La consultora Deloitte publicaba este mes las conclusiones del estudio 2020 Global Technology Leadership. Algunos hallazgos clave incluyen:
1) Las empresas que están por delante de su competencia poseen un liderazgo comprometido. Se enfocan en la innovación y los clientes para potenciar el crecimiento. Consiguen estar a la vanguardia tecnológica por medio de la visión y la estrategia, la madurez tecnológica y el liderazgo del mercado. Incrementan significativamente el presupuesto en tecnología para estar a la vanguardia. Dan gran importancia a implementar nuevos modelos de negocio trabajando la cocreación con clientes.
2) Las organizaciones necesitan líderes cinéticos para impulsar la innovación, gestionar el cambio y visualizar el futuro. Los rasgos del liderazgo que definen a los líderes cinéticos que aspiran a ser cocreadores de negocios incluyen la capacidad de cambio, visión, agilidad, innovación, creatividad, aprendizaje y asunción de riesgos.
3) Para liderar más allá de la tecnología se resalta la importancia de adoptar la agilidad.
Finalmente se destacan nueve habilidades blandas que serán fundamentales para el talento tecnológico: creatividad, flexibilidad cognitiva, inteligencia emocional, pensamiento crítico, liderazgo y gestión, negociación, pensamiento sistémico, resolución de problemas.
Alíate con startups para innovar
Es una de las ideas que proponen Andrew Shipilov, Nathan Furr y Studer Andersson en un artículo para HBR. Tomando como referencia la alianza entre Sopra y Steria los autores destacan algunas recomendaciones para crear alianzas valiosas. En primer lugar, es importante identificar el problema más valioso que merece la pena resolver.
En segundo lugar, hay que conseguir que socios potenciales estén informados del problema. En tercer lugar, se destaca emparejarse con socios que estén listos para cruzar la brecha. En cuarto lugar, hay que contratar para el éxito.
Se deben evitar contratos complejos ya que se corre el riesgo de destruir la confianza y socavar el proyecto. Por ejemplo, poner el objetivo inicial de alcanzar un Producto Mínimo Viable (MVP).
Desarrollar la IA dentro de la organización
Los autores Benjamin Cheatham, Alex Cosmas, Nehal Mehta y Dhruv Shah publicaron un artículo para McKinsey con cinco claves para potenciar la inteligencia artificial (IA)en la empresa. En primer lugar, se recomienda desmitificar la IA explicando a los empleados los beneficios, como su capacidad para la predicción, asistencia, simulación, pericia y descripción.
En segundo lugar, se propone fomentar defensores confiables de la IA. Además de la capacitación formal, a través de una academia de IA, se pueden desarrollar otras actividades educativas menos formales, como seminarios, discusiones en grupos o sesiones de almuerzo y aprendizaje.
En tercer lugar, se plantea reforzar los esfuerzos existentes de la IA empresarial. Resulta útil alentar a los empleados a usar las herramientas de IA, desde tableros hasta software de visualización.
En cuarto lugar, es importante proporcionar transparencia en las decisiones basadas en IA. Compartir instancias en las que la IA valida el conocimiento, la experiencia y fomenta la confianza. En quinto lugar, es fundamental asegurarse de que la IA proporciona valor directo a los empleados.
Reiniciar la empresa de forma controlada y segura
Los autores Daniel Küpper y Claudio Knizek proponen en un artículo para BCG un modelo conceptual con cinco pasos para reiniciar la actividad empresarial tras la crisis de forma más segura y eficiente.
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- 1) Liderazgo, personas y gestión de la fuerza laboral. rn
- 2) Cadena de suministro y gestión de la demanda. rn
- 3) Gestión y lugar del trabajo. rn
- 4) Gestión de cumplimiento. rn
- 5) Gestión de la comunicación. rn
Estos pasos pueden ayudar a reiniciar la empresa teniendo en cuenta el corto, medio y largo plazo.
La tecnología de comunicación no verbal, cada vez más cerca
Es la predicción que hacía Elon Musk en un entrevista reciente. El físico y cofundador de empresas como Paypal, Tesla Motors, SpaceX e Hyperloop está en la actualidad desarrollando, con su empresa Neuralink, un implante cerebral que podría interactuar directamente con el cerebro de un paciente para tratar lesiones cerebrales y traumas.
Musk estima que entre cinco a 10 años nos podremos comunicar con nuestros cerebros sin tener que hablar o usar palabras.
Paco Bree es profesor de la Deusto Business School