El futuro de los coches autónomos no está bien definido. Quedan decenas de preguntas por despejar como, por ejemplo, si la infraestructura actual será actualizada para poder comunicarse con los vehículos autónomos, si existirá un carril especial para ellos y cómo se podrá reforzar la seguridad que deja en manos del vehículo la seguridad de los pasajeros.
A pesar de las dudas y de la falta de regulación, Silicon Valley sigue siendo todo un hervidero de novedades relacionadas con este espacio. Aurora, fundada en 2017 dentro de la meca de la innovación, lleva seis años trabajando en coches y camiones autónomos. Su producto final está a punto de ver la luz.
Como viene siendo habitual con este tipo de fabricantes, Aurora ha combinado el desarrollo de software, hardware y procesamiento de datos de manera interna para crear el vehículo del futuro que no requiera de conductor.
Este unicornio, que ya suma una valoración de casi 3.000 millones de dólares (y esto sin haber lanzado su vehículo de manera oficial), ha adquirido tres grandes compañías en los últimos cuatro años: Blackmore Sensors and Analytics en 2019, que le ayudó a dar un impulso a la integración de sensores en los vehículos; Uber Advanced Technologies Group, rama de Uber centrada en el desarrollo de coches autónomos y OURS Technologies, otra firma especializada en la fabricación de sensores.
Tras estas adquisiciones clave, Aurora se dispone a lanzar su camión autónomo a lo largo del próximo año. Según la empresa, el momento es idóneo, más si se tiene en cuenta “la falta de conductores en la industria y los problemas de logística que siguen existiendo tras la pandemia”.
Los camiones de Aurora prometen llegar más lejos que los vehículos operados por conductores profesionales, ya que atrás se dejan problemas como la fatiga humana y las restricciones de horarios. Los camiones de la compañía podrán circular durante más horas. El resultado inmediato se traducirá en una mayor agilidad dentro de la cadena logística.
Logística organizada por terminales
Una de las claves para cumplir con la promesa de la autoconducción es la construcción de terminales por todo Estados Unidos donde se pueda dar cobijo a los camiones de la compañía.
Los clientes interesados en contratar los servicios de logística de Aurora, tendrán la posibilidad de dejar sus tráilers con los cargamentos en cualquiera de estas terminales que, en un inicio, estarán localizadas en las carreteras con mayor demanda para este tipo de transporte de bienes.
Este tipo de modelo, les permitirá integrarse fácilmente con las operaciones y rutas actuales de los clientes.
La reserva de camiones autónomos se podrá realizar fácilmente a través de una plataforma de programación de horarios desarrollada por la compañía.
Antes de la salida de cualquiera de los camiones, y cumpliendo las normativas de seguridad de Estados Unidos, el equipo de Aurora tendrá que inspeccionar todos los componentes claves del vehículo: funcionamiento de frenos, volante, luces, sensores, ruedas y equipos de emergencia.
Antes de salir, el equipo debe verificar que las condiciones climáticas son las idóneas para un vehículo autónomo. El clima extremo, como las fuertes lluvias y la niebla, podrían bloquear la visión de las cámaras y los sensores de los camiones.
Si durante el recorrido el camión se topa con cualquier inconveniente, el equipo de soporte de Aurora recibirá una notificación y podrá conectarse a las cámaras del transporte, en tiempo real, para determinar la solución más viable dependiendo de las circunstancias.
“La tecnología de conducción autónoma transformará la forma en que transportamos las mercancías”, comenta Kendra Phillips, vicepresidenta de servicios de Aurora. “Resulta emocionante que podamos liderar el camino sobre cómo ofrecer este tipo de operaciones sin conductor a nuestros clientes y a la industria en general”.
El cumplimiento de sus objetivos es viable, teniendo en cuenta que, este mismo mes, la compañía anunciaba la finalización de “Aurora Driver”, la tecnología que impulsará su servicio de camiones sin conductores. Ahora la compañía se adentra en su fase final de refinamiento y validación de la tecnología antes del lanzamiento comercial.
“Desde el primer día, realizamos inversiones tecnológicas clave y tomamos decisiones estratégicas que nos ayudaron a alcanzar este momento crucial”, comenta Chris Urmson, cofundador y director ejecutivo de la compañía.
El lanzamiento definitivo en las carreteras del país no será repentino. En la actualidad, Aurora ya opera diversas rutas por las carreteras de Texas. Los programas piloto seguirán expandiéndose a lo largo de 2023. En el tercer trimestre de este año, la empresa espera haber finalizado su terminal en la ciudad de Houston.