Castilla y León cumple sus objetivos en innovación: más inversión para erradicar el paro juvenil
El Plan Director 2017-2020 'saca buena nota' en la víspera de la llegada de 30 millones del Next Generation para digitalización de empresas.
19 octubre, 2021 01:38Noticias relacionadas
Hace unos días, la consejera de Empleo e Industria de la Junta de Castilla y León, Ana Carlota Amigo, presentó los "convincentes" resultados del Plan Director de Promoción Industrial 2017-2020 en materia de I+D+i.
Sólo unas jornadas antes, el presidente regional, Alfonso Fernández Mañueco, explicaba durante la visita a una bodega cómo la innovación está transformando la agricultura a través de la tecnología.
Además de estos hitos y en un lapso de tiempo de siete días, también se ha conocido que el territorio castellano y leonés recibirá 30 millones de euros de los Next Generation para digitalizar empresas.
Una jornada titulada 'Los diálogos sobre el futuro' en la que participó el viceconsejero de Empleo, David Martín, puso la guinda al pastel a modo de conclusión: "La innovación o la digitalización son claves para la erradicación del paro juvenil".
Esta completa ensalada de actualidad da una idea de la importancia que está dando Castilla y León al inevitable proceso de transformación digital que están viviendo todos los sectores económicos: desde la agricultura a la industria, pasando por el sector terciario.
De hecho, incrementar el gasto público en I+D+i era uno de los cuatro objetivos del I Plan Director de Promoción Industrial de Castilla y León 2017-2020. A la vista de los resultados, presentados por la consejera Amigo, podría considerarse cumplido.
En este sentido, el gasto público en I+D+i presupuestado en el ejercicio 2020 ascendió a 236 millones de euros, lo que representa un 2,83 % del gasto no financiero de las consejerías, muy cerca del 3 % inicialmente previsto, cuando se partía del 2,19 % en 2017.
Peso de la I+D+i sobre el PIB
Por otra parte, el peso de la I+D sobre el PIB aumentó un 12,5% (lo hizo en un 3,3 % de media en el resto de España).
Según el informe de evaluación de resultados del Plan Director, el gasto interno en I+D se elevó en Castilla y León, en 2019, a 800,9 millones de euros, lo que representa el 1,35% del PIB regional, situando a Castilla y León entre las cinco comunidades autónomas con mayor porcentaje, detrás de País Vasco (1,97%), Madrid (1,71%), Navarra (1,67%) y Cataluña (1,52%).
Esta hoja de ruta para la industria de 2017 a 2020 también incluyó cinco ejes prioritarios para la inversión pública, uno de los cuales era el apoyo a la innovación tecnológica y digitalización.
En este caso, el informe de evaluación revela que se han realizado actuaciones dirigidas a apoyar o impulsar el esfuerzo inversor de las empresas, fomentar la transformación digital, mejorar la formación, favorecer la transferencia de conocimiento y la colaboración entre universidad, empresas con una inversión de 236,6 millones de euros.
Es evidente que el apoyo a la transformación digital por parte de las administraciones públicas es ya una tendencia innegable. Esta colaboración público-privada, además, se va a ver reforzada con una potente inyección proveniente de los fondos europeos.
Y es que hace unos días se conoció que los Next Generation aportarán 500 millones de euros a España para el impulso de la digitalización, de los que 29,5 millones serán gestionados por la Junta de Castilla y León.
"Queremos seguir liderando la innovación agraria, para lo cual se está poniendo la mejor tecnología al servicio del campo".
En relación con el Componente 15 (Conectividad digital), la Junta de Castilla y León pondrá en marcha diferentes actuaciones, entre las que se encuentran el refuerzo de la cobertura de Internet en centros públicos asistenciales o sociales; una línea de subvenciones para dotar de conectividad a polígonos industriales y centros logísticos; un programa de bonos de conectividad de banda ancha para familias y colectivos vulnerables, y una convocatoria de ayudas a la adecuación de infraestructuras de telecomunicaciones en edificios.
De los 360 millones de euros destinados a estos fines en todo el territorio nacional, la comunidad de Castilla y León recibirá 22,1 millones.
En cuanto al componente 19 (Plan Nacional de Competencias Digitales), a Castilla y León le corresponden 7,4 millones de euros, de los 140 que han sido repartidos entre las administraciones autonómicas.
El objetivo de este programa en la Comunidad es la formación digital de más de 35.000 ciudadanos antes de que finalice 2025, para la lo que la Junta de Castilla y León impartirá programas formativos en competencias digitales dirigidos a la ciudadanía, que tendrán como destinatarios prioritarios las personas mayores, mujeres, niños, jóvenes y colectivos en riesgo de exclusión social.
Los criterios de reparto de los fondos entre las diferentes comunidades autónomas se han establecido en función del tipo de proyecto.
Así, en el programa de bonos de conectividad para colectivos vulnerables o en el de formación en competencias digitales se han tenido en cuenta los datos suministrados por el Instituto Nacional de Estadística sobre el porcentaje de población en riesgo de pobreza o sobre el grado de habilidades digitales de la ciudadanía.
Conectividad polígonos industriales
En la distribución de los fondos para dotar de cobertura polígonos industriales se ha tenido en cuenta la superficie territorial de cada comunidad y el número de empresas establecidas. Para las actuaciones de refuerzo de conectividad en centros públicos se ha tomado como criterio el dato de población.
Y respecto a los fondos del programa de ayudas para dotar de infraestructuras de telecomunicaciones a los edificios se ha evaluado el número de edificios que en cada comunidad carecen de este tipo de infraestructuras.
Este tipo de ayudas, conviene recordar, no solo están pensadas para el tejido industrial, sino que el resto de sectores económicos se pueden ver beneficiados.
De hecho, uno de ellos, la agricultura, está viviendo una potente transformación, como prueba uno de los proyectos de los que más le gusta presumir al presidente regional, Alfonso Fernández Mañueco.
Tecnología espacial para la agricultura
El líder del ejecutivo autonómico, durante una visita a una bodega, recordó cómo uno de los objetivos de Castilla y León es "que siga liderando la innovación agraria y agroalimentaria de España, para lo cual se está poniendo la mejor tecnología al servicio del campo".
Como ejemplos, Fernández Mañueco señala la puesta en marcha de tecnología espacial aplicada a la agricultura, con un servicio público gratuito "único en España" para actuar vía satélite desde el móvil en los cultivos (riego o fertilización).
Y en cuanto a las pymes, se ofrece la tecnología más avanzada para optimizar procesos de transformación, conservación y extensión de la vida útil de los alimentos, según explicó.
El presidente de la Junta ha asegurado que "el sector agroalimentario de Castilla y León avanza rápidamente en ese camino de la modernización y que para ello cuenta con la ayuda de la Junta, que apuesta por crear soluciones digitales y sostenibles para aumentar la competitividad; fomentando la investigación y la transferencia de conocimiento a través del Instituto Tecnológico Agrario, que está a la vanguardia de Europa".
Y toda esta apuesta por la I+D+i y tecnología tanto en la industria como en los sectores primarios si a algo va a beneficiar va a ser al empleo del futuro.
Eso es, al menos, lo que dejó claro el viceconsejero de Empleo de la Junta, David Martín, durante una mesa redonda a la que asistió como ponente titulada '¿Cómo reducimos el desempleo juvenil?'.
"La solución no es sencilla, pero una de las obligaciones debe ser apostar por sectores de futuro como son la ciberseguridad, la digitalización y la economía circular", recalcó.
Otras de las soluciones, según el viceconsejero, son reducir el número de contratos existente e implantar un Contrato Único Indefinido, "erradicar la temporalidad, invertir en FP Dual o mejorar la educación".
Pero parece indiscutible que el empleo del futuro pasa por palabras como talento tecnológico, innovación, emprendimiento y disrupción.