Salamanca 'conquista' Doha con varios proyectos tecnológicos para la sostenibilidad energética
Entidades públicas de ambas ciudades trabajan en el país asiático en iniciativas con 'edge computing', IA e internet de las cosas como protagonistas para un control 360 de todos los recursos disponibles.
17 enero, 2024 04:13"Quizá por nuestro carácter nos cuesta vendernos y siempre miramos hacia nosotros mismos". Son palabras pronunciadas a D+I por Juan Manuel Corchado, uno de los referentes en inteligencia artificial en Castilla y León como catedrático de la Universidad de Salamanca (USAL) y como presidente de AIR Institute, centro tecnológico dedicado al desarrollo de soluciones de esta tecnología.
Pero no hay mejor manera de combatir una crítica que esforzarse en revertirla. Por eso no extraña que la misma persona que manifiesta esa opinión sea la primera en trabajar intensamente por desmontarla.
Viene lo anterior a propósito de una visita que el propio Corchado realizó a Doha, capital de Catar. No para decir que Salamanca es cada vez una ciudad tecnológicamente más abierta sino para demostrarlo.
Y es que la Universidad de Salamanca lidera una serie de proyectos a través de los cuales este país asiático quiere mejorar la gestión de sus recursos energéticos. En estos planes, el centro universitario cuenta con la colaboración de Iberdrola.
La colaboración entre la compañía energética y la USAL, a través del Grupo de Investigación BISITE, es cada vez más intensa. Desde que se inauguró el Iberdrola Middle East Lab en el año 2018 hasta la fecha, el parque científico y tecnológico situado en Catar ha ido creciendo, convirtiéndose en un importante centro de excelencia desde el que se lanzan iniciativas muy innovadoras.
El catedrático Corchado realizó una visita a Doha para revisar el estado en el que se encuentran los proyectos desarrollados en este último año (tienen hasta seis iniciativas en marcha con diferente grado de madurez) y planificar nuevas propuestas para lanzarlas en este nuevo ejercicio que acaba de comenzar. De entre los proyectos avanzados, Corchado destaca dos, el proyecto AI-BEMS y el proyecto Edge Power Meter.
AI-BEMS, se refiere a un sistema de gestión energética para edificios que permite controlar elementos y equipos eléctricos como termostatos, calderas o sistemas de iluminación.
Explican desde la USAL que, en el futuro, mediante el uso de este sistema en los edificios, los usuarios y habitantes de las viviendas "podrán gestionar de forma consciente y completa los recursos energéticos utilizados para cada tecnología o elemento eléctrico empleado en sus propios hogares o lugares de trabajo, contribuyendo así convenientemente a mejorar la eficiencia energética en todo el mundo".
El proyecto implementado en Catar incluye pruebas piloto en un entorno real para comprobar los avances. Según sus miembros, el trabajo tendrá un impacto significativo en el futuro de la gestión energética gracias al gran ahorro de energía que supondrá.
"Es urgente acabar con el despilfarro de recursos y una forma de conseguirlo es mejorar la eficiencia de los sistemas tradicionales existentes. Este proyecto generará importantes ahorros en el consumo eléctrico de los hogares, lo que beneficiará tanto al planeta -ayudando a combatir el cambio climático- como a los consumidores, que podrán ahorrar dinero", afirma uno de los investigadores de la USAL.
Conviene decir que ya existen las mencionadas soluciones BEMS, que son sistemas de gestión energética de edificios que permiten controlar elementos y equipos eléctricos, "el problema es que suelen ofrecer servicios basados en la nube que se adaptan a patrones de consumo, pero que los usuarios no suelen seguir".
Además, hasta ahora, "estos sistemas presentan riesgos como la posibilidad de ciberataques y un ancho de banda de transmisión de datos demasiado exigente".
Los investigadores de BISITE e Iberdrola han ido más allá del concepto y han avanzado en las especificaciones de diseño de la plataforma y otros diseños que se irán integrando progresivamente.
'Edge computing'
Los investigadores centran sus esfuerzos en la arquitectura edge computing, así como en la recopilación, diseño y adquisición de los datos y dispositivos necesarios para llevar a cabo las dos pruebas piloto.
"La idea es definir una estrategia para que, tras la validación y prueba del sistema, la plataforma pueda introducirse en el mercado y utilizarse a escala global, independientemente de la duración del proyecto", indican desde la USAL.
También sobresale el proyecto Edge Power. Iberdrola Retail, en colaboración con el Grupo de Investigación BISITE de la Universidad de Salamanca, se ha embarcado en este ambicioso proyecto que busca desarrollar y probar un conjunto de Nodos Edge para redefinir la forma en que se monitoriza y gestiona el consumo de energía a nivel de la capa hardware.
La tecnología edge permite llevar la inteligencia artificial a los sensores que computan los datos, de forma que la información se procesa en el lugar donde se genera sin necesidad de transportarla a la nube. Esto aumenta la eficiencia y reduce los costes de las comunicaciones.
Tiene como fin optimizar el uso de la energía, reducir costes y aumentar la eficiencia de los sistemas eléctricos, todo ello minimizando el impacto medioambiental, definiendo un nuevo diseño innovador de los diferentes componentes del sistema y de la arquitectura del mismo.
El proyecto Edge Power Meter aprovecha la capacidad del edge computing, la inteligencia artificial y la tecnología IoT para crear una nueva generación de contadores de energía. Estos contadores se incorporarán a Nodos Edge, que se conectarán a diversos dispositivos ya en uso en el proyecto AI-BEMS. Estos nodos trabajarán en tándem con algoritmos desarrollados, marcando un momento crucial en el avance de la gestión inteligente de la energía.
Sensores integrados en viviendas
Los objetivos clave del proyecto Edge Power Meter abarcan un análisis exhaustivo del coste del hardware para garantizar la asequibilidad para el consumidor, el desarrollo de un contador de energía Edge Node rentable, la generación de la plataforma y la integración de las funcionalidades del sistema de gestión Edge Node Management System (ENMS), la integración y ejecución de un caso de uso de ASA seleccionado dentro del Edge Node, y la prueba piloto fundamental de Catar y España.
El Edge Node Power Meter está diseñado para facilitar la comunicación con una red de sensores integrados en las viviendas, utilizando tecnologías como WiFi y Zwave y PCL. Se conectará a la plataforma en la nube (ENMS) para transmitir datos al servidor y realizar cálculos de alto nivel que no requieran baja latencia.
Con una importante capacidad de procesamiento para el análisis avanzado de datos y modelos de IA racionalizados, el Edge Node gestionará la inteligencia dentro de la infraestructura del hogar.
El desarrollo del proyecto Edge Power Meter acabará en julio de 2024, actualmente los investigadores salmantinos están diseñando las placas electrónicas.