Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo. Una dieta saludable, ejercicio físico y ciertas medidas de prevención son la mejor receta para mantener sano ese órgano encargado de bombear la sangre a todos los rincones de nuestro organismo.
El colesterol, el sedentarismo y el estrés están en el origen de arritmias, trombos o infartos. Monitorizar el corazón puede convertirse en una necesidad vital para algunos pacientes. Pero los marcapasos y otros dispositivos cardíacos implantables o bien son excesivamente rígidos para adaptarse al corazón o, por el contrario, se fabrican con materiales blancos que no permiten recopilar la información necesaria.
Un problema que dicen haber resuelto en la Universidad de Houston (UH). Un equipo de ingenieros mecánicos ha desarrollado un parche cardíaco que se puede colocar directamente en el corazón para recolectar toda la actividad electrofisiológica, la temperatura o los latidos cardíacos en tiempo real.
Este parche de bioelectrónica epicárdica se basa en un material con propiedades mecánicas que imitan el tejido cardíaco, lo que permite una interfaz más cercana y reduce el riesgo de que el implante dañe el músculo cardíaco.
El dispositivo permite identificar rápidamente cualquier problema en el corazón. “Para aquellas personas que tienen arritmias cardíacas o que han sufrido un ataque – infarto, angina de pecho...- anticiparse a un evento pone la distancia entre la vida y la muerte” señala Cunjiang Yu, profesor asociado de Ingeniería Mecánica de la UH.
Según recoge el artículo publicado en la revista Nature Electronics, este dispositivo tiene “la suavidad y la deformabilidad mecánicas similares al tejido cardíaco, lo que le permite realizar un mapeo espacio-temporal de las características de conducción cardíaca y otros parámetros físicos”. Es decir, su diseño y estructura permiten que el parche se adhiera al corazón sin dañar en ningún caso el músculo. Sus componentes electrónicos puedan recopilar información simultáneamente de múltiples ubicaciones en el corazón para poder advertir ante cualquier problema.
Pero además el dispositivo puede “recolectar energía de los latidos del propio corazón, lo que le permite funcionar sin una fuente de alimentación externa”. De esta forma puede incluso “ofrecer beneficios terapéuticos como estimulación eléctrica y ablación térmica”, señalan desde la Universidad de Houston. "Nuestro parche epicárdico gomoso es capaz de realizar mapas de electrocardiogramas (ECG) multiplexados, detección de tensión y temperatura, estimulación eléctrica, ablación térmica y funciones de recolección de energía".