Aunque con algunos días todavía por delante para despedirnos del año, parece que España cerrará el 2024 con un panorama mixto en lo que al ámbito laboral se refiere. Si bien es cierto que el número de parados disminuyó en noviembre en 16.032 personas, situándose en 2,59 millones, la recuperación aún enfrenta dificultades. 

La tasa de paro, ahora en un 11,21%, mejora. Sin embargo, explican desde Bankinter, sigue lejos de los mínimos históricos de 2007 y 2008, cuando llegó a tocar el 7%.

Mientras tanto, el empleo crece: con 21,8 millones de ocupados, el país consolida una racha positiva iniciada a mediados de 2023.  

Pese a ello, parece que las buenas noticias no llegan a algunos sectores como la agricultura, que sigue experimentando un repunte del desempleo. Además, problemáticas como la precariedad y las brechas de género y edad resisten a desaparecer.

Y es precisamente ahí donde la figura del subsidio por desempleo del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal) surge como un salvavidas para quienes han agotado su prestación contributiva y necesitan cierto colchón económico, mientras buscan reintroducirse en el mercado laboral. 

Requisitos para el subsidio por desempleo

El subsidio por desempleo es una ayuda económica destinada a personas que, como se ha dicho, han agotado su prestación contributiva. Sin embargo, no todos pueden acceder a él. Además, es preciso cumplir una serie de requisitos en cuanto a ingresos y responsabilidades familiares se refiere. 

Pero ¿cuáles son esas condiciones? Si efectivamente has agotado la prestación contributiva ya tienes el primer punto cumplimentado, pero no es el único. Deberás estar en situación de desempleo total o bien trabajando a tiempo parcial y, en el caso de mantener varios empleos al mismo tiempo, que el cómputo de las jornadas sea inferior a una completa. 

En el caso de que seas menor de 45 años, deberás haber percibido una prestación contributiva de, al menos, 360 días. Además, esta medida solo es apta para quienes carezca de ingresos propios superiores al 75% del IPREM (indicador público de rentas de efectos múltiples) o acrediten responsabilidades familiares. 

Pero esto no es todo. También es imprescindible estar inscrito como demandante de empleo y cumplir con los compromisos del llamado 'acuerdo de actividad'.

Duración y cuantía 

La duración máxima del subsidio depende de varios factores. El mínimo se sitúa en los 6 meses y, el máximo, en los 30, pero todo depende de las condiciones que se den en tu situación particular. 

Esto se determinará en función de la edad que tengas en la fecha de agotamiento de la prestación por desempleo, la acreditación de responsabilidades familiares y la duración de la prestación por desempleo agotada. 

En lo que respecta a la cuantía, esta se calcula en función del IPREM y disminuye progresivamente. Es decir, se otorgará el 95% del IPREM durante los primeros 180 días. A continuación, se entregará el 90% entre los días 181 y 360 y, a parir del día 361, el 80%. 

Tal como informan desde el SEPE, "el pago del subsidio se realizará por mensualidades de 30 días, entre los días 10 y 15 del mes inmediato siguiente al que corresponda el devengo". Además, este se efectuará, salvo excepciones, mediante el abono en la cuenta de la entidad financiera que indiques, siempre que seas el titular de esta. 

Proceso de tramitación

Si quieres optar a la solicitud de este subsidio, lo primero que debes hacer es cumplimentar el 'Modelo oficial de solicitud', que incluye una declaración responsable de ingresos. Seguido de ello, deberás proporcionar el documento de identificación, tanto el tuyo como solicitante, como el de los miembros de la unidad familiar. 

Además, será necesario que adjuntes un documento bancario que indique la titularidad de la cuenta donde se abonará la ayuda, junto con la declaración de la renta del último ejercicio fiscal. 

En lo que respecta al plazo, este comienza el día después de agotar la prestación contributiva y se extiende hasta seis meses. Y en ese momento es importante tener una cuestión en mente: 

• Si se presenta la solicitud dentro de los 15 días hábiles posteriores al agotamiento, el subsidio se activa retroactivamente desde el día siguiente al fin de la prestación contributiva. 
• Si, por el contrario, se solicita más tarde, pero dentro de los seis meses, el subsidio comienza a contarse desde la fecha de solicitud. 

Se trata de un trámite que puedes realizar bien online, a través de la sede electrónica del SEPE, presencialmente tras la obtención de una cita previa, en cualquier oficina de registro público o por correo administrativo. 

Una vez obtenido, este se concede inicialmente por periodos de tres meses, que deben renovarse presentando una solicitud de prórroga y comprobando que se siguen cumpliendo los requisitos. Este proceso debe realizarse dentro de los 15 días hábiles tras el vencimiento del periodo trimestral.