La nueva economía digital que se está construyendo en nuestro país y que pisó el acelerador tras la pandemia, comienza a dar síntomas evidentes de que un nuevo tejido empresarial se abre hueco en el panorama español de la mano de la disrupción e, incluso, lleva sus propuestas revolucionarias hasta sectores que se resistían a abrazar el uso de las nuevas tecnologías.
El caso de las ópticas es uno de ellos y en este campo emerge con fuerza una startup que afronta este año un momento de inflexión en su proyecto. Su nombre es Project Lobster.
"Nosotros solo vendemos nuestro producto, nuestra propia marca y la tecnología se manifiesta en todos los aspectos que puedas pensar: desde cómo diseñamos el producto y que basamos en el feedback que recogemos en tiempo real desde las tiendas; en la producción de gafas, los datos del óptico se pasan al laboratorio al momento, lo que supone que las gafas estén listas en 72 horas y no en una semana".
Habla Óscar Valledor, fundador y CEO de Project Lobster, una compañía que acaba de cerrar una de financiación de dos millones de euros, precisamente en un contexto donde el ecosistema emprendedor español atraviesa aún los efectos del 'invierno inversor' que comenzó el año pasado.
No obstante, para los proyectos de impacto, el capital 'sigue vivo'. La operación ha sido liderada por Dozen Investments, plataforma online de inversión en startups a través de la cual la comunidad de la compañía ha podido invertir en la misma.
Junto a Dozen, también han entrado nuevos socios como family offices y business angels. Además de los nuevos inversores, los socios actuales de la compañía han hecho follow-on.
Por su parte, Avançsa, entidad pública vinculada a la Generalitat de Catalunya encargada de impulsar el ecosistema empresarial catalán mediante la colaboración público-privada, también ha participado en la operación.
"El objetivo para este año es consolidar nuestra marca en España, por lo que vamos a destinar la mayor parte de los fondos en abrir nuevos espacios físicos, así como seguir innovando en el cuidado de la visión a través del desarrollo de tecnología propia", indica el emprendedor.
La empresa prevé potenciar su presencia en las ciudades en las que ya opera, Barcelona, Madrid y Valencia, y empezar a abrir locales en otras nuevas, con el objetivo de cerrar el año habiendo duplicado el número de ópticas propias.
Vimos que la experiencia de comprarse unas gafas era bastante deficitaria en España; las nuevas generaciones buscan experiencias
No obstante, su ambicioso plan de expansión, el planteamiento de crecimiento de la compañía ha puesto siempre el foco la rentabilidad.
"En Project Lobster™ preferimos primero hacer las cosas bien y luego rápido. Tenemos una obsesión por crecer de manera sostenible, por lo que todos los nuevos espacios que abrimos son rentables prácticamente desde el primer día, y vamos a trabajar para que siga siendo así con las nuevas aperturas", apunta Valledor.
Nuevas generaciones que buscan experiencias
Por otra parte, esta propuesta disruptora no conlleva un incremento del precio para el cliente final, sino todo lo contrario.
"Al reducir intermediarios a través de nuestra tecnología propia, logramos un precio asequible y un ahorro respecto a lo que se puede encontrar en el mercado", indica el fundador a D+I.
"Vimos que la experiencia de comprarse unas gafas era bastante deficitaria en España para una parte de la población, sobre todo, las nuevas generaciones buscan más una experiencia que una relación puramente transaccional con la óptica, y ahí volcamos nuestros esfuerzos", añade Valledor.
Además, España, según explicar el emprendedor, está por detrás de otros países de nuestro entorno en cuanto a la oferta de este tipo de servicios en el campo de la óptica.
Refuerzo de la plantilla
Con la nueva inyección de capital, la firma también prevé acompañar la apertura de locales con un incremento de la plantilla, ahora mismo formada por 40 profesionales, especialmente con la contratación de profesionales de la visión.
Tal y como señala Valledor, "buscamos convertirnos en los líderes del cuidado de la visión contemporánea mediante nuestros servicios 360º. Por eso, es esencial para nosotros que la experiencia sea memorable, consistente y excelente, y eso pasa por trabajar con un equipo humano de primer nivel. Para ofrecer un servicio de la mayor calidad, tenemos que trabajar con los mejores del sector”.
Crecimiento sostenido
Desde su lanzamiento hace cinco años hasta hoy, Project Lobster™ ha logrado facturar más de cinco millones de euros y sumar más de 20.000 clientes.
La compañía arrancó con una inversión inicial de 40.000 euros entre friends and family, entró en el programa de aceleración de Lanzadera de Juan Roig y en su primera ronda de inversión logró levantar 300.000 euros.
Actualmente, la marca cuenta con cinco tiendas repartidas entre Barcelona, Madrid y Valencia, todas ellas rentables. Este 2023, la startup prevé aumentar en un 50% su facturación, alcanzando los 10 locales y superar los 30.000 clientes activos.