Romina y Noemí son dos mujeres que en los últimos meses han decidido dar un cambio a su vida profesional y explorar nuevas vías para dar un impulso a su carrera. La primera llegó hace tres años de Perú y es madre primeriza y reciente. La segunda es bióloga de formación.
Ambas se han reciclado adquiriendo conocimientos digitales que ya están ampliando con sus primeras prácticas remuneradas en empresa. Las dos confiesan que no ha sido un proceso fácil, pero sí muy “ilusionante” y que afrontan con optimismo para volver al mercado laboral.
Estas dos mujeres son parte de los 12 perfiles que han participado en la primera edición del ‘Programa de creación de talento digital para mujeres’, desarrollado por la consultora Talentivo en colaboración con la tecnológica Salesforce y la escuela de formación ISDI.
Una de las condiciones para optar a este proyecto es llevar largo tiempo en situación de desempleo. Cuando completan la formación, que reciben de manera gratuita, las alumnas obtienen la certificación como Administrador de Salesforce.
Unas habilidades técnicas que completan con soft skills como análisis de problemas, toma de decisiones, liderazgo, comunicación, trabajo en equipo, gestión del estrés, etc.
Revolución educativa
La motivación de Cristina Gallego, fundadora de Talentivo, para poner en marcha este programa ha sido la “creación de talento digital para mujeres”, ha explicado durante un evento al que ha asistido D+I para conocer los resultados de esta iniciativa. El 60% de las participantes ya está trabajando y el resto va a empezar a hacerlo en empresas como VASS, The Cocktail, Leadclic, OmegaCRM, Everis-NTT DATA y Capgemini.
“Los sistemas educativos tradicionales no están preparando a los trabajadores para seguir el ritmo de los avances tecnológicos y de las habilidades precisas para cubrir los nuevos puestos de trabajo”, ha explicado Enrique Polo de Lara, vicepresidente sénior y máximo responsable de Salesforce Iberia durante el encuentro.
Polo de Lara ha incidido en que “es necesaria una revolución educativa para el trabajo del futuro y esta transformación debe contar con la participación de las empresas, que pueden ayudar a cultivar la cultura de la formación continua, empezando por establecer mejoras en las competencias de sus propias plantillas. Las empresas son las que mejor conocen qué habilidades se necesitan y son expertas en innovación”.
Esta compañía, junto a su ecosistema de socios y las empresas que utilizan tecnologías Salesforce, creará en España 73.800 nuevos puestos de trabajo y un mercado de 19.070 millones de euros en nuevos ingresos hasta 2026. De ahí su apuesta por la “formación continua para la búsqueda de talento dentro de las propias compañías”, defiende el directivo.
Competencias digitales transversales
Uno de los retos a los que actualmente se enfrentan las empresas es que no hay suficientes personas con las habilidades digitales adecuadas para impulsar la transformación de sus empresas. “El desafío no está únicamente en las profesiones puramente tecnológicas, como expertos en TI, ciberseguridad o programadores”, ha explicado Jorge Villabona, director de ISDI CRM.
“Los trabajadores de muy diversas especialidades deben incorporar las soluciones digitales como herramientas habituales de trabajo. Las competencias digitales deben ser transversales, como lo son la lengua y las matemáticas, y las empresas juegan un papel activo a la hora de desarrollarlas”, ha añadido.
Un ejemplo de ello es la transformación acometida por Pelayo. El objetivo de su proyecto, donde el CRM de Salesforce es una pieza clave, es que esta tecnología sea el nexo de unión entre todas las áreas de la entidad (ventas, servicio, marketing) situando al cliente en el eje central de todas las interacciones y toma de decisiones, facilitando así el desarrollo y consolidación hacia la omnicanalidad que es una de las grandes líneas de su plan estratégico.
“Lo que estamos desarrollando permite inmediatez en la implantación de toma de decisiones de negocio, maximizar el contacto con el cliente y su experiencia con Pelayo”, explica Cristina Rodríguez, directora de Planificación y Procesos Comerciales en la aseguradora.
“Indudablemente la adopción, construcción, desarrollo y despliegue requiere de un importante esfuerzo formativo que permita una adecuada gestión del cambio, optimizar la herramienta y garantizar el éxito de su implementación”.
“Este proceso es un suma y sigue, no ha acabado aquí. La formación no es una opción es una necesidad para el futuro”, ha concluido Rodríguez.