Uno de los peores enemigos de la energía solar es la presencia de nubes. Provocan una bajada brusca de la radiación sobre los espejos y, en consecuencia, en el receptor situado en la torre central. Por eso las centrales termosolares necesitan contar con el mejor sistema de previsión meteorológica que les permita optimizar su rendimiento.
Investigadores de la Universidad de Almería, el Ciemat y la Universidad de Antofagasta de Chile han desarrollado un software que puede predecir los cambios meteorológicos con gran fiabilidad, basándose en la observación de imágenes de satélite. Con el programa, se obtienen representaciones reales del cielo con un margen de error en las predicciones inferior al 15%. De esta manera consiguen planificar y gestionar con más acierto el funcionamiento de la planta.
A través de una serie de algoritmos, el software ofrece una predicción de la radiación solar a corto plazo, hasta tres horas vista, sobre la planta y expone una estimación de la cantidad de energía que se producirá en cada instante. Estos datos, sujetos al movimiento de la nubosidad en la atmósfera, son introducidos en un sistema de simulación y son analizados para cuantificar el índice de acierto. Posteriormente, las previsiones meteorológicas son comparadas con datos reales observados y de ahí se determinan los errores estadísticos.
De esta manera, se puede prever la cantidad de energía que la planta producirá en cada momento. Además, estos algoritmos permiten conocer con mayor exactitud las bajadas o subidas en la producción eléctrica, lo que permite un mejor control del almacenamiento de la energía que se genera.
“Hemos realizado estudios comparativos durante un año en predicciones desde 15 minutos hasta tres horas previas en intervalos de un cuarto de hora. El momento de mayor precisión en la predicción de nubes es una hora y media antes, lo que permite la acción de los responsables de plantas para una mejor gestión de la producción”, indica el investigador de la Universidad de Almería Joaquín Alonso, coautor del estudio.
Los investigadores han realizado los ensayos en dos plantas termosolares durante un año completo para confirmar la eficiencia del método que han desarrollado. Concretamente, los estudios se han desarrollado en la planta Gemasolar de Fuentes de Andalucía (Sevilla) y en la de Crescent Dunes en Estados Unidos. Actualmente, los investigadores trabajan en la implantación del sistema de cámaras de cielo en el desierto de Atacama en Chile, en el que también prevén instalar el servicio de predicción.
El trabajo de investigación, que ha sido publicado en Science Direct, ha contado con financiación del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad de España, bajo los proyectos PRESOL y PVCastSOIL, además de la colaboración de la Universidad de Antofagasta a través del programa CORFO del Gobierno de Chile.