Un funcionario público en una imagen de archivo.
Vuelve la jubilación parcial para los funcionarios: así funciona y quiénes son los beneficiados
Los sindicatos y el Gobierno han conseguido cerrar un acuerdo para rejuvencer de forma escalonada la edad media de los funcionarios.
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Subida de las pensiones, nueva edad mínima de jubilación... 2025 ha llegado con una serie de novedades para los trabajadores relativas a la jubilación. Otra tiene que ver con los funcionarios que van a recuperar un derecho que tenían hasta 2012. Y es que podrán jubilarse de forma parcial.
¿En qué consiste? En que podrán acceder a recibir una pensión por jubilación al mismo tiempo que continúan ejerciendo su trabajo en la Administración a tiempo parcial y cobrando por ello.
Según datos de 2024 publicados por el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, en España hay cerca de 3 millones de funcionarios.
¿Cómo funciona la jubilación parcial de los funcionarios?
Anteriormente, los funcionarios tenían un derecho que les permitía poder jubilarse parcialmente a partir de los 61 años si se cumplían una serie de requisitos: acreditar 6 años de antigüedad en la administración, reducción de su jornada entre un 25% y un 75%, y haber cotizado 30 años a la Seguridad Social.
Si cumplían dichos requisitos, el trabajador recibía su salario proporcional a trabajar a jornada reducida y además percibía su pensión por jubilación de la Seguridad Social. Mientras, la plaza debía ser cubierta con un contrato de relevo con un funcionario interino.
Sin embargo, el por aquel entonces presidente, Mariano Rajoy, decidió eliminar esta normativa del Estatuto Básico del Empleado Público como parte de los recortes que firmó su Gobierno durante la crisis económica del 2012. Lo que provocó fue un envejecimiento dentro de los trabajadores del sector público.
Así, más de una década después, los sindicatos UGT y CCOO han conseguido acordar con el Gobierno la recuperación de este derecho para los trabajadores de la Administración Pública. ¿Objetivo? Fomentar el relevo generacional en el sector público.
Las condiciones laborales de esta reinstalación del derecho será muy similar a la anterior: una edad mínima de 60 años si se cumplen 30 años cotizados y una reducción de jornada de entre un 25% y un 50%. Además, los sustitutos de los jubilados parciales serán funcionarios de carrera o estatutarios fijos, reduciendo la temporalidad.
Para su aplicación y entrada en vigor, el Gobierno modificará el Estatuto Básico del Empleado Público, la Ley General de la Seguridad Social y la Ley de Clases Pasivas.
Con esta reforma, se espera que se consiga un relevo generacional dentro del sector público y se dé paso poco a poco a un personal más joven. Los mayores trabajan menos y los jóvenes cubren de forma escalonada su hueco. Según datos de la Secretaría de Estado de Función Pública, la edad media de los empleados públicos es de 51,63 años.
Por otra parte, el ministro de Transformación Digital y Función Pública, Óscar López garantizó que esta modificación de la normativa no supondrá un coste adicional a las arcas públicas. Los relevistas serán elegidos dentro de las ofertas de empleo públicos anuales, siguiendo la planificación de la plantilla sin que el presupuesto se vea afectado.
