Nueve años después del viaje del transbordador Atlantis, todo está listo para que un cohete Falcon 9 de la compañía SpaceX despegue este miércoles desde el Centro Kennedy de Cabo Cañaveral (Florida) con una nave con dos astronautas de la NASA rumbo a la Estación Espacial Internacional (EEI).
No solo es el primer viaje espacial orbital tripulado desde suelo estadounidense desde 2011, sino el paso final antes de que el Programa Comercial Tripulado de la NASA certifique a Crew Dragon para misiones operativas de larga duración en la estación espacial. Durante la Demo-2 se van a probar los sistemas de vuelo, el cohete, la nave y el proceso de aterrizaje diseñados por la compañía fundada por Elon Musk.
El objetivo es que la NASA pueda enviar a sus astronautas a la EEI en vuelos comerciales desde Estados Unidos en lugar de hacerlo desde Rusia como ha ocurrido desde que terminó el programa de transbordadores con el Atlantis. También se busca sentar las bases para los planes de exploración futura de la Luna, a partir de 2024, y Marte, a partir de 2030 (Programa Artemisa).
Estas son algunas de las claves de la Demo-2
1. LA MISIÓN
Si todo sale según lo previsto, la misión comenzará a las 16:33 hora local (20:33 GTM) del 27 de mayo, cuando el cohete Falcon 9 despegue desde la plataforma 39A (la misma que en la misión Apolo 11) y acelere hasta alcanzar una velocidad de 17.000 millas por hora (más de 27.000 km/h).
La cápsula Crew Dragon, de 6,2 metros de altura, se separará y pondrá rumbo a la EEI, a la que llegará unas 24 horas después y donde los astronautas permanecerán entre uno y cuatro meses realizando trabajos científicos y técnicos. Mientras, el Falcon 9 comenzará su descenso para aterrizar en la plataforma flotante de SpaceX "Por supuesto todavía te quiero", en el Atlántico.
De vuelta a la Tierra, la cápsula se desacoplará de forma autónoma de la estación espacial para reingresar a la atmósfera terrestre y desplegar los dos primeros paracaídas a 18.000 pies de altura (más de 5.400 metros). Otros cuatro paracaídas se desplegarán a 6.500 pies de altura (1.900 metros) antes de que la nave aterrice frente a la costa atlántica de Florida y entre en el agua a 27 kilómetros por hora.
Los astronautas serán recogidos por el barco Go Navigator y devueltos a salvo a Cabo Cañaveral. La cápsula también se rescatará, pues es reutilizable como el cohete.
2. LOS ASTRONAUTAS
Bob Behnken y Doug Hurley serán los dos astronautas que viajarán a bordo de Crew Dragon y vivirán en la EEI durante los próximos meses.
Behnken, que será el encargado de acoplar la nave a la EEI, se convirtió en astronauta de la NASA en el año 2000, ha completado dos vuelos en un transbordador, tres paseos espaciales, es graduado en física y ingeniería mecánica por la Universidad de Washington y obtuvo una maestría y un doctorado en ingeniería mecánica en el Instituto Tecnológico de California.
Por su parte, Hurley, que está a cargo del despegue y el aterrizaje, fue seleccionado como astronauta al mismo tiempo que Behnken, ha completado dos vuelos espaciales, obtuvo su título en ingeniería civil por la Universidad Tulane de Luisiana y es piloto de pruebas de la Armada de los Estados Unidos.
3. MISIONES PREVIAS
A modo de preparación SpaceX ha completado una serie de misiones para validar la capacidad de la compañía como el primer vuelo comercial a la EEI que se llevó a cabo en marzo de 2019 sin astronautas a bordo.
La Crew Dragon se convirtió así en el primer transbordador estadounidense que consigue acoplarse de forma autónoma a la estación y volver a la Tierra. La última tuvo lugar el pasado mes de enero, cuando SpaceX probó la capacidad de la cápsula en caso de una emergencia en la que los astronautas tuvieran que escapar durante el despegue.
4. EL TRANSBORDADOR ESPACIAL Y EL COHETE
El transbordador espacial Crew Dragon tiene la capacidad para transportar a un total de siete astronautas. La cápsula usada durante esta misión puede mantenerse en órbita un total de 110 días, pero la NASA obliga a que la futura nave operacional pueda mantenerse al menos 210 días.
El cohete Falcon 9 sobre el que irá acoplada la nave espacial está compuesto por dos partes, mide un total de 70 metros de altura, tiene nueve motores y pesa más de media tonelada de kilos, pero su característica más importante es que es reutilizable, lo que abarata los costos de los viajes espaciales.
5. LOS TRAJES ESPACIALES
Una nueva era en los viajes espaciales se aproxima y con ella SpaceX deja atrás el diseño de los famosos trajes naranjas ACES de los astronautas. Hurley y Behnken vestirán unos trajes blancos de una pieza creados por el diseñador de Hollywood José Fernández, especializado en vestir a superhéroes de películas como Capitán América: Guerra Civil, Batman vs Superman o Wonder Woman.
6. BOEING Y SPACEX
En 2014 la NASA otorgó a Boeing y a SpaceX contratos por un total de 6.800 millones de dólares para desarrollar el programa comercial de transporte espacial y dejar de depender de la nave rusa Soyuz que ponía en órbita a los astronautas de la agencia estadounidense desde que está canceló su programa de transbordadores en 2011.
Desde entonces, ambas compañías han avanzado en aras de conseguir completar satisfactoriamente los viajes espaciales comerciales, unos sistemas que, una vez certificados por la NASA, se utilizarán en las misiones futuras con las que agencia pretende volver a poner el pie en la Luna o llegar hasta Marte.