mundo lleno de posibilidades al alcance de su mano.
Banco Santander es una de las entidades financieras que ha optado por reinventarse y adaptarse a este mercado tan cambiante para crear un modelo de banca digital capaz de ajustarse al comportamiento del consumidor, que está cada vez más interesado en buscar soluciones rápidas, prácticas y sencillas a la hora de realizar transferencias bancarias y gestionar su dinero. En 2019, esta entidad anunció que invertiría 20.000 millones de euros en cuatro años en su transformación digital en todo el mundo, con el objetivo de crear ejes estratégicos para diferenciarse de la competencia y convertirse en la mejor plataforma abierta de servicios financieros.
Agilizar procesos, simplificar operaciones cotidianas, consultar el saldo y tener un mayor control sobre los ingresos son algunas de las numerosas facilidades que podemos encontrar en la app bancaria del Santander.
Hacer el día a día más fácil
Las entidades financieras han apostado por una digitalización adaptada a sus clientes, con el fin de simplificar la gestión de los trámites y hacer que su día a día sea más sencillo. Para ello, Santander ofrece en su app móvil la posibilidad de realizar desde las actividades más básicas hasta las operaciones más complejas.
Una de las grandes ventajas de la app móvil Santander es su última funcionalidad: Santander Key. Se trata de una solución biométrica omnicanal y multiproducto que permite al usuario firmar todas las operaciones con la huella digital. Sacar o ingresar dinero en ATM, realizar compras de todo tipo y contrataciones desde la web, o simplemente hacer ‘bizums’ diarios y cualquier otra transferencia nacional e internacional.
Para aquellos que necesiten realizar consultas sobre operaciones concretas, como las moratorias de las hipotecas, existe un asistente virtual que facilitará toda la ayuda necesaria.
La entidad presidida por Ana Botín también ha reforzado sus canales de atención al cliente (call center) para garantizar un servicio en remoto a aquellos que lo necesiten, ya sea mediante vía online o telefónica. Es aquí cuando están más presentes las personas mayores de 65 años, con una media de 2.500 llamadas al día y a las que se atiende prioritariamente para reducir su tiempo de espera y evitar posibles complicaciones.
Además de todas estas herramientas con las que cuenta Banco Santander y que suponen un avance a pasos agigantados cuando hablamos de transformación digital, cabe destacar también su presencia en las redes sociales, una tarea imprescindible para conseguir más visibilidad, publicando sus promociones, sus servicios de seguridad online y todas las novedades y patrocinios de la entidad. Santander sigue trabajando para conseguir que la digitalización de la banca deje de ser un obstáculo y se convierta en una oportunidad para que nadie se quede atrás.