Con los precios de la vivienda aumentando cada vez más rápido, pensar en comprarse una vivienda es algo que pocas veces se ve como una posibilidad real. El precio medio de una vivienda en España actualmente es de 2.526 euros por metro cuadrado.
Frente a esta situación, los más afectados son los jóvenes, que usualmente cobran sueldos más bajos y cada vez se emancipan más tarde. La media actual de emancipación es de entre los 29 y 31 años.
A pesar del oscuro presente, hay formas en las que podemos ahorrar sin darnos cuenta hasta llegar a comprar la casa de nuestros sueños en un periodo de 12 meses, así lo explica la experta en banca y finanzas Eli Defferary en su red social Instagram. Solo hay que saber cómo ahorrar.
El método 50/30/20
El método 50/30/20 es una regla de ahorro que se enfoca en distribuir los ingresos de cada mes y destinarlos a tres categorías: necesidades básicas, gastos personales y ahorro. El objetivo es asignarlos de manera equilibrada.
Según esta regla, el 50% de nuestros ingresos debe destinarse a cubrir nuestras necesidades básicas, es decir, gastos de vivienda, servicios públicos, transporte y alimentación, entre otros. Para no excedernos, es importante ser selectivos y evitar gastos innecesarios.
El 30% de nuestros ingresos se destina a cubrir nuestros gastos personales. En esta categoría se incluyen compras como ropa, entretenimiento, comidas fuera de casa y viajes.
La última categoría es la de ahorro, a la que destinamos el 20% de nuestros ingresos. Este fondo de emergencia nos permitirá cumplir nuestras metas, como comprar una vivienda o invertir.
Se recomienda automatizar una transferencia a nuestra cuenta de ahorros cada mes para así evitar la tentación de gastarlo.
Seguir este método cada mes tiene varias ventajas, como ayudar a crear un equilibrio financiero, convertir el ahorro en una prioridad, mantener un presupuesto comprensible y fomentar una mayor conciencia sobre nuestros gastos personales.
La regla de los 30 días
El método de los 30 días puede aplicarse de dos formas, ambas funcionan como estrategias para ahorrar sin realizar sacrificios extremos.
La primera opción es eliminar un gasto innecesario cada mes. Es decir, el último día del mes evaluamos nuestras finanzas e identificamos un gasto prescindible que podemos reducir o sustituir por otro más económico.
La segunda opción es ahorrar un euro el primer día, dos euros el segundo, tres euros el tercero, y así sucesivamente hasta llegar al último día del mes. Siguiendo este método, podríamos ahorrar hasta 465 euros cada mes.
Es importante notar que no se trata de ahorrar un euro fijo cada día, sino de incrementar la cantidad progresivamente.
Hobbies rentables
Muchos tenemos actividades secundarias, también llamadas aficiones, de las que podemos obtener un beneficio económico.
Monetizar nuestros hobbies puede ayudarnos a ganar hasta 500 euros extra al mes. También es importante buscar actividades que generen un ingreso adicional.
Para ello, podemos seguir tres simples pasos:
- Identificar lo que nos apasiona o nos gusta.
- Analizar las brechas del mercado y evaluar si nuestra afición puede satisfacer alguna demanda.
- Investigar sobre el sector o nicho en el que desarrollaremos nuestro hobby para crear algo específico y único.
El truco del 1%
Un truco muy simple, con gran impacto, que podría ayudarte a casi duplicar tus ahorros.
Consiste en aumentar tu ahorro en un 1% de tus ingresos cada mes, una cantidad casi imperceptible, pero que a largo plazo puede traducirse en casi 5.000 euros adicionales.