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La llegada de la Navidad es sinónimo de gastos en forma de comidas, cenas y regalos, ya sean de Papá Noel, amigo invisible o de los Reyes Mayos. Por estos motivos, los trabajadores están modo 'tictac' a la espera de recibir la paga extra

La paga extra es una cuantía que reciben los trabajadores que tienen una nómina prorrateada en 14 pagas. Los pensionistas ya la han recibido. El Estado ingresa cada año la paga extra que les corresponde entre los días 22 y 26 de noviembre.

Asimismo, los funcionarios también ya han recibido su paga extra. Sin embargo, el resto de trabajadores tendrá que esperar, cada vez menos, debido a que las empresas privadas suelen depositar la cuantía a partir de mediados de diciembre. 

¿Cuándo cobran la paga extra los funcionarios?

Los funcionarios públicos no siguen los mismos tiempos que los trabajadores de las empresas privadas y los pensionistas. De hecho, la paga extra de estos se suele cobrar antes y se rige por la Ley del Estatuto Básico del Empleado Público.

En concreto, reciben la cuantía entre finales de noviembre y principios de diciembre. Por tanto, a estas alturas todos los empleados públicos deberían haber obtenido su paga extra de Navidad.

¿Cuándo cobran la paga extra el resto de trabajadores?

Las empresas privadas se rigen por el artículo 31 del Estatuto de los Trabajadores, que recoge los derechos de los trabajadores a recibir dos pagas extraordinarias a lo largo del año: una en verano y otra en Navidad. 

Si hablamos de fechas, la paga extra navideña para los trabajadores de las empresas privadas suele llegar entre los días 15 y 25 de diciembre.

¿Cuánto cobra un empleado que lleva poco tiempo?

Ahora bien, hay trabajadores que llevan poco tiempo en una empresa porque inician la vida laboral o porque han cambiado de trabajo. Así, la paga extra que recibirán será un porcentaje en función del tiempo que se ha trabajado durante ese curso.

Es decir, se aplica la regla 'pro-rata temporis' que significa percibir una determinada cantidad o importe de manera proporcional al tiempo de trabajo desempeñado. Por ejemplo, si un trabajador con un salario base de 1.200 euros se incorpora a su nuevo puesto laboral en julio, para diciembre habrá acumulado la mitad de la paga extra. 

En cifras, los 1.200 euros habría que dividirlos en todos los meses del año (12), saldrían unos 100 euros y a ese resultado habría que multiplicarlo por los seis meses, lo que quedaría en 600 euros.

En materia fiscal, las pagas extraordinarias están sujetas a retenciones por IRPF. Aunque su tratamiento fiscal puede variar según el salario anual y otros ingresos del trabajador, es crucial comprender que se cotizan y deducen mensualmente, incluso si no se reciben prorrateadas.

Cabe señalar que las sentencias del Tribunal Supremo respaldan el derecho a la parte proporcional de la paga extra, incluso si la relación laboral no alcanza el año completo. Este precedente legal añade claridad a un tema que, de lo contrario, podría generar incertidumbre.