Cuántas veces nos echamos las manos a la cabeza cuando siendo fieles a un banco, tenemos que pagar más dinero (las temidas comisiones por contraprestación a los servicios que ofrecen) por realizar transferencias o por mantener una tarjeta. Sin duda, esta es una de las principales quejas de los clientes de los bancos en general cuando depositan su confianza en determinada entidad y sienten que con estas acciones tan habituales e irremediables en el día a día están perdiendo dinero.

Según el V Barómetro de la Asociación de Usuarios de Servicios Financieros (Asufin) sobre comisiones bancarias, en el último año los bancos han incrementado las comisiones un 3,5% de media. Este informe también destaca las diferencias que existen en este sentido entre un banco u otro y es que las tarifas o precios de las comisiones bancarias son libres siempre que hayas aceptado o solicitado ese determinado servicio.

Sin embargo, esta ‘falta de consideración’ al cliente que la mayoría alega sobre todo ante estas determinadas subidas hace plantearnos la necesidad de que el cliente merezca estar en el centro de las decisiones cuando pone en manos de otro su dinero y su confianza. Por eso, ahora hay determinadas entidades que son muy conscientes y dan un paso más para que las personas respiren tranquilas y se sientan más cuidadas. Un ejemplo claro es Unicaja a través de las mejoras que ha incorporado en sus Planes Cero. Estas mejoras se han aplicado de forma automática a aquellos clientes adheridos a cualquier Plan Cero de los que comercializa la entidad, siempre que cumplan los requisitos propios de cada programa sin que tengan que realizar, por tanto, ningún trámite. También podrán beneficiarse aquellos que se sumen por primera vez a este programa de exenciones, disponible a través de las oficinas de Unicaja y de la web.

Planes Cero

Comencemos por el principio: ¿Qué son los Planes Cero? La mejor forma de realizar tus servicios más habituales sin coste alguno: transferencias desde la cuenta de la que eres titular y disponer de tus cuentas sin comisión de mantenimiento o de administración. Y ahora, esos Planes Cero incorporan una novedad principal: todos estos beneficios se extienden a todas las cuentas de las que el cliente sea titular (salvo que se encuentre adherido al programa de Tarifa Plana).

Además, desde ahora, el mantenimiento de la tarjeta de crédito también está exenta de comisión. Sin olvidar que, entre los productos contemplados para poder beneficiarse del Plan Cero, se incluyen ahora también los saldos a la vista (cuentas de ahorro y corrientes) y los depósitos a plazo, además de los considerados hasta el momento (fondos de inversión, planes de pensiones o seguros de ahorro).

Para disfrutar de estos beneficios basta, como apuntábamos, con adherirse a los Planes Cero, pero eso sí, hay que cumplir una serie de requisitos

  • La primera opción sería la domiciliación de nómina, pensión o desempleo por importe neto igual o superior a 600 euros (o bien ingresos recurrentes por una cantidad de 7.200 euros o más en el último año con, al menos, un ingreso mensual en seis de los 12 meses) así como un consumo en tarjetas de crédito por 1.200 euros anuales o más o un mínimo de dos operaciones mensuales. Y en el caso de los autónomos profesionales tendrán que cumplir lo anterior en cuanto a ingresos recurrentes, pudiendo cambiar el consumo en su tarjeta por facturación mensual de al menos 600 euros al mes a través de TPV de su comercio. En ambos casos, el cliente ha de ser titular de productos por importe total igual o superior a 6.000 euros o, en su lugar, tener contratado uno o varios seguros, distintos del seguro de ahorro, cuya suma de las primas pagadas al año sea de 100 euros o más.

  • La segunda opción parte de contar con saldos por importe total igual o superior a 20.000 euros y sumar a ello un consumo en tarjetas de crédito de al menos 1.200 euros anuales o un mínimo de dos operaciones mensuales, por un lado, o tener contratado uno o varios seguros distintos del seguro de ahorro, cuya suma de las primas sea, como mínimo, de 200 euros, por otro lado. Igualmente, los autónomos podrán optar por cambiar el consumo de tarjeta por la facturación de un mínimo de 600 euros al mes para su comercio.

Esta iniciativa es un reflejo y un paso más en la mejora de los productos y servicios de Unicaja, con el foco siempre puesto en el cliente.