La compleja arquitectura de datos volcados en un gran departamento municipal como puede ser el de Urbanismo en una gran ciudad como Madrid exige una constante adaptación a los nuevos tiempos.
Hace años, quien quisiera consultar un expediente sobre una determinada parcela, debía acudir al ayuntamiento y conseguir la pertinente montaña de papeles. El nivel de detalle que deseara iba a ser directamente proporcional a las horas que debía pasar frente a los documentos.
El gran salto evolutivo llegó con los visores on line. Mediante esta herramienta, cualquier ciudadano (o cualquier funcionario) podía acceder a esa parcela y a sus características desde su ordenador. El tiempo de consulta se redujo drásticamente.
Pero este innovador sistema aún tenía margen de mejora. El visor cartográfico exige conocimientos urbanísticos pero también cierta paciencia, puesto que para llegar a un determinado tipo de información había que pasar por muchas ventanas adicionales. Muchos clics, demasiados clics.
Así que el siguiente salto evolutivo, sí o sí, encaminaba todo el proceso hacia un sistema de inteligencia artificial. En otras regiones, como en Murcia, el experimento se ha orientado hacia el padrón; en Madrid, han arriesgado con el urbanismo, mucho más complejo a nivel administrativo.
Ese sistema se llama Proyecto Cibeles y cuenta con la inestimable colaboración de Alexa, el altavoz inteligente desarrollado por Amazon Web Services (AWS). "Con este sistema, reducimos un 80% el tiempo que habitualmente necesitábamos para conseguir una información", explica Jesús Cerezo, jefe de servicio de Integración de Procesos en la Subdirección General de Innovación e Información Urbana del Ayuntamiento de Madrid.
Este técnico atiende a D+I para hablar de este proyecto y este mismo jueves lo expondrá en un evento organizado por AWS sobre digitalización y transformación del sector público.
Como el lector ya habrá deducido, la intención es establecer una comunicación entre el usuario y el altavoz Alexa en torno a la información urbanística. Según explican desde AWS, "el uso de la voz se traduce en una mejora significativa de la experiencia de búsqueda de información, dado que el procesamiento del lenguaje natural considera la pregunta completa y no sólo las palabras clave".
La misma compañía revela que en la actualidad se estima que el 50% de usuarios utilizan ya las búsquedas por voz. En el caso del Ayuntamiento de Madrid, se trata de implementar las búsquedas por voz aplicadas al urbanismo.
Lo primero que ha hecho el consistorio de la capital es generar un servicio web de planeamiento que devuelve toda la información disponible necesaria.
De esta manera, invocando el servicio mediante una única petición, se obtienen para una posición geográfica determinada todos los parámetros urbanísticos que figuran almacenados en las bases de datos corporativas, accesibles como se menciona más arriba a través de los distintos servicios de mapas.
Según Jesús Cerezo, los cinco parámetros sobre los que se han diseñado las búsquedas son el uso del suelo, la edificabilidad, la normativa asociada, el último expediente tramitado y el nivel de protección patrimonial.
Sobre estas cinco áreas, cualquier usuario puede preguntar a Alexa sobre una determinada parcela. En pocos segundos, tras escuchar la respuesta del altavoz, tendrá la respuesta que está buscando.
"Evidentemente esto ha sido posible gracias a que toda la información necesaria estaba previamente modelizada y correctamente almacenada", explica el jefe del servicio. Y reconoce que "a día de hoy es imposible aplicar este sistema en ayuntamientos pequeños, que no disponen de ese trabajo previo convenientemente realizado".
Varias fases
Y añade, orgulloso, "si la empresa Saturno Labs ha podido desarrollar este sistema en un tiempo récord de tres meses es precisamente porque todos los datos estaban ya previamente modelados". Bromea ante el hecho de que "casi nos costó más tramitar el contrato que desarrollar el proyecto".
El Ayuntamiento de Madrid puso en manos de Saturno Labs el desarrollo del Proyecto Cibeles tras un concurso y esta empresa consideró que el mejor aliado para ponerlo en marcha era AWS y su dispositivo Alexa.
Cibeles ha tenido que pasar por varias fases. En primer lugar, se trató de verificar si una máquina era capaz de inferir la intención de la pregunta. Para detectar las posibles intenciones dentro de la pregunta se creó una clasificación de la información que podía ser solicitada. A partir de ahí, y mediante el empleo de DialogFlow, se entrenó al sistema para lograr un porcentaje mayor de acierto.
Superado ese paso, se trataba de detectar la posición para la cual se demandaba información dentro de la pregunta formulada. Para resolver esta cuestión se adoptó como punto de partida, como opción más plausible, que el usuario se refiriera a ella por una dirección determinada (nombre de la calle y número).
Solventadas estas cuestiones, solo quedaba definir la interacción. "Se ha tomado la decisión de fragmentar la información con el fin de conseguir interacciones más cortas, ofreciendo siempre la posibilidad de, bien acceder al resto de información disponible, bien recibir toda la información mediante un correo electrónico, que contiene además enlaces a la documentación relativa de cada expediente administrativo que afecta a la posición que es objeto de consulta", explican desde AWS.
También 'chatbot' en Twitter
Toda la interacción con los servicios web municipales se ha resuelto con funciones Lambda serverless de Amazon Web Services, además de otros servicios en la nube de AWS como DynamicsDB, CloudWatch, IAM y otros.
El uso de esta solución tecnológica combinada entre DialogFlow y funciones lambda de AWS ha permitido exportar la solución a Twitter generando un chatbot. De esta manera se pueden enviar mensajes directos o menciones a la cuenta @InforUrbanMadrid y así iniciar un diálogo con los mismos criterios que se usan para la interacción por voz: una única petición a los servicios web y entrega de la información con interacciones cortas.
Jesús Cerezo es consciente de que, "aunque facilitemos la interacción entre los ciudadanos y los servicios de urbanismo, estamos ante una audiencia muy minoritaria".
Y esa evidencia abre dos caminos. Por un lado "seguramente el principal público al que nos dirijamos, al menos en un momento inicial, va a ser el propio funcionariado público, que será más eficaz". Y, gracias a esa mayor eficacia, insiste Cerezo, "nos convertimos en una administración más ágil para el ciudadano".
Por otro lado, hay otros departamentos que, en caso de implantar sistemas de inteligencia artificial como este, "sí pueden llegar a más ciudadanos, por el tiempo de servicio que prestan". Es más, este técnico revela que "ya hay departamentos municipales que se han interesado por Cibeles".