Con los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) en la mano, la provincia de Cuenca es la que cuenta con la mayor superficie de masa forestal no adehesada, es decir, no destinada a agricultura y ganadería.
No es extraño, en este sentido, que el Ayuntamiento de Cuenca y la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) junto a otros colaboradores pusieran en marcha en tierras conquenses el Laboratorio Urbano en Bioeconomía Forestal (Urban Forest Innovation Lab -UFIL-).
Se trata de un programa de acompañamiento y mentorización de ideas disruptivas destinadas a encontrar un hueco en el mercado.
La madera, la gestión de bosques o el asesoramiento a empresas en materia de sostenibilidad son, lógicamente, los temas sobre los que decenas de emprendedores están demostrando estos meses cómo la innovación y, en algunos casos, la tecnología pueden servir para aprovechar ese liderazgo en materia forestal.
Esta iniciativa, que está a punto de concluir su segunda promoción, ya ha dado buena muestra este año de su potencial a través de los participantes en la primera edición, que han ido desarrollando sus proyectos en este 2021.
Además, también ha mostrado el potencial que tienen las iniciativas presentadas para contribuir al desarrollo económico y sostenible de la provincia, considerada una de las abanderadas de la llamada España Vaciada.
No estamos hablando de un programa menor. Tanto es así que, para la segunda edición, que concluirá dentro de tres meses, empresas como Ikea han querido convertirse en colaboradoras a través de la creación de retos.
Lo que persigue Ikea
En el caso del gigante sueco, plantea conocer la fórmula para promover la generación de una cadena de suministro de madera certificada FSC para el sector del tablero y del mueble.
Esta certificación es la que garantiza que la madera utilizada en un proceso de elaboración de un mueble está hecha siguiendo cánones de sostenibilidad.
Los alumnos de esta segunda promoción debían aplicar sus conocimientos para satisfacer este reto y llevarlo al mercado actual, convirtiéndose así en una nueva línea de negocio, siempre con la masa forestal de Cuenca como protagonista.
En esta segunda edición, participan un total de 30 alumnos y alumnas y en estos momentos afrontan la recta final de su estancia, en la que han recibido formación y las herramientas y conocimientos necesarios para llevar a cabo sus proyectos de emprendimiento en bioeconomía forestal en la ciudad y sus bosques.
Más allá de sus proyectos, además de Ikea, otras empresas como Suez, Cibica y Vía Ágora presentaron sus propios retos para el desarrollo innovador de estos alumnos.
Cabe mencionar que los promotores de la iniciativa ya han garantizado la continuidad de este programa el próximo año con una tercera edición.
UFIL es una iniciativa promovida en el marco de Acciones Urbanas Innovadoras (UIA), financiada al 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). Está liderado por el Ayuntamiento de Cuenca y participa la UCLM, UPM, Junta de Castilla-La Mancha, IED, FSC España, CEOE CEPYME Cuenca, Ayuntamiento de Cuenca Maderas S.A. y Khora Urban Thinkers. Además, colaboran la Diputación Provincial de Cuenca, Globalcaja y sus fundaciones, y Prodese.
Pero, sin duda, la mejor manera de ver el manejo de los alumnos y los objetivos cumplidos de este programa es en los resultados de la primera edición, que puso su broche de oro durante 2021 con la presentación de algunas de las ideas disruptivas que quieren dar el salto al mercado.
Innovación turística, urbanística y tecnológica
Para ello se organizó un Demo Day, en el que los CEO de las startups creadas para desarrollar los negocios en torno a los bosques de Cuenca pudieron mantener un interesante coworking con inversores.
En estas jornadas se pudieron conocer algunos interesantes proyectos que tienen en común como ejes fundamentales los de contribuir al desarrollo del territorio, frenar la despoblación, aprovechar de forma sostenible los recursos forestales y, en última instancia, poner en marcha una idea de negocio.
Uno de los participantes en esta primera edición fue Luis Lapeña, ahora ya convertido en CEO de Geforest. Esta empresa es la primera de España certificada para la gestión de modelos predictivos forestales mediante tecnología LíDAR.
Esta tecnología permite determinar la distancia desde un emisor láser a un objeto o superficie, mejorando tanto la rapidez de la medición como la precisión. En este caso, se aplica a la gestión forestal.
Además de participar en este programa, Geforest ha estado dos años trabajando en la calibración, gestión de datos, trazabilidad de la información y la parametrización.
Según explicó Lapeña, los inventarios clásicos consumen tiempo y recursos humanos, con un excesivo coste y una gestión menos eficaz. Además, ofreció un dato sobre la masa forestal de Cuenca: el 50% del monte público no cuenta con ningún tipo de gestión.
Esta empresa se coloca al servicio de la administración o de otras empresas para realizar proyectos de ingeniería forestal, inventarios, estimaciones de biomasa…
Otra de las iniciativas disruptivas en torno a los bosques conquenses es la de Nemétona, una startup que busca aprovechar la masa forestal para construir viviendas y ciudades más sostenibes.
"Cuenca, un 'gigante' dormido"
Su CEO, Ávaro Tarancón recalca que la compañía busca aportar un valor añadido a la madera, con una segunda transformación con paneles CLT que permiten el diseño de estructuras.
En estos momentos, según comentó, la oferta de CLT satisface solo a la mitad de la demanda, lo que obliga a recurrir al mercado exterior. La propuesta de esta startup es aprovechar, de forma sostenible, la gran capacidad de los bosques de Cuenca.
Por último, otra de las iniciativas presentadas ha sido Nómadas Suites, un proyecto de turismo sostenible disruptor, por lo que tiene de independiente, de autosuficiente y, lo más curioso, móvil.
Se trata de pequeñas viviendas, a modo de alojamientos turísticos, construidos de manera respetuosa con el medio ambiente que se ubican en lugares privilegiados de la naturaleza en función de la estación del año, del paso de aves migratorias, etc.
El usuario puede elegir dónde quiere que le ubiquen su 'suite' dentro de determinados parajes en el entorno de la provincia de Cuenca. Es, como dice su CEO, Esther Fuente, el "privilegio de la primera fila".
La propuesta persigue un impacto positivo en la dinamización del territorio, la conservación de espacios naturales o la creación de empleo.
En resumen, estas son solo tres de las 17 propuestas completadas en la edición inaugural del UFIL. El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha puesto en valor los "potentes" recursos forestales con los que cuenta la ciudad, indicando que "es un gigante dormido, pues siempre han proporcionado beneficios directos e indirectos, pero ahora toca verlo como una oportunidad cierta y segura de negocio de cara a futuro".
Especialmente ha incidido en "las grandes capacidades que la bioeconomía forestal puede proporcionar sólo a la ciudad de Cuenca sino también a las empresas de ámbito nacional e internacional", como es el caso de IKEA, la gran estrella de la segunda edición.