El desarrollo del Alta Velocidad y su estratégica posición en el centro de la capital convirtió hace muchos años a la Estación de Atocha en el referente ferroviario de Madrid. Chamartín quedó relegada a un segundo plano y, aunque los proyectos del 'nuevo Chamartín' no paraban de sucederse, seguía siendo vista por los viajeros como la estación pequeña y vieja de las afueras.
Tras un importante desarrollo por parte de las administraciones locales, regionales y nacionales de la zona norte de la capital, la estación de Chamartín está resurgiendo de sus cenizas y convirtiéndose, ladrillo a ladrillo, en la estación que puede destronar a Atocha.
Sus angostos pasillos, el siempre colapsado acceso a la estación de Metro y su reducido vestíbulo en el que ni siquiera pueden ponerse unos tornos pasarán a ser cosa del pasado en algo más de dos años. Será cuando, según estimaciones de Adif, estén terminadas algunas de las tres de las grandes intervenciones de la estación en las que se han invertido 326 millones de euros.
En estos momentos, Adif Alta Velocidad (AV) está trabajando en tres acciones que permitirán ampliar Chamartín siguiendo una premisa: dividir las vías de alta velocidad del Cercanías convencional. Las intervenciones son: abrir un nuevo vestíbulo subterráneo que conecte el Cercanías con el Metro, ampliar las vías de Alta Velocidad y remodelar completamente el vestíbulo actual y su morfología.
1. Nuevo vestíbulo subterráneo
A principios de 2023 se va a reabrir en el subsuelo un vestíbulo que está cerrado en los años 80 que permitirá conectar todas las líneas de cercanías con la línea de Metro.
Esto supondrá un cambio sustancial para los viajeros, puesto que el actual pasillo del subsuelo que comunica verticalmente los andenes y la parada del metro es muy estrecho y termina acarreando embotellamientos diarios a la entrada del Metro de Madrid. Este será un vestíbulo 'extra' al que se le sumará el actual para el que preparan una gran remodelación.
2. Vestíbulo actual
Una de las actuaciones que se va a completar en el primer semestre de 2024 y que más van a notar los viajeros es la remodelación den antiguo vestíbulo. La actual superficie de 9.000 metros cuadrados va a pasar a ocupar 18.000. Su organización y distribución va a cambiar completamente y habrá un área exclusiva para el Alta Velocidad y otra para Cercanías.
El gran vestíbulo que va a duplicar su actual capacidad duplicará su capacidad para acoger viajeros de una forma mucho más diáfana. Esto va a facilitar que Chamartín tenga tornos de acceso a la Renfe algo que ahora mismo no puede pasar por falta de espacio.
Este nuevo edificio de viajeros se dividirá en tres espacios. Por un lado, la zona de embarque para alta velocidad, la de Cercanías, y el vestíbulo común muy alargado. Respecto a la actual distribución, uno de los cambios principales es que las tiendas y locales comerciales van a desaparecer y se van a situar fuera. Donde ahora mismo se ubica la bolsa de taxis habrá una zona de locales comerciales y una gran plaza peatonal cubierta.
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Por ello, los actuales locales comerciales exteriores de la planta baja se suprimen para reordenar los viales urbanos. La bolsa de taxis y la zona de estacionamiento para recoger y dejar viajeros estará a las afueras y se separará completamente de la estación.
3. Alta Velocidad
En lo que respecta a los trenes de largo recorrido, ya están iniciadas las obras para duplicar la capacidad de la Estación de Chamartín. Pasarán de las 6 vías actuales a un total de 12, más una vía de estacionamiento.
Ahora mismo se están levantando los cimientos de 4 nuevas vías pasantes de ancho estándar y remodelando vías 14 y 15 (antes en ancho ibérico, es decir, para tren convencional).
De esta forma, el ferroviario de Chamartín pasará así a contar con un total de 25 vías: doce de ellas destinadas a la alta velocidad (ancho estándar) y trece a Cercanías y media y larga distancia (ancho ibérico).
La zona de las estaciones de Alta Velocidad va a tener, además de un acceso diferenciado en el vestíbulo principal, un acceso directo de salida al metro. Se utilizará el actual pasillo subterráneo que se usa en Cercanías ahora y que acarrea muchas aglomeraciones.
Desde Adif creen que, al ser pequeño, es perfecto para que lo usen únicamente los viajeros de Alta Velocidad que quieran usar el Metro de forma unidireccional (de salida). Los que quieran hacer el recorrido contrario, coger el tren rápido llegando en Metro, tendrán que salir a la superficie. Como ocurre ahora.
Nuevos proyectos
El lavado de cara de Chamartín quedaría en nada si no fuera por el importante proyecto de Madrid Nuevo Norte que están liderando desde todas las administraciones.
La conexión con alta velocidad hasta el aeropuerto, el proyecto internacional de remodelación de Chamartín de más de un millón de euros o el desarrollo urbanístico del norte harán brillar a esta nueva estación.
Tal y como han adelantado este viernes desde Adif, este proyecto se va a complementar con el soterramiento de las vías que ya anunció hace unas semanas la ministra y con un concurso internacional por el que se va a poner en marcha un nuevo edificio en el norte de la estación.
Esta ampliación está todavía en fase de adjudicación y se va a elegir el diseño en diciembre. Todavía falta licitarlo y sacarlo a concurso por lo que desde la Administración no se atreven a dar una fecha.
Sí adelantan que el objetivo es hacer un nuevo edificio al estilo de los aeropuertos que sean para "entradas y otro para salidas". Pero sin ser tan 'encorsetado'. Es decir, que en un futuro habrá dos accesos a Chamartín. Uno por la actual estación y otro más al norte con un nuevo edificio.