No por ser un argumento reiterado mejoran las cifras que resolverían el problema. Desde hace tiempo, las empresas están necesitadas de talento tecnológico e innovador. La importancia de despertar vocaciones en los y las jóvenes es capital para que la nueva economía tome impulso de cara al futuro.
Y por eso cada región se esfuerza -cada una a su manera- en intentar despertar ese gusanillo. En Extremadura, por ejemplo, lo han hecho ya no sólo con una Olimpiada de Telecomunicaciones sino con un mensaje directo.
Ese mensaje lo ha dado el director general de Agenda Digital de la Junta de Extremadura, Pablo García. Y, desde luego, ha sido un mensaje claro sobre la situación. Un aviso -un consejo, más bien- que ataca la línea de flotación que más preocupa a las nuevas generaciones: el mercado laboral al que se enfrentan.
García, durante la celebración de la citada Olimpiada, recordó a los participantes que se habían dado cita en la Escuela Politécnica de Cáceres que "ser teleco no sólo es una profesión con mucho futuro, sino que permite ser creativo a la hora de enfrentar problemas y, sobre todo, brinda la oportunidad de participar activamente en los revolucionarios cambios que ya están en construcción".
Para García "se trata de valores y habilidades que hoy día ya se cotizan de manera extraordinaria en el mercado de trabajo hasta el punto de que cientos de puestos de trabajo en la región se quedan sin cubrir cada año porque las empresas no encuentran personal técnico con este tipo de perfiles".
Durante el encuentro, el director general quiso recordar también que el desarrollo de las telecomunicaciones constituye la pieza clave para el desarrollo de la economía digital. "Sin las telecomunicaciones sencillamente no existiría la industria 4.0, ni ese nuevo modelo de hacer turismo que recurre a la realidad virtual o al internet de las cosas para facilitar y hacer más intensa la experiencia, y, desde luego, no se hubieran podido producir fenómenos trascendentales para el mundo actual como el de la globalización".
En resumen, la Junta de Extremadura tiene claro que evangelizaciones de este tipo ante los y las jóvenes extremeños son una de las mejores inversiones posibles de cara al futuro de muchas de las empresas que están inmersas en esa revolución transformadora de la economía.
La I Olimpiada Nacional de Telecomunicaciones: Resolviendo Retos de la Sociedad, por cierto, proponía a equipos de alumnos de 3º y 4º de la ESO y Ciclos Formativos de Grado Medio y Superior y, de forma individual, a los estudiantes de Bachillerato, la participación en diferentes pruebas que vinculan a las telecomunicaciones con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
De esta manera se pretende fomentar entre los estudiantes capacidades como la creatividad y la resolución de problemas, trabajar competencias STEM desde un enfoque multidisciplinar y poner en práctica habilidades como el trabajo en equipo, el liderazgo, la adaptabilidad, el manejo de tareas múltiples, el deseo de aprender y estar a la vanguardia.
La I Olimpiada Nacional de Telecomunicaciones está organizada por el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Telecomunicación (COITT) y el Colegio Oficial de Ingeniería de Telecomunicación (COIT), junto a la Conferencia de Directores de Escuelas con Grados de Ingeniería en el Ámbito de Telecomunicación (CODIGAT) que aglutina a una veintena de escuelas universitarias como patrocinadoras y colaboradoras entre las que se encuentran la Escuela Politécnica de Cáceres y el Centro Universitario de Mérida de la Universidad de Extremadura.
El director general señala que "los nuevos modelos de emprendimiento exigen una reconversión tanto de infraestructuras como una reconversión cultural en la que, una vez más, los ingenieros de telecomunicación van a jugar un papel decisivo".
La importancia del 5G
Y si importante es el papel de las telecomunicaciones para esa reconversión de muchas empresas, no lo es menos para otro de los grandes retos que Extremadura tiene como región: el reto demográfico, la eliminación de brechas territoriales que permitan que haya igualdad de oportunidades sea cual sea el territorio.
En este sentido, el propio Pablo García participó recientemente en la XVI Feria Tecnológica Aotec en Elche (Alicante), en la que señaló al 5G como una de las grandes oportunidades de presente y futuro.
"El 5G es una oportunidad para que no sólo atendamos a porcentajes de población, sino también a todo el territorio", dijo, antes de recalcar que "hay que llegar a donde se puede generar economía y donde interesa tener esa conectividad".
Asimismo, el director general precisó que "las administraciones somos responsables de que los servicios asociados al despliegue de fibra óptica lleguen a todos, incluido el mundo rural, para esa tan deseada cohesión territorial".
En conclusión, la administración pública no sólo tiene la misión de evangelizar y despertar vocaciones entre los más jóvenes sino que también tiene que poner su granito de arena invirtiendo en la conectividad del territorio.