Es un departamento formado por seis personas. Sin embargo, el Servicio de Cartografía y Sistemas de Información Geográfica de la Consejería de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo del Gobierno de Cantabria es todo un referente nacional en lo que a sistemas de inteligencia artificial aplicados a la gestión del territorio se refiere.
Puede que el proyecto que más llame la atención de los que se trae entre manos este servicio público sea la creación de un gemelo digital de toda, absolutamente toda, la geografía cántabra, pero como dice su responsable, Gabriel Ortiz, esta iniciativa "sólo es la punta del iceberg".
Sí, han leído bien. Cantabria es, por lo que cuentan desde el gobierno de Cantabria, la única región que tiene un gemelo digital de toda la comunidad autónoma. "Conocemos gemelos digitales de territorios, pero pequeños, circunscritos a una ciudad, a una determinada área forestal, etc. Nuestro proyecto, en este sentido, es único porque estamos hablando de una monitorización digital de toda la región", resume.
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Pues bien, Ortiz explica que "no se trata de una mera representación visual, el valor principal está en los datos y en las diferentes simulaciones que se pueden hacer con esos datos, con el objetivo claro de optimizar recursos".
El gemelo digital de Cantabria, por ejemplo, muestra en detalle la vegetación de la comunidad autónoma, por lo que se puede determinar la altura media de ésta, la fracción del territorio que ocupa o la cantidad de materia orgánica existente.
De esta forma, se puede estimar la cantidad de combustible que existe frente a un incendio o la cantidad de madera que se puede extraer de determinados lugares, según explica Ortiz.
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Hasta ahora, admite Ortiz, el gobierno de Cantabria ha usado este proyecto sobre todo para el análisis de la cubierta vegetal, dando lugar a un nuevo mapa de usos y cobertura del suelo que, sin esta tecnología, no contaría con el nivel de detalle que posee.
A toda esta tecnología hay que sumar un nuevo reto: el de mantener actualizados los datos, considerando la naturaleza cambiante del territorio y las ciudades. Para ello, Cantabria tiene previsto realizar nuevos vuelos LiDAR de mayor densidad y mejor clasificación, lo que permitirá tener, en un futuro, gemelos digitales mucho más precisos.
La tecnología LiDAR (Light Detection and Ranging) es una técnica láser que detecta objetos y mide la distancia entre éstos y está en la base de todo el gemelo digital. Este proyecto se ha basado en 48.000 millones de puntos LiDAR.
Los datos son públicos, aunque Ortiz revela que "la experiencia nos dice que no son tan fáciles de manejar ni de procesar posteriormente por parte de cualquier, además de que se necesitan softwares potentes de gestión o un uso adecuado del deep learning". Por cierto, el aliado tecnológico del gobierno de Cantabria en este proyecto es Esri.
Esta iniciativa, realizada en colaboración con el Instituto Geográfico Nacional y el Centro Nacional de Información Geográfica (CNIG), abre todo un mundo. Y surge otra pregunta: ¿podría tener cada región un gemelo digital de estas características hasta el punto de que todo el país estuviera digitalizado?
Gabriel Ortiz se muestra cauto. Reconoce que "evidentemente nada impide ahora que España tenga un gemelo digital, existe la tecnología y experiencias como la nuestra, pero hay que invertir esfuerzo, horas y dedicar recursos".
Como explica el responsable del Servicio de Cartografía del gobierno de Cantabria, "esta disciplina (la cartografía) es fruto de siglos de trabajo y lo que hay que hacer ahora es encontrar un equilibrio entre hacer las cosas como se hacían antes y encontrar dónde pueden existir puntos de innovación".
Especies invasoras
Decíamos, en cualquier caso, que este proyecto de gemelo digital de la región, aun siendo el más mediático, no está considerado como el más importante por este departamento.
Con especial cariño habla Ortiz de iniciativas desarrolladas gracias a la tecnología de la visión artificial. Destaca un proyecto que realiza un seguimiento de especies invasoras, "especialmente una que afecta a todo el norte de España", que desplazan la vegetación.
La labor de la administración gracias a esta tecnología es adelantarse a los movimientos de esa especie invasora, conocer su evolución para prevenir consecuencias perniciosas.
El seguimiento forestal o el seguimiento de playas -ocupaciones, concentraciones de gente, etc.- son otros de los proyectos que lleva a cabo este departamento.
Y todo, cabe recordar, en un servicio formado por seis especialistas. "No se trata de que sean muchas o pocas personas. Lo importante es que se trabaje con buenas herramientas", concluye Ortiz.