Granada se recompone tras perder la Agencia Estatal de IA y redirige su ilusión hacia la fusión nuclear
La ciudad y su entorno desarrollan un ecosistema internacional en torno a este sector cuya guinda sería un acelerador de partículas "único" que aún necesita sumar apoyos internacionales.
4 febrero, 2023 01:42Granada estaba francamente convencida de que el Gobierno ubicaría allí la sede de la Agencia Estatal de Supervisión de la Inteligencia Artificial (AESIA). La confianza estaba basada en un ecosistema puntero en el mundo en torno a esta tecnología.
Pero el día del anuncio no se pronunció el nombre de la ciudad andaluza, sino el de La Coruña. Incredulidad, asombro, rabia… Fue, en definitiva, un palo para el Ayuntamiento y la Universidad granadina, principales impulsores de la candidatura de Andalucía.
Evidentemente, no ha perdido potencia el ecosistema de inteligencia artificial generado en Granada durante décadas por quedarse sin AESIA. Sus investigadores van a seguir estando entre el top 100 mundial y los centros de excelencia y las grandes compañías, por poner más ejemplos, van a seguir acompañando…
Ahora bien, superado esta especie de concurso abierto por el Gobierno, a Granada le ha llegado el momento de volver a ilusionarse.
De hecho, esta ilusión no es precisamente nueva, porque lleva años trabajándose en la sombra, pero es ahora cuando afronta un momento decisivo. Tanto, que incluso entre los gestores municipales reaparece el nerviosismo lógico de quien quiere que la ilusión se transforme en realidad.
Hablamos del trabajo del consorcio IFMIF-DONES España, encargado de desarrollar en tierras granadinas un proyecto singular en torno al sector de la fusión nuclear y que tendría como guinda la ejecución de un acelerador de partículas capaz de generar neutrones similares a los que aparecerían en un reactor de fusión.
Estos neutrones se lanzarán sobre unas muestras de materiales para ver cuáles son utilizables en un futuro reactor de fusión.
El consorcio IFMIF-DONES se creó en junio de 2021, mediante un convenio de colaboración entre el Gobierno y la Junta de Andalucía, y tiene como objetivo contribuir al Programa Europeo de Fusión, entre otras cosas, a través del diseño, construcción, equipamiento y explotación que lleva el mismo nombre.
El proyecto es una iniciativa del Laboratorio Nacional de Fusión del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) y será "una instalación internacional única", según explica a D+I el director del consorcio, Ángel Ibarra.
Además de su relevancia para el desarrollo de la fusión como fuente de energía, también será muy relevante en otras áreas de investigación y del conocimiento que podrán beneficiarse de su tecnología, como la medicina, la física de partículas, los estudios de física básica, la industria…
900 millones de inversión
Esta instalación científica prevista en el municipio granadino de Escúzar y está prevista su puesta en funcionamiento para 2030. Los primeros resultados se podrían obtener ya en 2035.
El alcalde granadino, Francisco Cuenca, remarca que este proyecto es uno de los grandes proyectos científicos de futuro del país y detalla que la inversión prevista sólo en su construcción es de 900 millones de euros y se prevé la generación de 1.000 empleos, de los que 400 corresponderá a personal científico y técnico.
Son cifras gigantescas que invitan a pensar que el proceso para desarrollar el proyecto no está siendo sencillo.
Desde el Ayuntamiento -quizá con lo sucedido con la AESIA aún en la cabeza- apelan a la cautela, algo que contrasta con el optimismo que reiteran desde el consorcio. "Yo siempre digo que el proyecto se va a hacer sí o sí", indica el director.
Y es que si hay cautela o necesidad de reafirmarse en el optimismo es porque todavía existen ciertos obstáculos en relación con la materialización del proyecto.
En este sentido, el propio director del consorcio afirma que "estamos trabajando para acabar de cerrar un acuerdo político de varios socios y será entonces cuando estaremos listos para lanzar el proyecto oficialmente".
Cuando Ibarra habla de socios habla del apoyo de varios países a esta iniciativa. Cabe destacar que, a día de hoy, España cuenta ya con el respaldo de Croacia. Ángel Ibarra destaca que se está negociando con la Unión Europea en su conjunto y con países a título individual, como Italia o incluso Japón.
El respaldo de estas regiones sería clave, pero eso no quiere decir que el proyecto esté paralizado totalmente. De hecho, el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha mantenido recientemente una reunión en Granada para revisar los avances alcanzados en el grupo de trabajo permanente que mantienen tanto el regulador y el consorcio como el CIEMAT y la Universidad.
Obras de un centro de investigación
En esta reunión se estudiaron los progresos alcanzados dentro del grupo de trabajo en los últimos meses y se analizaron los últimos avances en el proyecto.
Por parte del regulador, se presentaron los sistemas de gestión de residuos radioactivos líquidos y gaseosos en operación normal y en condiciones de accidente con que deberá contar el proyecto. También se abordaron los requisitos de seguridad de alto nivel de la instalación y el estado de las licitaciones relativas a la construcción de edificios de oficinas y almacén.
Tras la reunión en Granada, los representantes del CSN se desplazaron a Escúzar para visitar las obras que, por parte del CIEMAT, se llevan a cabo en el emplazamiento de la instalación científica internacional.
Estas obras, según han confirmado a D+I fuentes del consorcio, son una serie de edificios y laboratorios anexos que conforman el grueso del proyecto, a la espera de la guinda del acelerador de partículas.
Hace unos días, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y la rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda, colocaron la primera piedra del futuro centro de investigación UGR-DONES, edificio que servirá para apoyar y reforzar el proyecto matriz, la construcción del acelerador de partículas IFMIF-DONES.
Moreno destacó que IFMIF-DONES se ha convertido en "uno de los hitos del proceso de transformación de Andalucía" debido a la trascendencia y el calado de la futura infraestructura.
"Los granadinos y granadinas debemos sentirnos orgullosos de contar en nuestra ciudad con un proyecto que está llamado a transformar la realidad en la que vivimos", remacha el alcalde de la ciudad.